08. Una Práctica

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El se sentó en el escritorio y me ayudó mientras que yo estaba acostada en el suelo mientras cantaba en voz baja, dos horas pasaron y las sentí eternas, tengo a mi amor platónico haciendo mi tarea y está en el mismo lugar que yo y sentía que todo tiene que salir bien y no haga alguna tontería.

Benjamin se levantó de la silla y se acerco a la cama con los cuadernos dejándolos con los demás.

— Así que ya tienes el guión del lunes —dijo tomando el guión en sus manos— también me lo dieron esta tarde.

En ese momento comencé a ponerme nerviosa, ¿cuál habrá sido su reacción?

— Eh si, aún no lo he leído —contesté sin levantarme del suelo.

— Ni yo, ¿quieres practicar? Escuché que teníamos escenas juntos.

Mi estómago comenzó a sentir cosquillas.

— Bueno, solo si has terminado.

Me levanté de la cama con las cosas y las dejé en la cama.

— ¿No sería malo? ¿Practicar juntos? ¿Qué tal que luego no nos sale la escena? —pregunté.

— Al contrario, siento que nos va a ayudar a tenernos mas confianza en frente de la cámara.

— Está bien —contesté.

— Bien, iré a mi auto por mi guión —dijo.

Le abrí la puerta y lo vi salir de casa desde las escaleras, corrí al baño y me lavé los dientes rápidamente hasta que terminé y el iba subiendo las escaleras.

Entramos al dormitorio y cerré la puerta a mis espaldas mientras que el comenzaba a leer su guión, por sus gestos comenzaba a notar en que parte iba.

— Oh vaya, jamás me dijeron sobre esto —dijo aún mirando el guión.

— Ni a mi —respondí tomando mi guión nerviosa— ¿seguro quieres hacer esto?

— Si, podemos saltarnos esa parte —contestó y dejó de lado su guión y se acercó a mi— bien.

Empezamos a decir nuestros guiones hasta que llegó la parte del beso, los dos nos acomodamos a un lado de la puerta ya que así estaba situada la escena.

— Será mejor que vaya a dormir —dije fríamente mirándolo a los ojos.

Me doy la media vuelta y escucho la hoja con guiones de Benjamin moverse ya que aún no nos sabíamos los guiones y las acciones, sentí su agarre en mi brazo así que volteé a verlo.

Benjamin me tomó de las mejillas y se acercó a mi, nuestras miradas se conectaron y mi respiración aumentó su ritmo poniéndome más nerviosa, estábamos tan cerca que sentía su pecho rozar con el mío.

La puerta se abrió de golpe y como Benjamin estaba recargado en ella ocasionó que ambos cayéramos al suelo, para ser precisos el encima de mi, solo que sus manos a los costados de mi cabeza y mis manos en su pecho para amortiguar su caída sobre mi.

Volteamos a la puerta y estaba mi hermana con cara de shock.

— Wow.

Los dos nos levantamos rápidamente y Benjamin tosió falsamente.

— No es lo que piensas, tú nos tiraste —me defendí.

— Si... lo que tú digas —dijo aún procesando todo— solo quería decirte que la cena estaba lista pero no sabía que tenías visitas.

— Si, salió de sorpresa —respondí rascándome la nuca nerviosamente.

— Si quieres me voy —dijo Benjamin.

— ¡No! Deberías quedarte a cenar, eres el primer chico que _____ trae a la casa y nos gustaría conocerte.

Benjamin me miró de reojo y solo me quedé callada, quisiera que se quedara a cenar pero no quería obligarlo a él para que no se sintiera incómodo, aparte de que mis padres junto a Jane lo interrogarían.

— Claro, supongo que me quedaré —contestó riendo tímidamente.

— Genial, ya está servido —dijo antes de salir del dormitorio.

— Vamos entonces, espero y no te moleste mi familia —bromeé.

— No hay de que preocuparse, una vez tuve una novia que sus padres era muy intensos conmigo y querían saber cuantas novias tuve, si me he vacunado y cosas por el estilo.

— Wow, bueno, si te preguntan eso puedes huir —respondí y el rió.

Nos lavamos las manos y fuimos hasta la mesa.

— Listo, pueden sentarse —dijo Quinn.

Mi papá bajó y al ver una silueta masculina se acercó mirando como si fuera una criatura extinta.

— Oh mucho gusto, soy Benjamin —dijo levantándose de la silla y le ofreció la mano.

— ¿Nos hemos conocido? Tienes un rostro familiar —le preguntó mientras estrechaban la mano.

— Actúa en la serie que te mencioné donde conseguí el papel —le dije a mi papá e hizo una o con su boca.

— Oh claro, empecé a ver la serie por mi hija, actúas muy bien chico —le dijo mi padre.

— Muchas gracias señor...

— Llámame Bill.

Los dos se sentaron y ya con los platos en la mesa dimos las gracias antes de empezar a cenar.

— Y dinos Benjamin, ¿cómo te llevas con tu familia? —preguntó mi madre.

— Excelente, tengo buena relación con ellos y siempre me han apoyado en lo que hago —contestó.

— Eso es bueno.

— ¿Y tienes novia? —preguntó Jane de la nada y la leche que estaba bebiendo se me salió de nuevo por la boca y rápidamente me limpié.

— No seas tan directa —bromeó mi padre.

Benjamin rió por lo bajo.

— No se preocupe —le dijo a mi padre— estoy acostumbrado a que me pregunten eso y más los fanáticos, pero no, no tengo, recién estoy conociendo a una chica pero nada más.

¿Está conociendo a una chica? ¿Qué tal que soy yo? Ay no, ya me estoy ilusionando, no seas tonta, o sea se junta con chicas que son modelos de Victoria Secret, ni de broma puede ser alguien como yo, o más bien yo.

littlewadsworth

𝐢𝐧𝐭𝐨 𝐲𝐨𝐮 | benjamin wadsworthDonde viven las historias. Descúbrelo ahora