Cosas de Padres ヅ Stray Kids

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"LLUVIA":

Jeongin y Christopher acostumbraban salir los Domingos, llevando a los niños a comer afuera, o a caminar por las calles de Seúl, incluso algunas veces iban con los abuelos de los pequeños. Pero, aquel día el clima no era muy favorable, a pesar de que las lluvias habían sido tranquilas ese año. Por primera vez el cielo se rompió, desatando una gran tormenta que amenazaba con durar todo el día.

El frío clima invitaba a la familia a estar envuelta en sus cobertores, bebiendo algo caliente y viendo algunas películas.

Todos se hallaban en la sala, con el colchón inflable que usaron la primera vez que el trio de hermanos llegó a dormir con los mellizos y Minho ya integrados a la familia. Las luces apagadas, a excepción de la de la cocina, todo el lugar con cobijas y sabanas puestas para mayor comodidad.

El ambiente familiar era cálido, y tan silencioso (al contrario del principio, cuando los más pequeños hacían comentarios de la película como si nunca la hubiesen visto y Seungmin cuestionaba todas las acciones de los personajes). El mayor de todos estaba sentado, con una mano ligeramente estirada hacia la derecha, acariciando la mata de cabellos negro de Minho, permitiendo que durmiese más tranquilo que nunca. Abrazando de manera inconsciente el cuerpo de Jisung, quien también había caído dormido casi al principio de la película, acurrucado al cuerpo del mayor en busca de calor.

La otra mano de Jeongin rodeaba al pequeño cuerpo de Seungmin, quien se había puesto en posición fetal para colocar su cabeza en las piernas del pelinegro mayor, mientras sus deditos juagaban con sus propios labios, totalmente entretenido por la película, mientras lentamente sentía sueño.

También acostado, Christopher miraba su celular con Félix casi sobre su pecho, ya casi sobre su cuerpo, abrazando a I.N con su brazo enyesado lleno de colores, babeando al zorro.

Hyunjin y Changbin eran quienes más despiertos estaban entre los niños, el menor dando toda y pura atención a la película, mientras que el mayor estaba distraído mirando la ventana de la sala que daba con el exterior. Aún con las cortinas entrecerradas, podía ver las gotas golpear el cristal y resbalar por este hasta perderse.

Los minutos continuaron avanzando hasta que la película llegó a su fin, presentando los créditos en una pantalla negra. Christopher despegó la vista de su móvil, solo para ver como todos los niños finalmente se durmieron, sin poder evitarlo por la calma que les rodeaba.

Se fijo en su novio, esperando verlo, si no dormido, al menos cabeceando, pero no. Estaba con los ojos cristalizados, mirando a los menores. El peli morado dejó el móvil de lado. No podía levantarse, aquello significaría despertar a Félix y no quería eso, no con su amado en ese estado. Estirando el brazo, posó su mano en la rodilla del pelinegro, dando un apretón para llamar su atención, funcionó. - ¿Estás bien? - cuestionó en un susurró.

El castaño mordió su labio, negando con la cabeza. Anhelaba un abrazo de Christopher, pero sabía que no podía acurrucarse en sus brazos como deseaba, por lo que solo pudo poner su mano sobre la del menor. - Yo... - Empezó a decir también susurrando, sin poder hablar más por unos segundos. Necesitaba acomodar todo en su cabeza. - ¿No tienes miedo?

- ¿Miedo? - ¿Acaso se refería a la tormenta? Ni siquiera se escuchaban rayos o truenos.

Los dientes de Jeong volvieron a capturar el labio propio, cerrando sus ojos para contener las lágrimas. - Miedo de que, un día, quieran buscar a sus familiares, a su madre.

Chris tardó en comprender a que se refería. De hecho, no lo hizo hasta que Jeongin miró a Félix, quien restregó de forma inconsciente su rostro en la camisa del peli morado. El mayor temía a que llegase el momento donde, algunos niño adoptados, desean conocer a sus verdaderos padres, o reunirse con sus parientes de sangre.