La Obsesión de Jack Black [✓]

Capitulo 36 - Eres una mujer fuerte Mariel

- ¿Pero ¿cómo? ¡¿Quién demonios es usted?! - me levanté enojada, ¿Qué clase de broma era está?

- Pequeña tranquila por favor - la mujer se levantó de su silla y tomo mi mano, yo estaba temblando pues había visto cómo Jack sostenía el cuerpo de su madre, el que era idéntico a este.

- Mire, no sé quién sea ni lo que se proponga, pero está no es una broma de buen gusto - dije quitando su mano de mi muñeca, quizás no conocía a la madre de Jack, pero, ayer con las fotos que vi era idéntica al cuerpo que encontraron y... A ella.

- Mira, sé que no me creerás así de fácil, y pensaras que soy una impostora, pero, en realidad soy la madre de Jack - explico mirándome a los ojos, su rostro reflejaba tristeza y dolor al igual que Jack.

- ¿Y cómo puede probarlo? Ni siquiera la conozco como para tener algo con que rectificar - en eso saco una llave de diamantes muy hermosa, me la mostró para después ponerla en la mesa.

- Está es la llave de la caja fuerte que tengo en el banco, puedes verificarlo después de que hayamos hablado. Créeme pequeña no te mentiría, solo quiero hablar sobre mi Jack... Por favor - aún tengo mis dudas, pero tengo curiosidad, sí sé que la curiosidad mato al gato, pero... Yo no soy un gato.

- De acuerdo, pero mi guardaespaldas estará todo el tiempo conmigo - le advertí y ella asintió, me senté nuevamente y justo en ese momento vino el camarero a traernos unas bebidas que supongo ella pidió, así como un pastel de chocolate. - ¿Y bien?

- Se que debes de preguntarte por qué te contacte, o más bien ¿Por qué hay un cuerpo idéntico al mío a punto de ser entregado a mi Jack? - menea su café con una elegancia sin igual, está mujer sabe de etiqueta así que comienzo a relajarme un poco.

- De hecho, señora Black, es un poco tonto contactarme a mi cuando su hijo es quien sufre su muerte - respondí apretando la mandíbula, recordar el sufrimiento de Jack y la forma en que lloro es algo que le pesa a mi corazón.

- Te entiendo, pero, tuve que hacerlo... Los enemigos de Jack están al acecho y yo soy una de sus debilidades, al igual que tú - me señala lo que me deja sorprendida.

- ¿Yo? ¿Por qué lo sería yo? - pregunté.

- Ahora entiendo por qué mi hijo se enamoró de ti, eres increíblemente hermosa Mariel. Tienes un aura muy temeraria y no te dejas de nadie, había escuchado hablar de ti, pero desafortunadamente no tuve la oportunidad de conocerte antes...

- Señora valla al grano, por si no lo sabe Jack me espera y no puedo hacerlo esperar - dije tomando un sorbo del café que estaba frente a mí, Oscar lo había probado así que no estaba envenenado o algo así.

- Si - agacha la cabeza y saca un sobre - la familia de mi esposo es muy cruel Mariel, irán contra Jack a como dé lugar. Aunque sus abuelos aprobaron que el fuera el heredero de toda la fortuna que mi esposo había hecho, su hermana no dudará en hacer lo necesario para quitarle todo.

- ¿Quién es la familia de su esposo? - le cuestione.

- Conoces a su primo, Raúl Logan, aunque su padre le heredó el equipo no dudarán en ir tras la fortuna de los Black. Héctor Logan se casó con la hermana de mi esposo, Alicia Black y desde hace mucho a codiciado el dinero que nuestra empresa genera - Scarlett me explica a detalle todo el drama familiar y la entiendo, su familia es una de las más ricas de todo el mundo así que, con razón hay quienes la codician.

- Pero ¿Por qué me dice todo esto? ¿Por qué finge su muerte señora Black? - le pregunté sin dejar de mirarla.

- Por qué el necesita estar concentrado Mariel, se avecina una pelea muy fuerte y ustedes son el equipo perfecto para lidiar con ello, no dudes en que sus enemigos se unirán para destruirlos a los dos - la seriedad en su voz me deja atónita, ¿Qué es lo que ella sabe?

- ¿Nuestros enemigos?

- Si, y si ellos creen que estoy muerta no podrán amenazarlo con nada. Tu eres fuerte y te sabes cuidar así que lucharán codo a codo sin tener que cuidar a una anciana... Además, los puedo proteger desde las sombras...

- Señora Black, este fue un golpe muy duro para Jack. Lo vi llorar y sufrir con su perdida es más aún no lo capta del todo - le dije con enojó.

- Lo se mi reina, yo también lo vi. Jack es mi hijo, aunque no de sangre, pero si de mi corazón... - ¿Espera que? - él es mi adoración y desde que tú llegaste a su vida... Es una luz y no solo oscuridad.

- ¿De qué habla sería Black? - no estoy entendiendo nada.

- No tienes que entenderlo todo Mariel, solo prométeme que estarás al lado de Jack en esta dura batalla... Se que eres buena guardando secretos y que te preocupas por Jack... Si no, no habrías accedido a ser su novia bajo un contrato - abro los ojos de par en par, ¿Ella lo sabe?

- ¿Usted...? ¿Lo sabe? - le pregunto mientras mis manos tiemblan.

- No soy tonta hija además soy ya una mujer mayor - no quita esa sonrisa de la cara, aunque quisiera desconfiar de ella... No puedo, tiene una energía y un espíritu tan hermoso.

- Yo... No sé cómo te explicarme...

- No tienes por qué, solo debes prometerme que cuidarás de Jack. Te entrego mis bienes por qué sé que en tus manos estarán a salvo - me empuja nuevamente la llave - ahí encontrarás muchas cosas que te ayudarán en esta batalla, a ambos más bien.

- ¿Y que pasara con usted? ¿Algún día el sabrá la verdad? - tomé la llave entre mis manos y no pude evitar preguntarle.

- Un día... O quizás nunca, depende del resultado de todo - mira hacia la ventana y una lágrima recorre su rostro.

« Demonios, otra vez... Justo en lo que soy mala, consolando personas »

- Desde el accidente nunca había visto sonreír a mi Jack como lo hace desde hace 4 meses, justo el tiempo que te conoce... Se que te ama querida y estoy segura de que tú sientes algo por él, solo te toca descubrirlo - se levanta de la mesa poniéndose la sudadera - no podremos contactarnos, pero sé que cuidarás de mi hijo, eres fuerte Mariel y con todo esto que te doy puedes derrotar a todos esos hombres que te quieren fuera de la NFL.

Sus palabras se quedan en mi mente que no me di cuenta cuando salió del establecimiento ni cuando desapareció entre las personas.

- ¿A dónde se fue? - le pregunté a Óscar al levantarme de la mesa y salir del Café.

- No lo sé señorita, me quedé esperando sus órdenes - responde con sinceridad, asiento y camino hacia el auto.

- Vámonos que tenemos mucho que hacer - le ordenó e inmediatamente me abre la puerta, para después el subirse al auto y manejar hasta mis departamento.

Siento como si hubiera sido un sueño lo que sucedió, nunca la había visto más que por foto, vi su cuerpo muerto y ahora resulta que está viva, pero quiere proteger a Jack. Suspiro antes toda la situación que está pasando conmigo, miro la llave y pienso que, si esto me ayudará a conservar mi puesto como Directiva de la NFL, me quedaré al lado de Jack a como dé lugar.

Después de ir a mi departamento y arreglarme fui a dónde estaba Jack esperándome. Sus hombres estaban preparando el funeral de su madre quien, por extraño que parezca, no tenía más familiares, solo amigos y a Jack.

- ¿Estás segura de esto Mariel? - me pregunta justo al llegar a mi casa para conocer a mis padres.

- Oye, nunca dudo de lo que hago y menos... Menos si es algo que tenga que ver contigo - le sonrió y aprieto su mano, no sé qué me depare el futuro y si estoy incumpliendo el contrato que firmamos, ya no me importa. Mientras esté al lado de Jack, puedo seguir siendo la poderosa mujer que soy. Es un dar por dar.