K I N T S U K U R O I

[ P a s o ] d i e z

Justo como Jimin sugirió, el cuarteto creó un club, pero no con la finalidad de acosar a sus compañeros, sino un club de estudio luego de que terminaran su primer periodo de pruebas como estudiantes de medicina y ver sus nombres en la lista de alumnos destacados, e incluso hicieron comer polvo a sus compañeros de grados más avanzados.

Jungkook obtuvo el primer lugar de la lista, seguido de Seokjin, después Roomi y por ultimo Jimin obteniendo el cuarto lugar.

El cuarteto consiguió los puntajes más altos en la historia del campus, era la primera vez que tenían alumnos tan brillantes, por esa razón, los amigos Jeon, Kim y Park se volvieron respetables provocando que hasta sus sunbaenims reverenciaran ante ellos.

El club se volvió algo muy personal de los chicos, más que estudiar también lo tomaron con la oportunidad de divertirse, porque no aceptaban a extraños, sólo con ellos era suficiente por el grado de confianza que desarrollaron, y entre sí mismos conocieron sus secretos, miedos y verdaderas facetas, finalmente no eran niños ordinarios, aguardaban vivencias más profundas.

Pasaron exactamente tres meses, los cuales se tornaron un poco inusuales.

Roomi y Taehyung habían dejado de hablar, se convirtieron en dos extraños que bien podían pasar juntos y aún así pretender que no se conocían.
Y tampoco es como si le hubiese afectado tanto a la chica, entendió que Taehyung no era exactamente el tipo que seguía rogando pues ahora con su novia al rededor suponía la completa atención para Sooyoung.

Por otro lado, Taehyung se sentía más nervioso, necesitaba correr hasta Roomi y volver a retomar la poca amistad que habían construído y por la cual le costó, además de que Yeontan extrañaba a su antigua dueña.

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—Roo, me dices cuando estés lista para llevar las cosas al departamento de Yoongi.—Seokjin habló mientras devoraba la charola de comida.

—Terminemos de almorzar.—habló con comida en la boca y Jimin comenzó a reírse de sus cachetes que se inflaron por el alimento.

—Por qué tú y Kim están comiendo como si no lo hubieran hecho en días.—terció Jungkook ofreciéndole un vaso de agua.

—El tiempo se nos viene encima.

—¿Sigues haciendo esas ridículas fiestas sorpresas?

—¿Tiene algo de malo?

—Sabes que sigo sin confiar en ese cretino.—Jungkook se cruzó brazos formando una mirada amenazante para cualquiera.

—No puedes juzgarlo si nunca has tratado de acercarte.

—Algún día me darás la razón.

—De mientras sigue soñando con nuestra separación.—Roomi se levantó del comedor.

—Nunca me equivoco hermana.

—¿Me estás retando?

El ambiente se puso tenso, aunque tampoco alarmante, por lo regular los gemelos discutían por cualquier cosa y ya era una costumbre, luego de unas horas se estarían riendo de trivialidades.
Jimin decía que aparentemente no eran iguales en cuanto a carácter, sin embargo, lo eran porque una pelea entre ellos terminaba por dejar al mundo de cabeza, suponía una guerra de insultos y argumentos por saber quien tenía la razón, los tozudos más grandes de la historia, así los caracterizó.