63: Réquiem

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Advertencia: Antes de que lean les vuelvo a decir que tengan mucha discreción. Si andan muy sensibles es mejor que lo dejen para otro día, porque la verdad es que para mi este capítulo si me dolió mucho escribirlo y terminé en lágrimas...

Pov Peridot.

Mi hermano había salido temprano a trabajar, hoy me quedaría sola en casa. Todo este fin de semana estuve con su compañía, hablamos un montón de cosas acerca de nosotros, aclaramos todas mis inquietudes, lo que sentía y mis miedos... esos que precisamente no me dejaban pensar bien. Y pude entender que no todo puede ser como yo lo deseo, terminé entendiendo las cosas más importantes y lo que ahora podría valorar más que nada en el mundo.

Una familia.

Le dije que mañana martes podría ir a casa de las chicas para ver a mi hijo, y hablar con Margaret. Disculparme por todas mis estupideces que he hecho...

Ya es hora.

Me levanté temprano para tocar un poco con mi guitarra, se me hizo muy corto el tiempo puesto que ya eran las 12 del día.

Tengo que comer algo, ni siquiera he desayunado.

...

Mientras estaba comiendo un sandwich veía una serie que hace tiempo Amatista me había recomendado y que nunca terminé por verla... Al parecer hoy eran los últimos capítulos.

Fue tan interesante que ese preciso penúltimo capítulo me marcó por completo... aquella persona convenció al amor de su vida para que escapara con la chica que amaba.

Me emocioné completamente hasta sacar unas pocas lágrimas.

-Que buena serie.-Me dije a mi misma, estirándome en el sofá para luego mirar hacia el techo. Sentía un poco de sueño... no pude dormir bien hoy después de haber pensando en tantas cosas.

El cansancio me ganó.

...

Un ruido molestoso se escuchó en el velador que estaba a poco del ventanal que daba al patio, ese sonido era el timbre del teléfono fijo.

¿Quién podrá ser?

Me froté los ojos, bostecé, estiré mi cuerpo y caminé hasta él. Justo el teléfono dejó de tocar...me iba a devolver para el sofá pero éste vuelve a sonar.

Debe ser importante.

Cogí el teléfono.

-¿Diga?

-¡Peridot!-Se escuchó demasiado agitado.

-¡Hermano! ¿¡Qué ocurre!?- Pregunté con preocupación.

-Es... tu hijo, y Margaret.

-¿¡Q-Qué pasa con July y Magaret!?- Levanté un poco mi voz y comencé a sentir ansiedad.

-¡Están en el hospital! ¡Ocurrió algo terrible!

-¿¡QUÉ!? ¡DIME DONDE ESTÁN Y CORRERÉ HASTA ALLÁ!

-¡Tienes que esperarme afuera, voy en camino a casa porque están en el hospital de la ciudad donde viven ellas!

Mi cuerpo se tambaleó al escuchar todo eso... me estaba imaginando mil cosas ¿Un accidente? ¿Alguien les hizo daño? Por el tono de voz que tenía mi hermano fue que me dejó completamente inquieta, apenas me pude poner las zapatillas para correr hacia la puerta de la salida y esperar el auto de mi hermano. Unos diez minutos después lo vi a la vuelta de la esquina y no dudé en correr hasta allá para subirme.

Abrí la puerta del asiento copiloto y me senté.

-¡Tenemos que llegar cuanto antes! Serán dos horas de viaje pero intentaré acortarla a la mitad.

Tres no son multitud? [Lapidot]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora