Visitas desagradables

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------: bueno ahora ya sabes mi historia.

Emma: entonces dices que en tu vida pasada fuiste una plebeya, te casaste con Ciel... tu esposo te ama pero tú no le correspondes porque amas a ese chico, tu amor pasado.

------: (suspira) así es.

Emma: (sonriendo) ¿sabes? cuando era pequeña mi madre me dijo que cuando creciera supiera la diferencia entre querer y amar. Me dices que cuando Ciel está triste tú te sientes muy mal, solo quieres hacerlo felíz, que olvidé su duro pasado... en mi opinión eso es amor.

------: Grell me dijo lo mismo.

Emma: ¿Grell? ¿quien es Grell?

------: es una amistad un poco peculiar que tengo... me dijo que quizás puede que a Dominick lo quiera y que a Ciel lo ame... si eso es cierto ¿por qué cuando vi a Dominick con esa chica sentí dolor?

Emma: tal vez fue algo que no esperabas ver... o solo sientas un vacío.

------: ¿un vacío? ¿por qué?

Emma: porque tal vez solo sientes nostalgia porque el Dominick que era antes ya no está contigo, la persona que él era se fue, sé que tuviste algo muy hermoso con él pero debes dejar que él sea felíz si eligió a alguien más y tú darte una nueva oportunidad con Ciel... se ve que él te ama y mucho.

------: (suspira) me lo pensaré.

Mientras afuera la chica y el fantasma seguían conversando alguien tocó la puerta de la mansión, Mey-Rin abrió,  un hombre de elegante vestimenta, un sombrero y una larga cabellera negra se encontraba parado.

Andrus: (sonriendo) buenos días señorita.

Mey-Rin: (nerviosa) bu-buenos días señor.

Andrus: (sonriendo) ¿se encuentra su amo en casa?

Mey-Rin: ¿bocchan? Si.. está en su despacho ¿quien lo busca?

Andrus: (sonriendo) oh solo alguien que lo conoce a él y a su querida esposa... ¿podría preguntarle si puedo pasar a su despacho para hablar con él?

Mey-Rin: claro señor, pasé.

El demonio pasó, la pelirroja subió a la planta alta y entró al despacho de Ciel.

Mey-Rin: (nerviosa) bo-bocchan.

Ciel: ¿que pasa Mey-Rin?

Mey-Rin: acaba de llegar un misterioso hombre... dice que quiere hablar con usted, dijo que los conoce a usted y a lady Phantomhive.

Ciel: (pensando) debe ser él.

Ciel: (suspira) muy bien, dile que venga.

La pelirroja asintió y cerró la puerta.

Sebastián: es él definitivamente, siento su presencia... ¿siente miedo bocchan?

Ciel: (serio) para nada, no le temo.. quiero saber cuales son sus intenciones con nosotros.

Después de un par de segundos la puerta se abrió y Ciel finalmente lo vio, no vestía como mayordomo como lo hacían Sebastián y Claude, vestía como un hombre elegante, cabello largo color negro, ojos grises, piel pálida y llevaba un sombrero, le sonrió a Ciel y se acercó al escritorio.

Andrus: (sonriendo) buenos días... usted debe ser el conde Ciel Phantomhive... mucho gusto soy Andrus.. solo Andrus no vi lo necesidad de usar un apellido.

El pelinegro extendió su mano, el peliazul la estrechó.

Ciel: (serio) ¿así que tú eres el famoso Andrus? El que ha estado molestando a mi esposa y el que nos citó a propósito a Dominick y a mí el día de ayer.

La esposa de un demonio | Ciel Phantomhive y tú Donde viven las historias. Descúbrelo ahora