Tres no son multitud? [Lapidot]

72: Florecer

Pov Peridot

Tarde o temprano dejaría este estado, o al menos siento que será temporal porque quiero llevarme todas mis cosas antes de partir al lugar que quiero ir.

Mi guitarra se quedará aquí, no creo que le de uso estando allá.

...

Cuando hablé con mi jefe y le comenté que renunciaría no se lo tomó muy bien, después de todo estaba haciendo horas extras como castigo por haberle dado un puñetazo al novio de Lapis, cosa que aún me arrepiento y a la vez es vergonzoso.

Le dije a mi hermano que regresaría el siguiente mes, al menos se ve más tranquilo al saber para donde voy. Mis maletas están listas, toda la ropa que llevo es casi nueva, la adquirí con el dinero de lo que me pagaron por trabajar en el supermercado. Supuestamente ese dinero iría para mis ahorros pero ya no importa, además que también compré el pasaje y de seguro tendré que tomar un bus.

Mi hermano, Lydia y July me dejaron en el aeropuerto, me despedí de ellos con un cariñoso abrazo, sentí un poco de tristeza, ya me estaba acostumbrando a este lugar.

-Cuídate mucho, Peridot! Y regresa pronto!

-Gracias, hermano! Cuidense por favor!-Extendí mi brazo para despedirme, estando ya varios metros alejada de ellos.

Siendo las 8.30 am emprendería vuelo.

...

Me desperté al sentir como las personas se iban bajando de sus asientos en el bus. Este viaje lo sentí muy agotador, un avión hasta el aeropuerto de California y luego un bus que me dejaría en Santa Mónica, la ciudad costera que está al oeste de Los Ángeles.

El día está un poco frío, me puse mi chaqueta que compré recientemente poco antes de haber partido hasta acá, digamos que es larga con una capucha y de color gris, es un estilo unisex, se ve algo grande para mi pero me gusta, combina muy bien con mis pantalones negros bien ajustados.

Compré unas galletas para comer en el camino y seguí caminando, en eso alguien con voz conocida dice mi nombre.

-Hey, Peridot por aquí!-El tono grave de esa voz provenía de la calle, a unos metros de la pista estaba el auto estacionado. Cuando moví mi cabeza para ver de quien se trataba levanté mi mano y luego fue hasta él.

-Hola Sunstone! Que suerte encontrarte!

Sunstone es el hermano menor de Garnet. Vive justamente en esta ciudad y fue una de las razones por las cuales Garnet quiso venir aquí a vivir.

-Hmm.-Bajó sus lentes de sol para mirarme con más detalle.-Te ves algo diferente con esa ropa, pero de alguna forma te queda muy bien, tienes estilo.-Sonrió mostrando sus dientes.

-Muchas gracias.-Le devolví la sonrisa, aunque su halago me hizo sentir un poco apenada.

-Vas a casa de mi hermana?

-Sip, ella me llamó para que le ayudara en el trabajo, así que vine hasta acá.

-Ella confía mucho en ti. Si yo hubiese podido encantado cuidaría de mis sobrinas, pero estoy muy atareado con los trabajos de la universidad.-Suspiró.-Bueno! Voy a dejarte hasta su casa para que no tengas que caminar tanto.

-Te lo agradecería.

Sunstone me ayudó a poner mi equipaje en el maletero, luego de eso me subí en el asiento del copiloto y comenzó a dar marcha. Su vehículo tiene un ajuste en el tubo de escape y en cuanto le da marcha suena muchísimo, pero agarra bastante velocidad.

Yendo directo a la carretera pasamos por el parque de diversiones de esta ciudad, está a pocos metros del mar y he venido un par de veces a dirvertirme cuando Garnet me daba días libres.