Se lo merecen, sobre todo ali, que siempre está muy pendiente. Gracias por el apoyo 💓.
Las dos semanas más largas habían pasado casi tan lento, como mi corazón cuando vi a la persona que me llevaría justo a donde se encontraba Charles.
Yo no había tocado el tema del "SUBTERRÁNEO" con Jack las 4 veces que nos habíamos visto, pero si había mantenido alerta su rutina y convencido de que el día de la fiesta de la fundación Stirpe, el debería dejar ir a sus empleados más témprano, es cierto que su casa es un lujaso y que tiene mucho dinero en su cuenta bancaria, pero más allá de la cristalería que ocupa toda su vivienda, Jack no era muy excéntrico, de hecho, se mostraba genuinamente interesado en mi día a día, y hasta en si había comido, que mi madre ya estaba empezando a hablarme bien de él, solo por sus conversaciones a solas, las dos primera veces que me había recogido, sin embargo, el gran problema que opacaba a la noche era la cruel y real desconfianza de Thomás, su chófer y buen amigo, que al parecer, no quitaba sus ojos de mi, lo que me hacía sentir en parte incomoda, pero he librado mucho en la vida con sentimientos como esos y este, no sería el primer obstaculo que iba a dejar pasar, menos estando tan cerca de volver a entrar al subterráneo.
Habia encontrado el taller de maquillaje y peinados especiales de jiovanni y había contado con suprema discreción, pasándole los billetes por debajo de la mesa, lo único que nesecitaba era que todo saliera de acuerdo al plan, pero no había pensando en un detalle que retrasaba todo.
- Benditas muletas- exaspero con la mano en la cabeza y luciano se ríe- no estoy para tus jueguecitos- le declaró y miró la hora que da el gran reloj pegado en la pared. 8 de la noche, en media hora llegaría Thomas y Jack por mi, durarían 40 minutos hasta el salón donde se celebra la fiesta de la fundación, y Thomas tendría unos 20 minutos para llegar a la casa de Jack, casi nada.
- Lo siento pero ni loco me pondré esas botas ortopédicas de pacotilla- Luciano, me mira y niega con la cabeza- ni lo creas.
Trato de suspirar y pensar en algo. Miro el rejol. 8:10. Esto es un lío.-¿Qué quieres que haga? Lo que sea Luciano, por Dios- trato de rogarle pero él se hace el desentendido. 8:15.
- Puedo hasta conducir si quieres porque he mejorado mi coche pero... No lo haré, lo lamento, mi rosa pero no lo hare- lo miro de la manera más fatal del mundo, queriendo que todo caiga en su peso y comienzo a pensar... ¿Quién carajos se va a querer adentrar a la casa de un millonario y robar una pequeña tarjetas olo porque yo solo pido?. 8:20.
-¡Carly! - grito y lucíano se espabila, cojo mi celular de la mesilla y marco, al primer timbrazo agarra el celular - Carly, por Dios, nesecito pedirte algo urgente- le hablo apresuradamente.
- Claro, señorita Marié, dígame.
- Carly, harás algo con total discreción, pero lo tienes que hacer lo mas rápido posible, ¿si? Enviaré a lucíano a tu casa, él te explicara todo- veo la cara de mi amigo con una "O" formada y cuando escucho el "por supuesto" de Carly" cuelgo- ni una palabra y ve a buscarla- le digo apuntandolo amenazadoramemte con mi dedo y, sin esperar su respuesta salgo de mi habitación, con el corazón a mil, el moño alto en mi cabeza y el pomposo vestido color oliva puesto.
8:30.
- Deslumbrante- dice cuando me ve y yo lo saludo con dos besos en la mejilla y una sonrisa no tan falsa.
- Gracias, tu te ves muy bien- tiene un smoking azul oscuro y una sonrisa que alumbra toda la calle.
- Gracias. ¿Preparada? - yo asiento y Jack me abre la puerta del conductor.
- Señorita Marie- me saluda Thomas y yo le sonrió con un leve gesto en la cabeza. El carro comienza a marcharse.
- Es increíble lo que Stirpe hará Jack, te felicito-comienzo a conversar con Jack y a despistar a Thomas.