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Empujó el carrito en dirección hacía la caja registradora donde la mujer me sonríe ampliamente, con mi alimento semanal y demasiados golosinas que se con seguridad me causaran malestar estomacal por la noche, hago una mueca que imita a una sonrisa falsa mientras se lo acerco a ella. Alguien me da suaves toques por la espalda como cosquilleos justo cuando estoy pagándole a la cajera y me giro anhelando, sinceramente, que sea Jaehyun, pero estoy encontrándome a un atractivo Jeno sonriéndome.
— Seguimos encontrándonos, presiento que es parte de nuestro destino. — Sonríe y me burló con una risa floja. — Está bien, sonó cursi, ¿tienes tiempo ahora? ¿quieres ir a comer o beber algo?
— ¿Hoy vas a ir directo al grano?. — Meto todo lo que compre dentro de la bolsita y él me ayuda. — Gracias.
Le agradezco con una reverencia hacía la mujer que acaba de atenderme y él ya tenía de antes sus bolsas en sus manos, caminamos hacía la salida y recuerdo aquella vez que estuve con Jaehyun en un supermercado y escapamos del guarda de seguridad por haber peleado a la guerra sacar la lengua, con un niño pequeño, fue divertido después de todo y lo extraño incluso después de haberlo visto ayer, aún que fue cuando discutimos y las cosas quedaron casi como si se habían acabado, pero me deseó buenas noches por un mensaje cuando se oscureció.
— ¿Aún tienes novio? — Pregunta rápidamente luciendo nervioso, pero no lo miro para causar más desesperación en él, solo contengo el suspiro que quiere escapar de mi.
— Eso es algo difícil de responder. — Le digo y salimos del supermercado.
— ¿Por qué?
— Nosotros hemos tenido algo así como una pelea, pero ambos somos orgullosos y aún que esta vez yo tengo la razón, estoy por ir a disculparme, pero no lo haré. —Él me escucha atento caminando a mi lado.
Na-Ri me lo prohibió y luego me hizo dar cuenta que yo jamás haría aquello, que por la misma razón debería dejarlo, sigue cambiándome incluso después de haber discutido, pero sinceramente no es algo que me moleste, por la noche lo pensé y tener este tipo de cambio está bien, demasiada frivolidad y desinterés es desagradable.
— ¿Y por qué fue? — Pregunta curioso. — Si es que, quieres contarme Min-Su, quizás sirva de ayuda para que puedas desahogarte.
— ¿Me vas a coquetear o serás mi amigo esta vez? — Le preguntó riendo.
— Probablemente seré lo que quieras. — Su tono juguetón y coqueto me hace sonreír. — Vaya, eso sonó..
— Aceptó que seas lo que quiera. — Me detengo y él me mira rápidamente sonrojado. — Solo un trago, como amigos, no quiero sonar egocéntrica o algo así, pero no estoy interesada en algo más contigo en estos momentos.
Lo siento respirar profundamente cuando vuelvo a caminar dejándolo detenido, pero rápidamente me sigue con un trote hasta alcanzarme y en silencio entramos al local más cercano donde puedan vendernos algo de alcohol, casi siendo las siete de la tarde ya hay un montón de trabajadores bebiendo y siendo ruidosos, así que tenemos que escogemos otro lugar más alejado donde no parece ir nadie, por que no recibimos miradas muy amables, sobre todo yo, unas insinuaciones que no estuvieron bien. Caminamos todo el tiempo en silencio, él en reiteradas ocasiones parece querer decir algo, pero solo se encoge de hombros y sigue el trayecto, hasta que logramos encontrar un lugar pequeño e agradable, pedimos cervezas y algunas guarniciones para compartir, en completo silencio aún, no me molesta que estemos callados, me tranquiliza, agradezco que mi mente no esté interesada más en lo sucedido con Jaehyun.
