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Ya es sábado por la mañana y comienzo a abrir los ojos cuando mi nariz huele ese perfume, ese que me encanta. Noto que nuestras frentes casi chocan y eso me resulta alarmante en verdad.

De manera inmediata me pongo de pie y comienzo a vestirme. Mi moral escasa no me permite que él me mire desnuda y no tengo idea de porqué.

Salgo de mi habitación cuando escucho que mi teléfono suena, miro la pantalla y es Lika la que está hablando. Maldición, se me había olvidado que hoy tengo sesión de fotos temprano.

-Bueno- respondí mientras pongo agua para café.

-Buenos días guapa, ¿lista para las fotos?- no si quiera me he bañado y tengo que hacerlo. Estoy segura de que apesto a sexo sucio y culposo.

-Solo tengo que bañarme.

-Que sea rápido porque llego allá en 10 minutos.

-Perfecto, nos vemos- cuelgo de manera inmediata.

-Ina...- escucho el primer grito de Chris desde mi habitación -Ina- grita más fuerte.

-¿Qué, Christopher? ¿Qué quieres?- le respondo un poco fastidiada, no de él, de mi.

-Regresa a la cama.

-No lo haré- tomo su camiseta y pantalones y se los lanzo a la cama -tú ya cámbiate porque tengo sesión de fotos y Lika está a diez minutos. No quiero que nos vea juntos y mucho menos que te vea desnudo.

-Yo quiero a la otra Ina, la que ayer me estaba suplicando por más- estoy apunto de correr y darle una cachetada pero en este punto había cosas más importantes que hacer.

-Pues esa "Ina" necesita que te vayas antes de que llegue Lika.

Repelando y arremedando mis acciones, Christopher se pone de pie y se cambia. Antes de irse me mira fijamente.

-Nos vemos luego- me dice sin antes darme un beso rápido de pico. No sé cómo debo reaccionar pero definitivamente esto se estaba saliendo de control.

-Adios- me limitó a decir y dejó que se vaya.

Okay, la situación es esta... la noche de ayer fue una noche intensa en donde me acosté con mi ex del cual sigo enamorada. Tengo un hombre al que quiero demasiado y no puedo permitirme causarle daño, ha sido todo lo que me merecía en la vida. Me duele el pecho cada vez que recuerdo la noche de ayer porque la culpa es mi sombra en este momento.

Lika llega a mi departamento y yo estoy sentada en mi sillón esperándola. No, definitivamente no le voy a decir lo qué pasó anoche. Creo que es algo que no puedo mencionar con ella aquí presente.

-¿Cómo está mi chica favorita?- me dice mientras las otras tres chicas entrabas detrás de ella con las cosas y ropa.

-Con sueño y muy cansada. Me duelen las piernas- no, no es mentira.

-¿Cómo por?- levanta la ceja haciendo cara pervertida.

-No te emociones, Ian está fuera de la ciudad. Las sentadillas el día de hoy no fueron las menos pesadas.

-Me imagino, pero todo sea porque ese culito se vea fantástico- me dice y me da una nalgada.

-Para ti nada más hermosa- le digo y me rio con ella.

Es un juego que tenemos y me gusta porque en parte es coenzima que tenemos.

Me maquillan y peinan. Las chicas del vestuario ya me han dado mis pantalones y ropa que me voy a poner. Tengo que promocionar ropa deportiva para una marca que va a hacer un especial sobre las mujeres y me interesa mucho ser parte de esa campaña.

CERO AL FINAL #4 ||Christopher Vélez|| TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora