Internado

35.

Doyoung apretó el libro contra su pecho, retrocediendo unos pasos, escuchó a Kun gritarle a Johnny que estaba cansado de ser un tonto, se asustó al pensar que podría subir las escaleras pero en cambio pareció bajar porque escuchó sus pasos alejarse.

Dejó salir el aire, temblando y terminó cayéndose cuando vio a Johnny mirándolo, sus expresión seria y sus ojos acaramelados viéndolo sin interés.

El chico era tan imponente que no podía procesar la información nueva que su cerebro estaba recibiendo, Johnny irradiaba seguridad y clase, tenía una postura recta que Doyoung nunca pudo adquirir incluso cuando lo hacían caminar con libros en la cabeza y mantener la espalda derecha.

Johnny se puso las manos en los bolsillos del pantalón, caminando hacia él y los ojitos negros y finos de Doyoung se tornaron vidriosos, tenía miedo de que Johnny pudiera enojarse con él por escuchar, no estaba espiando, no... no iba a decirle a nadie.

Él se acercó y lo vio, aún en el piso, sin intenciones de levantarse—¿estás bien? Hace tiempo no te veía en el piso.

—e-estoy bien—chilló torpemente, levantándose, jadeando de dolor cuando la tela de su pantalón raspo la irritación en sus muslos—yo...—Doyoung sostuvo el libro como si fuera una especie de escudo—yo...

Johnny rodó los ojos, pasando de largo—haz lo que quieras, no me importa.

Doyoung tragó saliva y lo vio desaparecer escaleras arriba, mordió su labio inferior y se quedó allí, sentándose en los escalones. Johnny tenía un secreto y ahora él lo sabía, no era cualquier secreto, era algo muy íntimo y privado.

Estuvo distraído por el resto del día y por los siguientes días, pero nadie más parecía ni siquiera considerar el hecho de que Johnny fuera becado... fuera, bueno, él era pobre ¿no? Ni siquiera podía imaginarlo.

Debía haber una confusión, definitivamente era un mal entendido.

—¿qué tienes?—Ten le preguntó, sentándose a su lado en el receso—estás muy disperso desde ayer.

—yo...—¿Ten lo sabía? No, seguramente no, de otro modo por qué entonces habría molestado en años anteriores a otros becados pero no a Johnny...—estoy un poco cansado—susurró.

—uhm ¿no estás durmiendo bien?—Ten le pellizco la mejilla y Doyoung hizo un pucherito, frunciendo el ceño.

—eso duele—volvió a susurrar, tocándose el rostro.

Ten le besó la mejilla rápidamente, riéndose—lindo.

El timbre sonó y Doyoung regresó a su salón, caminando lentamente porque la irritación en sus muslos se había convertido en una herida fácilmente, si tan solo pudiera usar pantalones más cómodos y no el maldito pantalón del uniforme.

"Ah, tendré que ir a la enfermería" pensó, avergonzado, quizás conseguía alguna autorización para usar ropa más cómoda, no había manera de que la enfermera se diera cuenta del motivo por el cual se lastimó entre los muslos, simplemente había sido la cremallera del pantalón de Ten pero ella no podría saberlo.

Decidió ir justo después de su última clase, la enfermería quedaba pasando el campus, generalmente nadie andaba alrededor así que no tuvo que esperar para ser atendido, sin embargo, cuando estaba allí sentado frente a ella, a punto de explicarle la situación, la mujer recibió una llamada del director, que tenían junta de maestros.

—Doyoung esto demora un poco ¿es grave lo que tienes o puedes venir en una hora?—ella preguntó, recogiendo sus informes.

—no es grave—susurró apenado.

—está bien, entonces te veo luego, me voy primero, antes de salir cierra bien la puerta y no hagas ruido que hay un alumno descansando.

Doyoung se sorprendió cuando ella dijo aquello y se fue, miró en dirección a las cortinas cerradas y se alivió de no haber sido atendido si había alguien más, odiaria si los rumores se extendían sobre que tenía los muslos misteriosamente lastimados.

Se levantó de puntillas para salir de la enfermería hasta que vio un reconocido abrigo, se acercó lentamente y se encontró con la mirada de Johnny.

—¿por qué estás en todas partes?—Johnny preguntó, agotado.

Doyoung mordió su labio inferior, sin saber qué decir—¿te s-sientes mal?

—sí.

Los ojitos finos de Doyoung se ampliaron—¿qué te duele?—se apresuró a preguntar, abriendo la cortina para entrar al espacio privado en donde Johnny estaba, cerrando nuevamente.

Johnny sonrió divertido y le miró, tenía la mirada cansada, Doyoung nunca le había visto así—uno de los chicos de judo se molestó con Lucas y quiso golpearlo, pensé que podía interferir pero no salió bien.—Johnny levantó su camisa y Doyoung vio una marca roja que comenzaba a oscurecerse.

"Hubieses dejado que lo golpeen simplemente" pensó Doyoung, sintiendo el dolor de Johnny como propio, sin pedir permiso, se sentó en el asiento vacío junto a la camilla—¿vas a dormir aquí? ¿Por qué no vas a tu habitación?

Johnny suspiró y cerró los ojos—porque me trajeron aquí y aún me duele para caminar así que solo esperaré a sentirme mejor.

—¿q-quieres que haga silencio?—preguntó, sintiendo que lo molestaba.

Johnny volvió a abrir los ojos, esta vez mirándolo con más amabilidad—¿por qué estás aquí?

—yo—le daba pena decirlo, sus orejas se pusieron rojas y sus ojitos se tornaron vidriosos—me lastime—susurró.

Johnny le miró, frunciendo el ceño—¿dónde?

Se mordió el labio inferior y no le miró—tengo los muslos lastimados—confesó—pensé que la enfermera podía darme una crema o algo pero tuvo que irse...

Johnny se incorporó, haciendo una expresión adolorida mientras se tocaba el abdomen, Doyoung entró en pánico cuando le vio bajarse de la camilla y abrir la cortina—¿q-qué ha-haces?—preguntó asustado.

—aquí—Johnny abrió uno de los cajones de un mueble—Jaehyun viene a pedir cremas todo el tiempo—él buscó entre los potes y encontró uno—esto servirá.

Doyoung atrapó la crema que Johnny le tiró, mirándola—gracias—susurró.

El chico regresó a la camilla, bostezando—puedes irte.

—¿no me puedo quedar?—jugó con el pote en sus manos, sintiéndose atrevido.

—haz lo que quieras.—Johnny volvió a acostarse, y no demoró en quedarse dormido, Doyoung acercó la silla y le miró de cerca, queriendo tocar su cabello pero sin animarse a hacerlo.

Solo se quedó allí.

Saber un secreto de Johnny, compartir algo íntimo suyo con él, eran cosas pequeñas y minúsculas que no deben ser importantes pero que sin embargo, le hacían sentir cosquillas, como si de algún modo finalmente pudiera acercarse a Johnny, sabiendo algo de él que nadie más sabía.

Recostó su rostro en la camilla, mirando desde aquella posición a Johnny y entonces se atrevió a tocar su mano, su corazón se aceleró, era suave y tibia, casi fría.

"Ojalá pudiera sostenerla" pensó, quedándose dormido también.

Jaehyun entró a la enfermería, buscando a Johnny para llevarlo a la habitación y lo que vio le estrujó el corazón, su mejor amigo estaba dormido y a su lado lo acompañaba Doyoung, quien se había dormido también, sosteniéndole la mano.

Suspiró y cerró la cortina, saliendo afuera de la enfermería para sentarse allí y esperar.

Era curioso, como su historia de amor con Sicheng podía parecerse a la de Doyoung con Johnny, ambos estaban enamorados de personas que no pertenecían a su ámbito y que a pesar de todo, era inalcanzables a su modo.

Nota: jaehyun es team johndo