Tres Mujeres, un solo Issei: El juego de Equilibrio del Corazón

1K 71 34
                                    

El paisaje se desplegaba ante nuestros ojos, revelando un palacio magnífico y glamuroso donde cada detalle parecía estar imbuido de un esplendor divino

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

El paisaje se desplegaba ante nuestros ojos, revelando un palacio magnífico y glamuroso donde cada detalle parecía estar imbuido de un esplendor divino... Las paredes resplandecían con tonos dorados y marfil, adornadas con intrincados relieves que narraban antiguas leyendas.

Las columnas altas y elegantes se alzaban majestuosamente a lo largo de la sala, sosteniendo un techo abovedado decorado con frescos celestiales que representaban el ciclo del sol... La atmósfera estaba impregnada de una calma solemne y una energía que trascendía lo terrenal.

Adentrándonos en la sala del trono, el foco se centraba en el centro donde se encontraba un trono de oro deslumbrante... Sentada en él, radiante y serena, se encontraba la figura divina de Amaterasu, la Diosa del Sol.

Su presencia irradiaba una belleza indescriptible y un aura celestial que en volvía todo a su alrededor

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Su presencia irradiaba una belleza indescriptible y un aura celestial que en volvía todo a su alrededor.. de belleza arrebatadora, su apariencia exquisita reflejaba su divinidad, con una tez pálida como la luna llena y unos ojos profundos y resplandecientes que brillan como el sol en su máximo esplendor.

Su cabello sedoso y largo, del color castaño fundido, caia en cascadas ondulantes sobre sus hombros... Cada rasgo de su rostro estaba meticulosamente esculpido, realzando su expresión serena y sabia.

¡Toc! ¡Toc!

Mientras Amaterasu meditaba en silencio, los sonidos distantes de las puertas del trono se hacían eco en la sala, anunciando la llegada de una persona... La Diosa abrió sus ojos con gracia y determinación, dando una orden para que permitan el ingreso.

- Adelante.

Las puertas se abrieron lentamente, revelando un pasillo adornado con finas alfombras rojas... El sonido rítmico de tacones resonantes se acercaron cada vez más, creando una tensión en el ambiente.

La figura de una persona, envuelta en un aire de misterio se adentró en el recinto sagrado de la Diosa Amaterasu.. Narberal Gamma, irrumpió en la sala del trono con una gracia cautivadora...

 Narberal Gamma, irrumpió en la sala del trono con una gracia cautivadora

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
El Tesoro del Infinito. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora