Compañía silenciosa

Veritaserum

—¿Veritaserum?— Alya no entendía el porque Snape necesitaba esa poción.

—¿Has estado estudiando? Me alegro.—

—Snape, por favor. No divagues más.— Alya noto un gran suspiro del pelinegro.

—En las vacaciones Lucius me visitó, intentó que fuera a una reunión con el Señor Tenebroso. Me negué y dejé en claro que estaba fuera. Le expliqué que no compartía esos ideales y que me negaba a ser un seguidor. Ahora sé que tienes preguntas así que tomaré 3 gotas de veritaserum y tienes mi promesa de que no me resistiré a él.— Alya agarró el vaso con jugo que le ofrecía Snape y le puso las gotas indicadas por el pelinegro. Después de que él tomó un trago ella hizo lo mismo.

—Tengo entendido que no es 100% infalible la poción.—

—Aún no soy tan poderoso como para resistirme a ella Black.— Alya sonrió y comenzó con las preguntas.

—¿Cómo supo Malfoy donde estabas?—

—Es uno de los pocos que sabía donde vivía antes, así que fue a buscarme en la Hilandera, al no encontrarme ahí y descubrir la muerte de mi madre supo dónde buscar.— Snape estaba tranquilo.

—¿Por qué le dijiste eso a Malfoy?—

—Porque es la verdad.— Alya rodó los ojos. El veritaserum podía obligar a decir la verdad pero Snape no daba muchos detalles.

—¿Cómo llegaste a esa conclusión?—

—Pensé mucho en lo que me dijiste. No tengo los mismos ideales que ellos. Y no quiero tenerlo. Así que lo mejor para mi era alejarme.—

—¿Entonces qué pasará con nosotros?—

—Lo que quieras que pase. No quiero obligarte a estar conmigo, aun más sabiendo que tendré varios problemas por delante.— Alya entendía que estaba mal formulada la pregunta.

—Muy bien, preguntaré de otra forma. ¿Qué quieres que pase con nosotros?—

—Quiero poder estar contigo sin escondernos. No me importa lo que dirán mis compañeros de casa. Pero no puedo pedirte eso, ambos sabemos que tus amigos no lo aceptarían. Y no quiero que te alejes de ellos por mi.—

—¿A qué te refieres con "sin escondernos"?— La Gryffindor comenzaba a disfrutar la situación.

—No soy cursi, lo sabes. Pero las acciones como sentarnos juntos en clase, poder acompañarte a las clases en las que no estamos juntos. Sentarnos junto al lago sin que ocurra un desastre como la última vez.—

—Me agradaría eso.— Snape aprovechó el momento para preguntar el.

—¿Confías en mi?—

—Claro que confío en ti Severus. ¿Sigues fascinado por las Artes Oscuras?—

—Si. Pero también las técnicas para contrarrestarlas.—

—¿Las practicarías?— Alya necesitaba hasta donde llegaría Snape con su fascinación.

—No. ¿Has pensado en casarte?—

—Si. ¿Dejarías de lado tus problemas con James y Sirius si hacemos pública nuestra relación?—

—Quiero estar bien contigo y si eso involucra tener que dejar de lado los problemas con ellos estoy dispuesto.—

—¿Podríamos tomar el antídoto ya?— Alya no tenía más preguntas por hacer.

—Otra pregunta. ¿Qué sientes por mí? Puedes decir los detalles que quieras.—

—Te quiero Severus. No me importa que seas un amargado, para mi eres una gran persona. Tu compañía me tranquiliza y me encanta pasar tiempo contigo. Ahora por favor acabemos con esto.—