promises 'oliver'

veinte.

𝖯𝖱𝖮𝖬𝖨𝖲𝖤𝖲
𝔠𝔞𝔭𝔦𝔱𝔲𝔩𝔬 𝔳𝔢𝔦𝔫𝔱𝔢

En si los dias pasaron normales, salir a que te persiguieran, mejorar la punteria con el arco que pronto la cambiaran a una arma y así, nada fuera de lo normal.

Bueno, Oliver y Olib aun tenian un pequeño problema y es que uno esta completamente seguro de lo que siente y el otro esta tratando de asegurar que no esta mal del estomago.

── No son bichos. ── repitio Lucas por sexta vez.

Olib miro fijamente aquel cuadro de pintura le parecia misterios, pero no tenia ninguna abertura como para que entre una llave y abrirla y Lucas asegura que intento quitar la pintura pero no pudo parecia que estaba pegado a la pared.

── ¿Entonces. . . ¿Que es? ── cuestiono volteando a ver al mayor.

Lucas solto un gran suspiró. ── Queria que lo descubrieras por tu cuenta, pero veo que no das ni una; Olib estas enamorada.

"¿Enamorada?"

Era lo único que pasaba por la mente de la pelinaranja, el pelirojo ya se hacía una idea de quien era, pero no le dijo esperando a que ella lo aceptara.

── ¡Olib! ¿Nos quieres ayudar hacer la comida? ── preguntó la rubia de ojos verdes.

── Claro, ya voy. ── fingió sonreir y camino hacia la rubia para ayudarla a cocinar, ya que a Paula le tocaba poner la mesa.

── Corta los hongos, yo soy mala picando. ── mando sacando el traste que siempre usaban para cocinar.

Procedio a cortar la verdura para poder hacerla en crema, ideas de Guilian.

Mientras las cortaba pensaba en lo que sentia por cada uno de los chicos con los que vivira, y cuando llego la imagen de Oliver a sus pensamientos sintio su rostro rojo y como su estomago revoloteaba tal cual se lo describio a Lucas.

Pero aun no estaba segura de lo que sentía, si le gustaba realmente o solo lo queria como un "hermano"

Todos se sentaron en la mesa en sus respectivos lugares para comer la comida que preparo la rubia junto a su ayuda, al momento en que el albino de mechón rojo se sento a su lado se puso mas nerviosa de lo normal pero supo disimularlo, para su suerte Oliver estaba algo distraído.

La comida pasó ¿Normal? Pues Olib sentia constantemente la miradas de los chicos presentes en la mesa.

Observo de reojo al chico alado de ella y un sonrojo inevitable se instalo en sus mejillas.

¿Porque?

Se cuestionó, levantando los platos de la improvisada mesa y desocuparla, al terminar salio del molino en donde se refugiaban para dar una vuelta, queria pensar mejor y entender lo que esta sintiendo.

Llego al inicio del bosque, no tenia pensado ir mas allá de lo permitido, pero al ir tan metida en sus pensamientos camino sin darse cuenta que poco a poco se iba alejando del pueblo de mentiras.