56.

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No era un niño pequeño pero decidió comportarse como uno, se escondió en su habitación y le quitó la batería a su celular, eliminó sus redes sociales y pidió que todos los empleados en la casa y cada persona fuera de ella fingiera que no sabían en dónde estaba o que hacía.

Sin salir, con las cortinas cerradas, solo viendo televisión y comiendo en el cuarto, yendo a ver a Gong Myung todo disfrazado para que nadie pudiera decir que lo vio.

Los dos meses de vacaciones que tenía antes de empezar el terciario fueron sencillos y simples, su padre estuvo rodeado de abogados y se le oyó más de una vez gritar furioso pero Doyoung fingió no existir y él no fue a molestarlo a la habitación, estaba solucionando todo por sí mismo, le convenía hacerlo, él no quería que se casara con Ten porque incluso si lograba firmar todos sus bienes como propios y no compartidos durante el matrimonio, todavía podía existir un fallo en los documentos y Ten podría quedarse con gran parte de las inversiones de los Kim.

Era complicado.

Sabía que no era humano lo que hacía, desaparecer de la vida de alguien más así como si de pronto fuera una ilusión pero él no tenía el poder ni la voluntad de persuadir a Ten de no casarse y de separarse, Ten nunca aceptaría algo así, él pondría esos ojos de cachorro que se pondrá a llorar y Doyoung no sabría qué hacer.

Esperaba algún día disculparse correctamente porque incluso si el tiempo pasa y la vida sigue, todavía le debía una disculpa.

¿Por qué Ten no podía verlo?

El amor no era pedir perdón, él debería comprender que con todas la disculpas que Doyoung debería darle, el amor no podía estar en él.

Era vergonzoso contarle a su terapeuta como había solucionado sus problemas, escondiéndose detrás del poder e influencia de su padre, incapaz de levantar la mirada y enfrentar sus problemas, dificultades en las cuales se había metido por voluntad propia, solo porque se había sentido amado por un instante, solo porque brillaba más que cualquier diamante, si hubiese prestado atención, si tuviera responsabilidad afectiva no solo por los demás sino por sí mismo, entonces podría haber diferenciado los diferentes tipos de brillar y hubiese sabido que la luz que Ten irradiaba nunca lo iba a iluminar como él podría iluminarse por sí mismo.

—Ten dice que va a encontrarte y hablar contigo, está seguro de que soy el responsable de la interrupción del compromiso y cree que te tengo encerrado ¿qué vas a hacer?—su padre estaba apoyado en el marco de la puerta, viéndolo.

Doyoung a penas dejaba ver sus ojos, cubiertos por todas las mantas que tenía—él tiene prohibido regresar al internado y tiene prohibido entrar aquí, no voy a encontrarme con él en ningún momento—susurró, lleno de remordimiento.

Su padre se quedó allí parado, mirándolo sin ningún tipo de expresión concreta—eres increíble—murmuró, dando la media vuelta—lo vetare de la empresa así comienzas a hacer tus prácticas.

Doyoung se acurrucó más entre sus mantas, cerrando los ojos y pensando "¿puedes darme un descanso?".

Pero para su padre no había descansos y lo hizo "ponerse presentable" para que finalmente en la empresa de cabecera lo conocieran.

Con un traje a medida, esa postura que tanto odiaba mantener y dejando libre todos sus pensamientos, Doyoung acompañó a su padre en la parte trasera del auto, había entrado muy pocas veces a la empresa, no precisamente porque quisiera, su madre solía tirarlo del brazo para hacerlo entrar, también sus distintas niñeras lo habían pasado a dejar por diferentes razones.

Entrar como un hombre o el intento de uno, fue diferente, habían filas de empleados esperándolos, los cuales se inclinaron cuando lo vieron, Doyoung quería pedirles que no se inclinarán pero no era solo ante él sino también ante su padre quien era estoico e increíble en un buen sentido.

—mi hijo va a estar entrando y saliendo de la empresa por el siguiente mes, desde finanzas hasta recursos humanos—destacó, señalando a quienes serían los encargados de cada departamento—lo van a orientan como si fuera un  novato, sin embargo, quiero que tengan presente que este chico será el CEO en cuanto decida retirarme.

Doyoung sabía como se veía delante de todos los empleados, era el niño mimado de un gran empresario, seguro pensaban que no tenía idea de cómo manejar los documentos que aquí se procesaban y estaban en lo cierto.

Esperaba que le tuvieran paciencia.

—paciencia no es mi segundo nombre—le dijo el señor Oh—no sé nada de enseñarle a los demás así que mira lo hago y repítelo, si tienes una queja, dile a tu padre, no me importa.

—está bien—susurró Doyoung, anotando en su cuaderno todo lo que le parecía relevante—puedo aprender viendo.

El señor Oh lo miró curioso—no te pareces a Gong Myung, cuando le dije eso la primera vez, se quejó en la oficina de empleados.

—no soy una persona alborotadora—Doyoung revisó el orden alfabético de los documentos—y no tengo permitido equivocarme así que no puedo causar problemas, si quieres buscar una pelea conmigo, solo perderás el tiempo, no sé pelear y mi padre se enfadara por ello.

Mirándolo fijamente, el señor Oh tiró una carpeta sobre la gran mesa en su oficina—son las claves de los movimientos bancarios, el orden alfabeto es pura cortesía de movimientos viejos, los nuevos solo se manejan desde el ordenador.

—gracias ¿hay algo específico que deba saber sobre el sector de finanzas?—Doyoung tomó asiento, suspirando interiormente, odiaba pensar.

El último mes entre esconderse en su habitación y fingir ser una persona normal continuó, sino estaba en los demás departamentos entonces estaba junto a su padre en su gran oficina en el último piso del edificio.

Intentaba llevarse el ritmo pero era difícil, su padre llevaba haciendo esto desde hace más de veinticinco años mientras que él había empezado hace un mes y ni siquiera hacía nada en específico, solo trataba de entender qué se suponía que debía hacer.

Así, el regreso al Internado fue evidente y el cambio de cuartos prosiguió.

Muchos de los estudiantes que habían estado el año anterior ya no continuaban estudiando en el Internado.

Johnny, Ten, Jaehyun e incluso Kun, ninguno de ellos regresó.

Y Kyari no continuó el terciario en el internado, luego del asunto de graduación, su padre decidió cambiarla a una universidad privada.

—¿con quién te tocó compartir habitación?—Sicheng preguntó, curioso.

Doyoung miró el nombre de su compañero e hizo una mueca—Jungwoo pero no sé quién es.

Sicheng asintió curioso—a mi me tocó con Lucas.

Ambos compartieron una mirada profunda—espero que no sea difícil para ti.

—espero.

Sabía que posiblemente Sicheng sabía de Johnny e incluso de Ten, después de todo su amigo había comenzado a salir con Jaehyun, pero también era consciente de que Sicheng no le contaría nada porque si quería olvidar y dejar ir todos sus sentimientos entonces debería comenzar por no querer saber de ellos.

De ninguno.

—vamos a juntarnos en el lobby cuando termines de ordenar tus cosas—Sicheng dijo, yéndose a su habitación que por suerte quedaba en el mismo piso.

Doyoung asintió y abrió la puerta de su cuarto, encontrando a dos chicos besándose en la cama, gritó sorprendido y Sicheng regresó.

—¡te dije que iban a llegar!—chilló un chico bajito que se levantó apresurado de la cama y salió de la habitación sin decir nada más.

Jungwoo se quedó en la cama, riéndose.

Nota: bueno, había estado en entregas y exámenes por eso no actualice uwu todavía tengo más entregas y exámenes jaja pero bueno.

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