Guillermo:
Por fin era sábado y podría descansar, lo bueno que tenía era que los sábados y domingos tenía libre y me dedicaba solo a mis tareas pendientes de la semana.
El estar estudiando y dando la guardia en el hospital era tan cansado, pero ya solo le faltaban otros 2 años, no podía rendirme a estás alturas.
Era de mañana por lo que decidí salir a caminar un rato y posiblemente ir por una nieve, me cambié y salí de mi departamento bajando las escaleras.
El otro día que ví a Samuel con una cangurera me pareció de lo más tierno, pero no podía decirle que me encantaba verlo cómo mamá y papá a la vez.
Caminé hasta la plaza que quedaba a 10 min. De dónde vivía, estaba más céntrico dónde vivía que dónde vivía con mis papás. Ingresé a la paletería comprando una paleta de kiwi.
Caminé ahora a la plaza viendo cómo había parejas, familias o hasta amigos caminando normal. Extrañaba eso pero mi único amigo estaba lejos y Alex se la pasaba ocupado con su novio o con el trabajo.
Me senté en un banco comiendo la paleta mirando a algunos niños correr tras las palomas y otros que jugaban con el jabón a hacer burbujas.
Era un día muy tranquilo, pero el ver a todas esas personas pasarla con alguien o tener con quien platicar me hacía sentir solitario, casi nunca salía de paseo, siempre estaba encerrado haciendo tareas, estudiando o si no estaba en el hospital trabajando o haciendo guardia.
Ese día tenía libre, la tarea la había terminado y quería despejarme después de tantas horas de estudio. Pero en eso ví a un niño que se me hizo conocido y ahí estaba era Israel que jugaba con las burbujas.
Si estaba el ahí, entonces Samuel lo estaba no? Lo busque con la mirada, hasta me cambié de banca y pude verlo ahí estaba parado junto a Julieta y al parecer ambos estaban discutiendo.
Es una pena saber que esos niños tienen que soportar las peleas de sus padres, no debía importarme o si? Pero me es inevitable no interesarme cuando se trata de Samuel, ya sé que me abandono y cambio pero aún así, aún lo sigo queriendo.
Pude ver cómo Julieta le daba una cachetada a Samuel y abrí mis ojos con sorpresa, Azucena comenzaba a llorar en los brazos de su madre. Si qué no están bien, voy o me quedó? Tantas preguntas!!
Me levanté y camine a dónde ellos, que estaba haciendo!? Piernas detente!! No lo hagan!!! Vuelta atrás!!! Y cuando menos pensé estaba delante de ellos. Ambos me miraron.
– Tú que mierda vez?!! Se te perdió algo?
– Julieta para!! Por dios! Ya dame a Susi, la estás asustado
– Ya te dije que no te la daré ni siquiera es tú maldita hija, es mas mía que tuya y te dije que yo haré lo que quiera con mis hijos
– Estás idiota?! Ya dámela maldición, te dije que no me importa que no sea mía que la cuidaría como mi hija
Di unos pasos hacia atrás, está pelea no me correspondía porque me estaba queriendo meter? Pero azucena ni dejaba de llorar la pobre niña no tenía la culpa e Israel estaba mirando a sus padres.
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Descubre Tus Secretos
Teen FictionGuillermo acaba de cumplir 18 años y ya estaba buscando una universidad privada, no le fue difícil encontrar buenas ofertas ya que por sus calificaciones tan excelentes le ofrecían becas de hasta el 75% Para cuando Guillermo les dijo a sus padres...