Cosas de Padres ヅ Stray Kids

099

"CARIÑOS":

Jeongin miró la hora en su teléfono celular, dejándolo en su mesa de noche. Faltaba aun una hora para que se tuviesen que levantar, y no tenía sueño. Suspiró, volteando a ver a su novio quien respiraba con calma, estando frente a él con sus manos a la altura de su rostro. Entre sueños se movió, dando la vuelta para darle la espalda y continuar durmiendo.

Jeongin se deslizó con cuidado, acercándose a su pareja para pasar su brazo por sobre su cuerpo, abrazándole. Sonrió al sentir el calor que desprendía el pelirrubio, y dejó su rostro cerca de su nuca para cerrar sus ojos. Dejó un beso en su piel tibia, dejando caricias sobre su estómago, y un poco más abajo.

Christopher se removió entre sus brazos, suspirando ante las caricias y besos, sin despertarse. - Chris. - Susurró el pelinegro tras su oreja, besando con cuidado la zona y luego bajando hasta el cuello, sin alejar sus labios de la piel.

Las caricias siguieron un momento, bajando poco a poco, y los besos eran cada vez más duraderos, incluso dejó una marca, llamándolo con dulzura para despertarle. Sus esfuerzos cobraron efecto, pues los parpados de Christopher revolotearon al tiempo que se entera de lo que ocurría. Pensó que podría ser un sueño, pero el quejido que escapó de sus labios junto a una caricia en su cuerpo le hizo comprender que no era así.

》 Buenos día. - Jeongin le cantó en el oído, mordiendo ligeramente su lóbulo. Chris suspiró, empujándose un poco hacia su prometido, moviendo la cadera en busca de más caricias.

El pálido movió sus manos hacia las del otro, incitándolo a seguirlas moviendo. - Alguien despertó con ganas de cariños. - Rio, intentando darse la vuelta para ver el rostro de su novio, pero Jeongin no se lo permitió.

- Y muchas. - Con una sonrisa en los labios, marcó la parte posterior del cuello de su pareja, sintiéndose contento al escucharle.

Christopher no lo soportó más y se giró, colocándose sobre su cuerpo. Las bocas de la pareja se unieron, mientras el menor acariciaba a Jeongin, buscando complacerle como el pelinegro estaba haciendo desde hacía minutos atrás.

Ante las sensaciones que su cuerpo iba experimentando, el mayor soltó un suspiro cuando una mano pasó por afuera de su ropa interior. - ¿Quieres una ma -

- ¡APPA! - Christopher y Jeongin se alejaron el uno del otro como si el contacto les electrocutara. Jeong se cayó de la cama al tiempo que la puerta se abría, y Hyunjin entraba. - ¡APPA!

El pequeño observó atentamente a sus padres, Jeong fingió buscar algo debajo de la cama, mientras Christopher abrazaba con fuerza una de las almohadas, tratando de ocultar su problema. - ¿Qué haces despierto tan temprano? - Preguntó el de cabellos rubios, sintiendo el sudor frío sobre su espalda y frente.

- Es que tengo hambre, y Seungminnie también. - Dijo el niño, sonriendo. Ni siquiera eran las siete de la mañana, y el niño se veía completamente despierto, como si llevara al menos media hora así. Volteó a ver a Jeongin. - ¿Se le cayó algo appa Innie? ¡Yo le ayudo a buscarlo!

- ¡No! - Jeong también intentaba ocultar su problema, y usaba la cama para que el niño no viese aquello. Hyunjin se detuvo, sorprendido por la reacción de su appa. - No bebé, es muy temprano para desayunar, ve a tu cuarto.

- ¡Pero quiero comer! - Se acercó hasta subirse a la cama, y fue hasta Christopher para hacerle ojitos. - ¡Por favor appa!

- Obedece Hyunjinnie. - Susurró Chris, tratando de concentrarse en el vídeo de los perritos haciendo tonterías que vio con sus niños, necesitaba bajar ese problema.

- ¡Appa! - Jeong vio como su niño se aferró a la almohada que ocultaba el problema de Christopher, tratando de quitársela como berrinche. Los dos adultos estaban con los ojos bien abiertos, nerviosos y asustados.

- ¡Hyunjin! ¡Ve a tu cuarto! - Jeongin le dijo desde el suelo, buscando algo con que cubrirse y ponerse de pie.

Encontró su enorme sudadera rosa palo que le quedaba casi hasta los muslos. Perfecta. Gateó hasta ella mientras Hyunjin pensaba que Christopher y él estaban jugando a ver quién se quedaba con la almohada, por lo que tiraba con todas sus fuerzas.

Jeongin estiró su brazo tomando la sudadera del bote de ropa sucia, sin importarle que tenía una mancha del café que derramó en ella el día anterior. - ¡Appa Innie! - Casi le da un infarto al escuchar el grito de Seungmin tan cerca, a su derecha. El niño había entrado pasando desapercibido, acercándose al pelinegro que gateaba.

- ¡Ahhhh! - Christopher gritó, abrazando la almohada mientras Hyunjin reía, pensando que jugaban.

Jeong se puso la sudadera sobre la entre pierna, mirando a su bebé quien solo le observaba. - Tengo hambre appa.

- Vayan a su cuarto, ya, - Jeongin les habló suficiente fuerte para que escuchasen, sin llegar a gritar. - Ahora les preparo algo.

- ¡Sí! - Como si eso era lo que querían escuchar, Hyunjin se levantó y fue hasta Seungmin para tomar su mano, y llevárselo casi arrastrando, diciendo que no iban a despertar a sus hermanos para ellos solitos comerse todo lo que su appa les hiciera.

Jeongin y Christopher se quedaron quietos y en silencio un momento, observando la puerta abierta con el corazón latiendo velozmente, tratando de calmarse de vuelta. Jeong se levantó corriendo, sin quitar la sudadera de su entre pierna. Cerró la puerta, poniendo seguro, y entonces el menor comenzó a reír.

El pelinegro volteó a ver como su pareja reía tratando de que no se escuchase mucho, pues no quería llamar la atención de los niños y que su pareja se enojase. Pero ya era muy tarde para la segunda.

Jeongin se acercó y le arrojó la sudadera en la cara. - ¡Qué horror! - Jeong se cubrió la cara, negando con su cabeza. - ¡Ay no!

Chris siguió riendo un momento, sí, el momento fue incómodo y jamás se había sentido tan asustado, pero por eso mismo, le daba mucha risa.

- Ya no me dejaron darte de mí disposición. - Le dijo. In se acercó para tomar la almohada con la que seguía cubriéndose y comenzó a golpearle, aumentando las risas del pelirrubio.

Le abrazó por la cadera, y se dejó caer a la cama llevándose al mayor con él. Jeong se quejó, pero terminó cediendo y se abrazó a su pareja, ocultando su rostro en su cuello. - pensé que no había nada peor que nos descubrieran tus padres manoseándonos. - Se lamentó y Chris volvió a reír por el recuerdo.

- Bueno, no nos descubrieron. Ahora sabemos que tenemos que poner seguro.

- Cállate, jamás lo volveremos a hacer con ellos en casa. - Christopher lo abrazó al escucharle hablar con un tono de voz bajito, sin borrar su sonrisa. Besó sus cabellos, asintiendo.

Se quedaron un momento así, simplemente abrazados en los que se calmaban un poco. Jeongin se apartó, levantándose para buscar su bata rosada. - ¿Te vas a bañar con agua fría? - Rio al ver a su pelinegro asentir. - No quiere que entremos juntos, puedo ayudarte.

Jeongin volvió a acercarse para darle un almohadazo, y esta vez Chris se levantó para abrazarlo por la cintura y besarle, maravillado al sentir que le regresaba el beso. El mayor se apartó, riendo, y besó su mejilla antes de irse. - Quédate ahí Christopher, estate listo para entrar al baño en cuanto yo salga.

El nombrado rio, observando a su novio luego de dejar la habitación. Suspiró y se recostó en la cama, aguardando, mientras pensaba en qué hacer para poder tener un tiempo a solas con su pareja. 

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