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*Los personajes de esta historia no me pertenecen, solo es una idea que se me ocurrió y quise escribirla por diversión.

Torre de los Titanes.

Rachel Roth se removía en su lugar, apenas estaba despertando y ya sentía mucha hambre, tanta que por más que no quisiera levantarse se sentía obligada a hacerlo con tal de ir corriendo a la cocina en busca de cualquier alimento que pudiera saciarla.

-Agh, mi cabeza va a explotar- se quejaba Damian a su lado.

-¿Damian?-

-¿Beloved?-

Curioso, no recordaba como había llegado ahí, ni tampoco el porqué estaban durmiendo juntos, el sin camisa y ella sin blusa pero aún con el resto de su ropa.

-¿Qué sucedió?- preguntó ella con la pequeña esperanza de obtener una respuesta.

-A decir verdad... no tengo idea. Pero tengo mucha hambre- se masajeaba levemente la cabeza hasta que recordó algo importante- ¿Dónde están mis lentes?-

De inmediato empezó a buscarlos por toda la habitación rogándo que estos no se hubieran roto. Los encontró debajo de su cama y, para su suerte, sin ningún rasguño.

Una voz llamó su atención, era Dick Grayson hablándoles desde la sala de control.

-Buen día Titanes, me parece que ya durmieron lo suficiente, apresúrense a llegar al comedor o se acabará la comida- fue lo único que dijo y cortó la comunicación.

Se miraron confundidos por un segundo, en otras circunstancias les habría parecido raro que los tuvieran que llamar para desayunar, pero el hambre que sentían era tanta que no le tomaron importancia.

-Será mejor que vayamos- mencionó la demonesa colocándose su blusa dispuesta a ir a su habitación a lavarse los dientes.

-Sí, te alcanzo en un rato- el petirrojo imitó la acción de ponerse la camisa y se dirigía a su tocador hasta que notó que su novia parecía tener problemas para abrir la puerta- ¿Sucede algo?-

-Ammmm.... por alguna razón tu puerta está cerrada con un hechizo- respondió sorprendida- Que extraño...-

-¿Ah si?- miraron la puerta y luego se miraron entre ellos una vez más con gestos de confusión, ¿Qué rayos había pasado?

•••••••••••

En el comedor, todos los miembros del equipo a excepción de los dos mayores tenían un aspecto terrible, ojeras y el cabello desaliñado.

-Oigan ¿alguien podría decirme qué pasó?- preguntó Cassie mientras entraba al lugar pero no obtuvo respuesta ya que, al igual que la pareja de aves, todos habían despertado muy confundidos y con un gran apetito así que, primero lo primero.

Resignada, la amazona se encogió de hombros y se apresuró a comer antes de que se acabaran toda la comida.

Una vez terminaron, su líder se aclaró la garganta para llamar su atención.

-Bueno, parece que ya se sienten mejor-

-"Mejor" no es precisamente la palabra que usaría- mencionó Conner masajeándose la sien.

-Exacto, Star ¿Qué sucedió?- preguntó Chico Bestia hablando por todos.

-Se los diría pero, es poco probable que me crean así que pienso que lo mejor es que lo vean ustedes mismos- con la cabeza señaló a Nightwing quien se acercó a la mesa con su laptop y la colocó sobre esta.

-Estas son las grabaciones de las cámaras de seguridad, específicamente un rato después de que Kori y yo nos retiramos, mírenlas con atención- los miembros del equipo se pusieron de pie y se colocaron a una distancia moderada de manera que todos pudieran observar lo que querían mostrarles, no sabían porqué, pero tenían un mal presentimiento de esto.

Quizás... Un Regalo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora