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PROMISES
capitulo 5


Isabella entro a la habitación donde se quedaron a dormir los tres menores con la de cabellos mandarinas.

Juraría que le dio diabetes por tan tiernos que se veían dormír.

Emma se encontraba abrazando a la mayor con una pierna encima, Norman dormía de lado en direccción a la ojiverde, Ray se encontraba abrazando una almohada en dirección a la pared y Olib quien durmio en la orilla tenía su brazo usado como almohada por la pelinaranja.

Tratando de capturar el momento, se fue de ahí para dejarlos dormir, pues aún era temprano.

...

El día comienza a las seis de la mañana con una pelinaranja energética, pero está pelinaranja aún se encontraba durmiendo.

La mayor volvió a entrar volviéndose a encontrar a los cuatro durmiendo esta vez en posiciones diferentes; la de pelos naranjas estaba casi encima de la mayor, el albino abrazaba al azabache que seguía en la misma posición de antes.

Dirigió su vista a la bandeja de comida que había dejado para la mayor viendo que no se había tomado el jugo que dejó alado del vaso con agua, subió su vista al estante donde tenía guardado los medicamentos y lo vio entre abierto, y salió sin más.

Emma empezó a entre abrir los ojos parpadeando en el acto, una vez despierta se los talló con las muñecas.

Se levantó quedando arriba de la cama.
── ¡DESPIERTEN, ES DE DIAA! ── grito, despertando a los dos menores.

── No hace falta que grites. ── reclamo el azabache, sentándose mientras se tallaba los ojos.

── Buenos días Emma─saludo el albino.

── Buenos días Norman, Ray. ── respondió, feliz.

Fue cuando se dieron cuenta que la de pelos mandarina no se había despertado aún.

── ¡Olib, es de día!. ── le exclamó la ojiverde.

La mayor se removió entre su lugar pero, sin ningún inició de despertarse.

── Olib ya es de día. ── le susurro la pelinaranja a la mayor.

Al ver qué no se despertaba empezó a sacudirla despacio.

── Tiene el sueño pesado ── hablo el de ojos azules.

── Creo que hay que dejarla descansar, aún no se recupera del todo. ── dijo el azabache. ── Aún tiene fiebre. ── afirmó, después de poner su mano en la frente para después quitarla.

El albino y la pelinaranja observaron preocupados a la mayor.

── ¡Hay que decirle a mamá! ── exclamó preocupada Emma.

No espero respuesta y salio corriendo en buscar de la mayor.

Norman y Ray se miraron entre si y salieron atrás de la chica antena.

promises 'oliver'Donde viven las historias. Descúbrelo ahora