La apuesta

1.9K 158 19
                                    

Desperté recostada sobre una de las camas de la enfermería, cuando intenté moverme me percate de mi muñeca vendada y envuelta en un trapo que cruzaba sombre mi hombro, en un nuevo intento de moverme una punzada dolorosa se hizo presente en mi pie izquierdo, con mucho esfuerzo logre sentarme y lo siguiente que ví hizo que mi corazón doliera de ternura. Remus estaba durmiendo a mi lado sentado sobre una incómoda silla tomando mi mano, no pude evitar sonreír, apreté un poco su mano

- Rem... - Intente despertarlo - Remus - Dije un poco más alto tirando de su mano, lentamente abrió sus ojos mirándome con esas perlas azules hermosas que tenía por ojos

- July... - Dijo suavemente estirándose - ¿Cómo te sientes? - Pregunto mirándome

- Aún duele, pero no tanto como ayer - Mire mi muñeca vendada

- Pomfrey dijo que por suerte no era tan grave como parecía - Explico intentando recordar todo lo que la enfermera había dicho

- Te ves cansado, será mejor que vallas a dormir - Sugerí viendo las leves ojeras que asomaban bajo sus ojos, el negó

- Estoy bien - Respondió

- Por favor Remus, tienes que descansar - Dije tomando su mano nuevamente - Ya pudiste ver qué estoy bien, Pomfrey me cuidara - Intente convencerlo

- Está bien - Exclamó suspirando - Pero volveré aquí en un par de horas - Asentí, dejo un beso sobre mi frente y se fue, la señorita Pomfrey apareció frente a mi

- ¿Cómo te sientes? - Pregunto examinando mi tobillo

- Aún duele - Respondí haciendo una mueca

- Entiendo, tomará tiempo en recuperarse del todo - Hablo aún mirando mi tobillo para luego entregarme un frasco con una sustancia rara adentro - Tómatelo y duerme otro rato, para cuando despiertes ya podrás caminar con un bastón por lo menos y podrás irte, te daré unas pociones para que tomes a diario - Asentí y tome la poción, ella dejo unos frascos pequeños y un bastón sobre la mesa a mi lado, me acomode sin mucha suerte por culpa de mi brazo sobre todo y volví a entregarme a los brazos de morfeo.

Horas después desperté, logre sentarme sobre la camilla sin tantos problemas por suerte, ví el reloj, eran las 10:00 bastante temprano aún para ser sábado, iba a bajar de la camilla cuando un ruido llamo mi atención, la puerta estaba abierta y una cabellera negra y un poco larga se acercaba a mi.

- Hola - Dijo en forma de saludo

- Hola - Respondí sonriendo

- ¿Cómo estás? - Pregunto rápidamente

- Mucho mejor por suerte, solo tengo que acostumbrarme a caminar con eso hasta que pueda hacerlo sola - Señale el bastón

- Por lo menos no fue tan grave ¿Te ayudo? - Indagó viendo mi intento de bajarme de la camilla sin golpear muy fuerte mi tobillo

- Estoy bien - Respondí aún intentando

Estuve un par de minutos intentándolo con la atenta mirada de Severus sobre mi

- Fue suficiente - Dijo un poco alterado y tomándome de la cintura me ayudó a bajar - No costaba nada aceptar mi ayuda - Exclamó tomando las pociones que Pomfrey me había dejado

- Podía sola - Bufé, el río

- Si claro - Dijo extendiendo su brazo - Te acompañaré hasta tu sala común, no estás en condiciones de ir sola - Explico y tome su brazo, puso las pociones en los bolsillos de su pantalón y con la mano libre tomo el bastón ya que no lo iba a utilizar mientras iba apoyada en el - ¿Lista? - Pregunto dirigiendo su mirada a mi, asentí. Empezamos a caminar no muy rápido ya que no podía, estuvimos hablando sobre el libro que dijimos que íbamos a modificar juntos, compartimos algunas ideas y cuando menos lo esperaba ya estábamos frente a la entrada de mi sala común, justo en ese momento Remus iba saliendo del lugar, nos miró un poco sorprendido

𝐌𝐢 𝐩𝐫𝐢́𝐧𝐜𝐢𝐩𝐞 𝐦𝐞𝐬𝐭𝐢𝐳𝐨 ((𝑺𝒆𝒗𝒆𝒓𝒖𝒔 𝑺𝒏𝒂𝒑𝒆))Donde viven las historias. Descúbrelo ahora