Un giratiempo, cuatro merodeadores

CAP 7: "Encerrados"

Hola gente, espero estén súper bien, les dejo lo siguiente, creo que están muy cortos así que intentare modificarlos a modo de que sean mas largos.
Cuidense y gracias por leer.

Me quede fumando un rato mientras que mi hermano se transformó en un cachorro, se acurruco en mis piernas y se quedó dormido mientras yo lo acariciaba, a ese paso el cuarto quedo impregnado a lavanda, por los cigarrillos que me gaste, aproximadamente me fume unos 20, si me controlaba no se me irían las ideas, pero estaba por irme a otra galaxia teniendo los pies en la tierra, me puse a asimilar todo lo que había pasado desde que aparecimos en el despacho de Dumbledore, el que nos quedaríamos en este año por unos 6 meses mínimo, el que conocía a mis "tíos", pude conocer y abrazar a mi papá, estábamos en 1976, en el cuarto de los merodeadores, los 4 chicos que tanta batería le dieron a la profesora Mcgonagall, sin dejar atrás a los Weasley y a Harry. 

Mi hermano se veía tan a gusto dormido que me quede inmóvil hasta que se despertó, tuve varios calambres pero nada severo, solo se me durmió todo el cuerpo y no sentía las piernas.

Cuando se despertó, me estire y me levante hacia la mesa de noche de papá, y se preguntaran ¿Cómo sabias cual era? Pues, ¿recuerdan que al entrar solo una cama estaba alzada y recogida? Pues era la de mi padre, y tal cual nos dijo, había muchos libros ahí, tome unos 5 libros y me recosté en la cama de enfrente, a decir por lo que había en la mesa, me supuse que era la cama de James, estaba un frasco de Veritaserum, un frasco con otra solución no etiquetada y una hoja que decía bromas. 

Mi hermano paso de ser un cachorro a un hurón, se veía tan tierno, lo subí a la cama, se acurruco junto a mí y mientras yo le leía él se volvía a dormir, si por Teddy fuera dormiría las 24 horas que tiene el día, aparte de que tiene el sueño bastante pesado, en cambio yo, duermo poco y tengo el sueño muy ligero, no tardo más de 10 minutos en dormirse, así como los abrazos de mi hermano son mi lugar seguro, él se calma con solo sentir mi presencia, así que era común que en veces durmiéramos juntos o inclusive él se acurrucara conmigo, en pocas ocasiones yo era la que se acurrucaba en el pecho de él, solo cuando me sentía mal. 

No sé cuánto tiempo paso desde que comencé a leer pero apenas me daba cuenta que estaba por terminar el quinto libro de los que agarre, al terminarlo comencé a acariciar al hurón que tenía a mi lado, se despertó y ya pude ir por otros libros, deje los 5, tome otros 8 libros y volví a la cama, de repente el hurón paso a ser un gato, era increíble, cambiaba de forma cada que iba a volver a dormir, volví a leer para mi hermano y volvió a caer dormido, esta vez acurrucado en mis piernas, estaba hecho bolita y era como ver un peluche, aparte de que ronroneaba dormido y era aún más lindo, si no fuera tan fría ya hubiera muerto de ternura, estaba terminando el séptimo libro cuando escuche pasos acercándose, estaba esperanzada a que no fuera ningún otro Gryffindor, no tenía ni si quiera mi varita y tampoco me habían dejado ninguna, si era alguien más, no sé qué iba a hacer, para nuestra suerte eran los chicos, traían una pieza de pan, una menta y un vaso de agua, les sonreí en cuanto entraron.

JP: Volvimos chicos.

SB: ¿Por qué huele a lavanda todo el cuarto? -Me sorprendió que supiera a que olía.

S: Mis cigarros, me fume unos 20, así que ese aroma se va quedar por un rato.

R: Al menos huele bien.

Me volví a ver a James y le dije. –S: Lamento haberme acostado en tu cama.

JP: No hay problema, yo me voy con Canuto pero, ¿Cómo sabes que es mi cama?

S: El frasco con veritaserum en tu mesa, el otro frasco con una solución que no pienso identificar y una hoja sobre la mesa que dice bromas. Y a diferencia de la mesa de Sirius en la que hay un cenicero, colillas de cigarro, porros y una botella de whisky, o de la de Peter, en la que hay montones de frascos con los ingredientes que utilizan para sus bromas. Ah y Remus, si tome algunos libros, ya me leí estos 7, y 5 más que ya deje en tu mesa, estaba por leerme este en cuanto entraron.

Todos se quedaron boquiabiertos. –SB: Eres genial pequeña.

Remus tomo los libros que yo tenía en la cama y los paso a su mesa, mientras los otros dejaban sus cosas, me imagino que ya habían acabado clases.

P: ¿Y ese gato?

S: Es Ted, esta es su tercera transformación, desde que se fueron se la ha pasado durmiendo.

SB: Trajimos pan, agua y una menta, creo que es muy poco para ambos.

S: Ya verás. –Dije con seguridad mientras despertaba a mi hermano.

(Telepáticamente). –S: Ted, ya nos trajeron la comida, conviértete en ratón y vamos a comer.

(Telepáticamente). –T: Como digas enana.

Me volví a ver a Sirius y le dije. –S: Deja el pan en la cama. –Este obedeció a mi orden y en menos de lo que puedan decir Hogwarts, mi hermano y yo ya éramos ratones y estábamos comiendo del pan.

R: Así, un poco de comida los satisface por completo, muy inteligentes. Dame la menta Canuto.
Sirius le entrego la menta a Remus y este la partió en trozos pequeños y los dejo junto al pan, después tomo el cenicero de la mesa de Sirius, lo lavo, lo seco y ahí nos puso agua, luego de un rato quedo tres cuartas partes del pan, la mayor parte de la menta y la mayor parte del agua que nos sirvió y nosotros ya estábamos llenos, volvimos a nuestra forma original y nuestros estómagos seguían llenos.

S: Gracias por la comida, estamos llenos.

JP: Son increíbles.

P: Sí que lo son.

T: Yo tengo sueño.

S: Tu cuando no, anda, transfórmate y acurrúcate.

No le tuve que decir dos veces, se transformó en un visón y se fue directo a mis brazos, se acomodó y rápidamente este ya estaba dormido.

SB: ¿Ya se durmió? -Anonadado por el don de mi hermano de dormirse en segundos.

S: Si, y no se preocupen por hacer ruido, tiene el sueño muy pesado.

R: Parece muy tranquilo.

S: Si, así es generalmente cuando se duerme conmigo, el simple hecho de sentir mi presencia lo tranquiliza muchísimo, así como a mí me calman sus abrazos.

JP: Es increíble cómo se complementan.

S: Peter. 

P: Dime. -El susodicho levanto la mirada y me miraba incrédulo de que lo hubiese llamado.

S: Lamento todo lo de esta mañana, el odio y el rencor me cegaron, si, no me caes bien pero no debí hacer eso, en verdad lo lamento.

Me sonrió como si fuera una de sus más grandes amigas. –P: No te preocupes, no fue nada grave, solo quiero y queremos saber por qué me llamaste traidor.

Mi rostro mostró angustia, mi cabello y mis ojos lo reflejaron cambiando a café. –S: No es una linda historia, en verdad es horrible.

SB: Tu cabello y tus ojos están cafés, ¿qué significa?

S: Angustia.

R: Mejor comienza por lo más primordial y continua cronológicamente.

S: Bien, pero puede que algo cambie entre ustedes, no quisiera que eso pasase pero no sé si se puedan mantener igual después de lo que les estoy por contar, si algo cambia en verdad lo lamento, porque todo será nuestra culpa por llegar aquí y mi culpa por contarles, también lamento si llego a llorar, no es algo de lo que me guste hablar y créanme cuando les digo que en este día he llorado más que en el último año, yo no soy de sentimientos, ese es mi hermano, yo soy la seca hasta cierto punto.

JP: Ya estoy dudando de si escuchar o no toda la historia. -Comenzaba a jugar con sus manos debido a los nervios, y ni si quiera había comenzado a contarles nada.

P: Concuerdo. -Tragaba saliva con dificultad.

R: Yo sigo con muchas dudas.

SB: Estoy con Lunático.

S: Debo admitir que amo sus apodos y el cómo les caen como anillo al dedo es simplemente impresionante. Y continuando con la historia.