Cápitulo 9

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Luego de seleccionar un recuerdo, me quedé en silencio, sentada en el frío suelo.

Entonces sentí la prescencia de una mucama acercarse a mi habitación. Por lo pasos puedo deducir si es o no una mujer.

Y, como esperaba, una mujer tocó la puerta de mi habitación.

- Señora, la cena está lista.

- ...

"Sinceramente no tengo hambre. Pero si no voy a esta cena el héroe tendrá una mala impresión de mí"

"Y si eso sucede..."

- Yo moriré.

Y eso es lo que trato de evitar.

- ...

- ¿...mi señora?

- En un minuto bajo.

- Entendido, señora.

Sentí como la mucama se iba alejando.

Y me quedé en silencio por unos momentos, sentada en el suelo.

Y solté un suspiro.

- Supongo que no se puede evitar.

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Clank clank clank

Fruncí ligeramente el ceño ante todo los sonidos que realizaba el héroe al comer.

Aunque sé que no le han mostrado educación, es increíble que haya sido hasta el punto de solo saber agarrar una cuchara.

Más cuando el Emperador sabía que venía a la casa de la Gran Duquesa.

'Desprecio'

Esto ya no era meramente desprecio a su hijo, el príncipe y protagonista de esta historia, era desprecio a mí, la Gran Duquesa.

¿Por qué desprecio?

Por no enseñarle modales a su hijo, siendo que venia a la mansión de un Duque. Y no la mansión de cualquier Duque, sino, la mansión del Duque de Luving.

Dando a entender que no le importaba.

Escondiendo ese tipo de pensamiento, llevé un poco de la carne que estaba en mi plato a mi boca.

Y pensé

"Entonces... ¿cómo hago para acercarme a tí, héroe?"

Miré fijamente al héroe hasta que él levantó la cabeza.

Cruzamos miradas por un segundo.

Pero él rápidamente desvió su mirada.

Él agachó la cabeza y también parecia estar un poco nervioso.

Estaba bastante confundida por eso. Pero, nuevamente no mostré eso.

- ¿Pasa algo, pequeña Alte-?

- Perdón.

- ¿Eh?

- Perdón porque tengas que cuidarme.

Estaba confundida al ver sus acciones, pero al escuchar por qué estaba nervioso, no pude evitar soltar una pequeña risita.

Ante eso, todos los presentes se sorprendieron mucho.

"¡¿La Duquesa se ha reido?!"

Rose nunca ha sonreido o ha reido delante de las personas, excepto delante de Frank, su mayordomo, May, su mucama personal, o Iván, su caballero más confiable.

Queriendo escapar del protagonista masculino.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora