promises 'oliver'

veinticinco.

𝖯𝖱𝖮𝖬𝖨𝖲𝖤𝖲
𝔠𝔞𝔭𝔦𝔱𝔲𝔩𝔬 𝔳𝔢𝔦𝔫𝔱𝔦𝔠𝔦𝔫𝔠𝔬

Olib termino de desayunar con compañía del albino y el mayor quien desde meses atrás le dió la tarea a la parejita a decirle a los demás niños de afuera lo que deben de hacer para sobrevivir en la villa y ahora mismo van para haya, ambos caminando al compás y platicando de cosas sin sentido.

── ¿Una comida que te gustaría probar? ── pregunto la pelinaranja sin apartar su vista del camino para llegar al centro del pueblo de mentiras.

Oliver hizo el sonido de estarlo pensando.── Talvez los famosos burritos que nos comentó una vez.

── Entonces cuando podamos salir de aquí, de este mundo de moustrous, vayamos todos a comer burritos.── respondió la ojicafe con una sonrisa de oreja a oreja.

── Claro que si, no me opondre a una propuesta tuya. ── dijo sonriendo para después pasar su brazo por los hombros de Olib y seguir caminando.

al llegar al centro de la villa ambos observaron a un grupo de niños ver el cartel que hizo el mayor para advertirles a los menores.

── Que tontería, ¿moustrous? eso solo en los cuentos, como dice mamá eso no existe. ── ambos escucharon lo que dijo la niña.

── ¿Que?¿Que es eso? ── pregunto un niño, leyendo el cartel.

Oliver alejo su mano de los hombros de Olib para acercarse y ponerse enfrente de todo los niños, la pelinaranja lo siguió posicionándose aún lado de el.

── Todos los recién llegados, por favor escúchenme ── Oliver tuvo que alzar la voz para que el grupo de menores le prestará atención.

Cuando todos estuvieron en silencio Oliver prosiguió a hablar.

── Cuando suena la música, los moustrous atacan, solo hay una forma de sobrevivir, corre y esconder hasta que la música vuelva a sonar otra vez. ── Oliver repitió lo que decía cada semana.

── Eso es tonto, mamá dijo que mentir es malo. ── reclamo la misma niña que se quejo al principio.

── Pues tu mami fue quien te entrego y te trajo aquí ── Olib realmente fastidiada de que siempre sea lo mismo y que los niños pequeños les digan locos, conteste.

Oliver volteo a ver a su pareja por la respuesta, es cierto lo que dice pero para que les crean y les hagan caso deben de ser amables y no dejarse llevar por la furia de que no les crean.

── Perdón pero es verdad, escuchen no estamos bromeando, esto no es un juego, por favor tomenos en serio y corran.  ── esta vez exclamó Olib, con voz fuerte y enojada.

── ¿y si no es real lo que dices.?

── Si no es real pido perdón de rodillas, pero si es real lo que dije ustedes nos tendrán que pedir perdón a nosotros de rodillas. ── la pelinaranja propuso a la niña mientras se inclinaba a su altura y alzar su dedo meñique para sellar la el trato.

── Está bien. ── la niña juntó su meñique con el de la mayor, aceptando lo que dijo.

Olib se reincorporo y tomo la mano de Oliver. ── Tengan mucho cuidado. ── la pelinaranja empezó a caminar llevandose al ojirojo con ella para volver al molino.