"Amigos Con Derechos..." (+18, HOt)

Juguetona parte 1

Desperté por las caricias de alguien sobre mi cara, caricias suaves y delicadas, despacio abrí mis ojos para acostumbrarme a la luz de un nuevo día y al abrirlos por completo me tope con unos hermosos ojos color gris mirándome cariñosamente con un brillo especial.

-Buenos días nena.-susurro en voz seductora.

-Buenos días.-respondí sonriendo.

-Te sientes bien, no te sientes lastimada o a dolorida.-Pregunto cambiado drásticamente su tono de seductor a uno de preocupación.

Una sonrisa más grande se posó en mis labios, el estaba preocupado por mi, por si me había lastimado anoche esa hermosa mirada llena de preocupación encogió mi corazón.

-La verdad es que estoy muy bien.-le sonreí coquetamente.

A lo que el soltó una carcajada arruinando por completo mi momento sexi, instantáneamente me puse roja.

-Ya te había dicho cuanto amo que te sonrojes.-Hablo mientras acariciaba mi labio inferior con su dedo índice.

-No y eres un tonto.-le saque juguetona mente la lengua.

-Yo un tonto ¿porque?.-pregunto ofendido.

-Arruinaste mi momento seductor rompiendo a reír.-le regañe.

-Vaya así que estabas tratando de seducirme de nuevo.-hablo con esa voz ronca y sensual que se estaba convirtiendo en mis favoritas.

-No es necesario pero tal vez.-respondí indiferente.

De repente me giró encima de el y no pude evitar soltar un gritito por la sorpresa.

-Tu no tienes que intentar seducirme nena, nunca porque si no estaría más loco por ti.-Me susurro al oído con una voz tan sensual que mi corazón dio un vuelvo.

Mi cuerpo hormigueaba por la proximidad de nuestros cuerpos, ambos estábamos totalmente desnudos piel con piel y eso de alguna manera me hacia sentir un calor abrazador por todo el cuerpo y sensaciones en partes donde definitivamente no podía nombrarlas por vergüenza.

-Quieres desayunar o te apetece quedarte así todo el día.-

Pero antes incluso de poder articular palabra mi estómago gruño y esa fue respuesta suficiente para que me girara de nuevo y me dejara suavemente sobre el colchón de nuevo.

-A donde vas.-pregunte confundía porque se había incorporado.

-A prepararte el desayuno.-respondió poniéndose los bóxers y me puse colorada de nuevo.

Dios tenía un trasero *-* hermoso, no podía creer que Eythan y yo habíamos hecho el amor...

-Te acompaño.-le dije cogiendo las sábanas para buscar una bata.

-Que te parece si en lo que te arreglas yo te preparo el desayuno y bajas.-respondió con una sonrisa.

-Me parece perfecto.-respondí de buena manera.

Cuando el bajo a la cocina aproveche para buscar bien una bata pero en vez de ponerme la bata cuando encontré una me tope con una mejor elección para cubrir mi cuerpo.

Cuando me cubrí con lo que había encontrado me hice un chongo entre al baño a lavarme la cara y lavarme los dientes porque no me apetecía besar a Eythan con mal olor.

Me puse las pantuflas de Eythan unas grises y baje la escaleras mientras movía coquetamente las caderas, al entrar a la cocina seguí con los movimientos mientras tarareaba una canción de Ed S. Y cuando voltio Eythan se quedo con la boca abierta y los ojos abiertos como platos cuando me vio.