57: Avanzar?

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-¡Luces hermosa! ¿Acaso ha ocurrido algo bueno en tu vida?

-Pues quien sabe...-Sonríe con picardía y siguió posando hacia la cámara.-Solo se que me siento muy bien hoy.

-¡Así me gusta, Perla! ¡Saldrás de maravilla en la portada de este mes!

...

Pov Peridot

Perla decidió traerme a París para un importante evento, y de inmediato tuvo su trabajo para ser portada de una revisa de moda que saldría el próximo mes. Ahora estoy con ella en el estudio viéndola como posa para un sinfín de fotos con distintas prendas, el aire fresco que da al sonreír causa una agradable sensación. Se ve que es muy feliz haciendo lo que ama.

Siento envidia por ello.

Mientras estaba sentada atrás de las cámaras, en el backstage para ser más exacta, trataba de sacarme la venda que tenía aún puesta y ya por lo menos habían desaparecido varias marcas de los cortes, a excepción de los nudillos que si se ven cicatrices.

Entonces comencé a temblar de la nada, mi respiración se agitó, me sentí incómoda en el lugar... Me hace mal recordar todo eso.

Me puse de pie y caminé hacia la salida lo más rápido que pude, pidiendo permiso a todo aquel que se me cruzaba. Tuve que pasar por un pasillo donde habían muchos modelos poniéndose su ropa lo más rápido que podían, diseñadores ajustando las prendas de otros modelos y así, un mundo en el cual se que no pertenezco y que solo vine para acompañarla.

Finalmente llegué a la salida, mi primera intención era buscar algún parque para relajarme, pero estaba en medio de la ciudad así que sin avisarle ni a Roy ni menos a Perla me dispuse a caminar con el propósito de admirar esta ciudad.

Debo reconocer que lo más impresionante de este país es la arquitectura tan majestuosa, y eso que no me encuentro en los palacios y museos más famosos, realmente me deja con la boca abierta lo hermoso que es, quizás no es tan mala la idea que me había dicho Perla... de vivir un tiempo aquí para que me enseñe todos los lugares reconocidos de aquí.

Me gustaría conocer el palacio de Versalles, pero ni se donde estoy.

Tuve que preguntarle a un guardia que se encontraba a las afueras de un hotel.

-Disculpe...¿Donde se encuentra el palacio de Versalles?

El sujeto amablemente me respondió.

-Está a unos 30 kilómetros de aquí, señorita.

-Muchas gracias.-Le sonreí y posterior a eso me alejé para seguir caminando.

Llegué a una plaza en donde tenía un pilar de unos veinte metros de altura, a su alrededor habían tiendas de joyerías excesivamente caras y otras tiendas como de la reconocida marca Chanel...

Quizá debería devolverme.

Pero ¿Donde estoy?

Ni siquiera tengo el teléfono, he olvidado comprarme uno, y aunque tuviera acceso a un teléfono público desconozco el número de Perla. Debería permanecer aquí hasta que me encuentren, o intentar devolverme, pero ya ni recuerdo por donde llegué. Solo me quedaba intentar recorrer estos lados a ver si logro acordarme.

Cuando estaba por tomar el camino contrario que me llevaría a quien sabe donde, mis ojos enfocaron a alguien que me erizó la piel en cuanto vi su rostro, llevaba una jardinera negra y una playera celeste, su figura esbelta, algo más alta que yo y  su cabello estaba pintado de un tono azul eléctrico... era demasiado igual a...

¿Lapis?

¿Será posible que...

Es igual a ella a excepción de ese color de cabello.

Tres no son multitud? [Lapidot]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora