Tres no son multitud? [Lapidot]

5: Página nueva

Pov Peridot

Apenas llevo 6 meses en esta escuela y ya han pasado muchas cosas, he logrado formar una banda con mis compañeros de acá y conocí a Nancy, la chica que vino a revolucionar mi vida. Ella está en la misma clase que yo, pero no la tomaba en cuenta hasta el día en el que me tocó bailar con ella ya que solamente quedamos nosotras como pareja. Yo fui demasiado torpe a la hora de ensayar y Nancy simplemente era maravillosa, aprendí a dejarme llevar por el ritmo así como lo hago cuando compongo música y canto.

Me sentía su complemento y quería formar parte de su vida, hice todo lo posible por hablarle, por hacerme su amiga. También conocí a su hermana Margaret quien de inmediato se apegó a mi.

Pude notar como Margaret se me insinuaba en reiteradas ocasiones, yo traté de explicarle que no me atraía de la manera menos dolorosa posible, pero ella no lo aceptaba, quiere tener algo conmigo si o si.

No me agrada mucho, aunque no es una mala chica.

Se que lo entenderá.

...

Hoy me armé de valor para juntarme con Nancy y decirle lo que sentía, quedamos de juntarnos en la pileta y ella llegó justo a la hora.

Fuimos a sentarnos al parque, nos quedamos calladas un rato hasta que intenté hablarle.

—Nancy... Hoy quiero decirte algo.

—¿Si? ¿Que sería?—Me sonrió, ese mismo gesto tan puro me hace ponerme muy nerviosa.

—Ehm... Pues verás, han pasado algunas cosas desde que te conocí y... necesito que leas esto porque... se que no seré capaz de decírtelo a la cara, aún así quiero escuchar tu respuesta.—Lo dije con la voz tan temblorosa porque podía haber una respuesta negativa, y eso me estaba aterrando.

Nancy leyó la carta que le pasé, ahí le expliqué lo mucho que me gusta y que si podríamos ser algo más.

Al terminarla de leer ella se quedó mirando el cielo por un rato y luego dirigió su mirada a mí.

—Peridot... Me sorprende todo lo que has dicho en esta carta, siendo que tú eres una chica también.

—¿Eh? ¿Y eso que tiene?—Me dije a mi misma.—Perdona si fue muy repentino, solo quiero...

—No puedo.—interrumpió—No me siento preparada para algo así, yo soy más tradicional y quiero tener algo normal en mi futuro, aunque agradezco tu valor por decirme todo esto y no quiero arruinar nuestra amistad.

Debí imaginarlo.

—Entiendo Nancy y vuelvo a disculparme si te incomodó todo esto.—Dije con un aire de derrotada, creo que ni se como sentirme, no se si llorar con su respuesta.

—Gracias... Bueno yo tengo que irme, iré a ensayar con mis compañeros ¡Nos vemos Peridot!

—Adios Nancy.

Y ahí se va, la chica que tantos hermosos sentimientos me hizo sentir, ahora simplemente parece que mi cuerpo por dentro se sintiera vacío y roto.

Me acurruqué con mis piernas y escondí mi cabeza para asimilarlo todo, aceptar que no podré tener algo más allá que amistad con ella.

Me duele...

Estoy destruida.

...

Entre todo ese dolor que estaba atormentándome hubo una mano que tocó mi brazo y dijo mi nombre, su voz era muy familiar.

—¿Quién eres?—Pregunté con un poco de desprecio.