079

2.3K 311 102
                                    

"MOLESTO":

Jisung bajaba los escalones de dos en dos, con una hoja y la otra la usaba para deslizarla por la pared. Rio al llegar al suelo, y sus ojos buscaron entre toda esa gente a su appa. El restaurante de Jeongin estaba lleno, por lo que sus empleados iban de un lado a otro con platillos y órdenes.

- ¡Hyung! - El mesero observó a Jisung pero no dejó de caminar, dejó el pequeño pastel en medio de la mesa y repartió las bebidas según las ordenaron. Les dijo que cualquier cosa que necesitarán podían pedirla, y luego de una reverencia, fue hasta el niño.

- Sunggie, Innie hyung te ha dicho que no debes bajar cuando hay mucha gente.

- Quiero que vea mi dibujo. - Lo levantó, y el hombre sonrió negando con su cabeza.

Apuntó al piso superior. - Sube Sunggie, yo le diré a Innie hyung que suba cuando pueda ¿Okay? - No esperó a una respuesta, y se fue hacia otra mesa para recoger un nuevo pedido.

El pequeño frunció su ceño y levantó sus labios en una trompa al tiempo que tomaba con ambas manos su dibujo para verlo. Eran todos ellos, su familia, sus appas y hermanos encontrando un tesoro marino, propuesta de Félix, para aclarar. Podía decir que era el mejor que había hecho.

Se iba a dar la vuelta para obedecer y subir, pero reconoció esa cabellera pelinegra acercándose. - ¡Appa!

Jeongin miró a su pequeño, y apurado, fue hasta él. - Bebé sube ¿Sí?

- ¡Mira, mira! - Movió su dibujo frente a él, para que lo admirase.

- Está hermoso. - Le dijo, casi sin verlo. Le hizo dar media vuelta y dio una palmadita en la espalda. - Ve con tus hermanos.

Besó su mejilla y fue hacia afuera del lugar, a una de las mesas del exterior. Jisung, algo triste, observó a su padre irse. Observó como un hombre se levantaba de su asiento para saludar de manera efusiva a Jeongin. Escuchó la risa de su appa mientras el hombre le hablaba. Jisung se enojó, y subió las escaleras de dos en dos.

En el piso de arriba, Changbin estaba acostado en el tapete de goma que se extendía en todo el suelo, con Seungmin a su lado jugando son su cabellera. Por alguna razón, aquello le calmaba y le adormecía, aunque en ocasiones tiraba de sus cabellos.

Félix se encontraba jugando son unos bloques LEGO de su hermano menor, quién luego de tanta insistencia le permitió usarlo. Minho y Hyunjin coloreaban sus dibujos se suponía que los tres llevarían sus dibujos terminados al mismo tiempo, pero Jisung terminó antes y no pudo contenerse. Se sentó enojado, muy al contrario de cuando se había marchado, y arrojó su dibujo a la mesa.

- ¿Qué paso? ¿No le gustó a appa? - Preguntó Félix, notando su disgusto.

Hyunjin se levantó directo a ver el dibujo. - Te dije que era mucho azul.

- ¡Es el mar! - Apuntó. - Pero no, appa dijo que estaba bonito.

- ¿Entonces por qué esa cara? - Minho le interrogó, sin verle pues se esforzaba en colorear.

Se la pensó por un momento, pues no estaba seguro de que responder. - Hay un señor feo que quiere robarse a appa. - Se había puesto celoso de verle, ya era claro. Extrañaba a su appa Chris, y ver a Jeongin reír con alguien que no conocía le hizo sentirse muy, pero muy celoso.

- ¿Eh? - El menor de los mellizos frunció su entrecejo.

- Sí, le estaba haciendo así, - Parpadeó varias veces, como si le coqueteara con los ojos. - Y así. - Levantó los labios como lanzando un beso. Estaba exagerando, pero sus hermanos le creían.

》 Creo que es un brujo, - Jisung acusó, preocupado. - ¿Y si está hechizando a appa Innie?

Hyunjin negó, sintiéndose asustado de que aquello estuviese pasando. - ¡Tenemos que salvarlo!

Le habló a Minho, moviéndolo del brazo. Él era el mayor, él debería de solucionarlo.

Minho se levantó del suelo, y bajó algunos escalones para verlo por sí mismo. Pudo ver cuando Jeongin entregó un café a un hombre, y como este sonreía diciéndole algo, causando que volviese a reír tan alto que logro escucharle a la perfección. También se molestó. Se dio cuenta de que Hyunjin y Félix estaban a su lado, viendo lo mismo, y los tres subieron rápido. - ¿¡Qué vamos a hacer!? - Preguntó el niño de cinco. Minho comenzó a pensar, y le dijo.

- Hay que hacer un buen plan.

- ¡Como una misión de espías! - Félix mencionó ansioso.

De pronto, también les emociono la idea de verlo como un juego. - Tendremos que mandar a nuestro mejor hombre. - MInho llevó una mano a su mentón, para verse más serio.

- ¡Yo! - Félix levantó los brazos.

- ¡Yo, yo, yo, hyung! - Le repitió Jisung.

- ¡No, no, yo Minho hyung! - Hyunjin aplaudió.

- No, son buenos elementos, pero hay alguien que podrá cumplir con la misión de manera perfecta. - Sonrió, divertido de ver a sus hermanitos quejarse. - El elegido es ¡Seungmin!

El menor levantó la cabeza al escuchar que le mencionaron. Pensó de primera que le iban a regañar, por lo que alejó sus manos del cabello café de su hermano mayor. Minho se acercó, y le dijo. 》 Minnie, ¿Qué crees?

- ¿Qué? - Preguntó, sin saber que pasaba.

- Un señor se va a robar a appa Innie, - Sus ojos se abrieron más al oír eso, era SU appa. - Dile que se vaya.

El pequeño se levantó enojado, y Minho sonrió al saber que los celos de su hermano eran más grandes que él. - ¡Yo también quiero ir! - Jisung se sumó, quería ver de cerca que hacía su hermanito.

Minho despertó a Changbin, y le hizo bajar a pesar de que apenas y podía mantener los ojos abiertos. Mientras los tres más grandes se quedaban junto a Félix en los últimos escalones, Jisung llevó a Minnie hasta el hombre. Jeongin estaba platicando con él, sin borrar su sonrisa. Había estado dando vueltas y atendiendo a otras personas, pero cada que pasaba por esa mesa se entretenía conversando.

El pelinegro notó cuando dos de sus pequeños llegaron, y sonrió. - Sunggie, Minnie, quiero presentarles a. -Fue interrumpido por el gritó de su amigo, mientras este llevaba sus manos a la pantorrilla. Seungmin le había pateado.

- ¡Mío! - Le gritó, y fue hasta Jeongin para abrazarlo de la pierna.

- ¡Appa Innie es nuestro! - Jisung le mostro su lengua, y también fue hasta su appa para abrazar la pierna restante. Los dos niños se colgaron, provocando que Jeongin tuviese que aferrarse a la silla para no caerse.

- ¡Tu mocoso me pateó! - Se quejó el adulto, sobando la zona adolorida.

- ¿¡Qué hacen!? - Jeongin se agachó para intentar librarse de los niños, pero los dos le abrazaban cada vez con más fuerza. - ¡Niños!

- Ay que bonito, están celosos. - Escuchó de parte de su compañero de trabajo, mientras este terminaba de limpiar una mesa.

- ¡Seungmin, Jisung, suéltenme! - Los dos se negaron. - ¡Es mi amigo, Beomgyu! ¡Les he hablado de él!

- ¡MÍO! - Fue lo que respondió Seungmin. No planeaba soltarle hasta que se alejara de ese hombre.

- ¡Jeongin hyung! ¡Lo buscan por teléfono! - Le gritaron desde adentro del restaurante, le estaban volviendo loco.  

Cosas de Padres ヅ Stray KidsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora