Tres no son multitud? [Lapidot]

67: Reencuentro

Pov Peridot

El trayecto en el bus me la pasé durmiendo debido a un excesivo cansancio... Los viajes me agotan, y también tantas emociones que pasé hoy. Debo tener suficiente energía para ver a mi hermano... Iré de sorpresa.

—¡Peridot! Ya estamos en el terminal.—Aqua me movió para despertarme. Me frote los ojos y estiré mi cuerpo. Sacamos las maletas y ambos casi de últimas nos bajamos del bus.

Eran las 6 de la tarde y nuestros estómagos se morían por comer algo, por lo que pasamos a un restaurante de comida rápida antes de tomar el taxi que nos llevaría al barrio donde vive mi hermano.

Estoy con muchos nervios, cuando toco mis manos gráficamente se resbalan debido al sudor.

Estúpida ansiedad.

—Después de dejarte a casa de tu hermano es posible que me marche al departamento. Ya tengo varios mensajes de mi Volleyball diciéndome que cuando llegaré.—Dijo, sacando su lengua con una leve sonrisa.

—Comprendo...—Suspiré.—Me imagino que mi hermano querrá que duerma en su casa.

—Dalo por hecho. Hace seis años que no se ven, así que por favor no te vayas a dormir a ningún hotel.—Me miró con los ojos entrecerrados.

—Jeje está bien, tranquila. Tampoco es que tenga mucho dinero en esos momentos.

—Una pregunta Peridot. ¿Qué piensas hacer cuando ya hayas visto a las Lazulis? ¿Te quedarás aquí o...

La miré con seriedad al escuchar esa pregunta.

—Probablemente me busque algún lugar para vivir, pero no sería aquí en Florida... Creo que me iría a Manhattan.

Ella abrió sus ojos a más no poder y luego frunció el ceño.

—¿¡Qué!? ¿Piensas vivir solo o que onda?

—Pues si. Ya tengo 24 y no puedo estar dependiendo de otros, además que por NY hay mucho trabajo. No me será difícil adaptarme.

—Pero... Allá no es tan fácil, esos barrios son algo peligrosos y ya lo viste cuando fuimos a NY hace unos años... Vivir ahí y solo es muy arriesgado para ti.

Le dediqué una sonrisa.

—Aqua. Eres una persona muy linda y te agradezco que te preocupes por mi. Yo lo tenia decidido desde que Garnet comenzó a tener su novio, ahorré para este día y no puedo ser un sinvergüenza viviendo en el techo de mi hermano.

Ella suspiró con ligera resignación.

—Tsk! ... Cuando una idea se te mete a la cabeza ya no hay caso que te puedan decir lo contrario. En fin, es tu desición, no puedo ir contra tus deseos.—Dijo esto cruzando sus brazos e inflando ambos cachetes.

—Tranquila. Tú sabes que podremos vernos cuando gustes.—Desordené su cabello con mi mano.

—¡Oye qué haces!—Respondió haciéndome lo mismo.

Éramos como dos niños jugando en la parte trasera del taxi. Ni siquiera teníamos vergüenza de lo que podría opinar el chófer.

Qué importa.

Un poco de alegría no está mal.

...

Eran cerca de las 21 horas cuando llegamos a casa de mi hermano. Por fuera se veía muy cambiado, un color diferente, una pequeña reja en la entrada que antes no estaba con el buzón, una casa de perro que en cuanto nos vio afuera éste salió a ladrarnos.

Bueno, tienen su propio timbre.

—Es un labrador...—Dijo Aqua intentando hacerse la tierna con el perro, aunque a él ni gracia le hacía.