Embarazado de mi amigo ||TAEGI||

20

YoonGi se encontraba en su habitación, un sentimiento de intranquilidad inhunandolo por completo.

¿Qué le pasaba?

Llevaba dos días viviendo con Taehyung, y todo había estado bastante bien hasta el momento, mejor de lo que había imaginado que sería en realidad.

Taehyung era demasiado atento, alimentandolo tres veces al día y dándole alguna fruta entre comidas, siempre verificando que el baño esté limpio, asegurándose de que no haya algo con lo que se pueda caer o lastimar dentro de este, incluso había comprado tapetes antiderrapantes.

Durante las noches, aseguraba tanto puertas y ventanas, evitando que se metiera algún intruso.

Pero sobre todo, siempre que tenía náuseas matutinas, o durante las noches, Taehyung siempre estaría ahí, acariciando su espalda y disculpándose con el por tener la culpa de su malestar.

Todo había estado bien, ellos compartían gran parte de su tiempo durante el día, comiendo o platicando sobre cualquier cosa, antes de que Taehyung pidiera permiso para acariciar un poco su vientre.

YoonGi sentía que era extraño, pues el feto apenas se estaba formando, siendo para el aún difícil el considerarlo como un bebé todavía.

Pero para Taehyung era algo completamente diferente, ya que, a pesar de que él nunca había contemplado la posibilidad de tener hijos en el futuro, o si lo había hecho, jamás había hablado sobre ello, parecía ser el más ilusionado con todo el asunto, preparando el mismo las citas médicas próximas para la revisión del embarazo.

Todo había estado bien, entonces porque...

¿Porqué esta inquietud en su interior?

Se abrazo de su almohada con fuerza y clavo su nariz sobre esta, su lobo buscando inconscientemente un aroma que el sabía perfectamente que no se encontraba en ese lugar.

El quería, necesitaba olfatear el aroma de Taehyung.

YoonGi encontró el aroma de una de sus madres impregnado sobre aquella almohada, su madre Alfa y un escalofrío recorrio su cuerpo, a la vez, de un sentimento de malestar en su interior.

Se levantó de la cama y se dirigió a la habitación de Taehyung, tocando la puerta desesperadamente.

Taehyung abrió la puerta asustado y YoonGi se aferro a él, rodeandolo en un abrazo.

—¿YoonGi?, ¿qué pasa?, estas temblando, ¿te sientes mal? —preguntó Taehyung con notable preocupación.

YoonGi soltó un ligero sollozo y Taehyung acaricio su espalda, dando leves caricias sobre esta.

—Me estas asustando, YoonGi, dime ¿que pasa?

—No se que me pasa Taehyung—dijo YoonGi, su voz entrecortada —no puedo dormir, me siento muy inquieto, y mi almohada tiene el aroma de mi madre, no me había molestado que lo tuviera, pero ahora me resulta inquietante, y...

—Quieres olfatear mi aroma, ¿no es así?

YoonGi se tenso y Taehyung se separo un poco de él, pero sin soltarlo, viéndolo a los ojos.

—No tienes porque avergonzarte de eso, YoonGi, tu mamá lo dijo, que esto pasaría, fue por eso mismo que nos vinimos a vivir juntos, ¿recuerdas?

—Pero...

—Ven—dijo Taehyung sosteniendo la mano de YoonGi y guiandolo hacia la cama. Una vez ahí, Taehyung recostó a YoonGi en la cama y el se acostó a su lado, acercandolo a su pecho.

—¿Q-qué haces?—preguntó YoonGi un poco nervioso.

—Necesitas olfatear mi aroma para tranquilizarte, permanece así por unos minutos, después puedes cambiar de lado si es lo que quieres.

YoonGi no dijo nada más, inhalando el aroma de Taehyung y comenzando a calmarse.

—Oye —dijo Taehyung captando su atención. YoonGi lo miro y Taehyung continuó —has estado muy sensible últimamente —dijo mientras limpiaba el rastro de lágrimas de sus mejillas —te he visto llorar más en esta semana de lo que te vi en los casi 20 años que te conozco, ¿serán las hormonas?

—¿Te molesta que llore?

—No, solo se me hace más difícil dejar de verte como un Omega y solo verte como mi mejor amigo.

—¿Qué?

Taehyung negó

—Nada, dejame dormir Yoon.

—Pero...

—Mañana lavaremos las sábanas y almohadas de la otra habitación, pero igual, creo que ya no será necesario.

—¿Qué quieres decir?

—Qué dormiras conmigo a partir de hoy, no quiero que vuelvas a tener otra crisis como la que tuviste.

—Esta bien.

YoonGi cerró los ojos, ignorando el impulso de su lobo por abrazar a Taehyung. Enserio, ¿qué carajos?

Como si Taehyung hubiera escuchado sus pensamientos, rodeo a YoonGi en un abrazo, acercandolo más a su pecho y YoonGi suspiro, respirandolo.

La intranquilidad en su pecho desapareciendo por completo.

Luego corrijo errores.