Ya sácame

1K 112 4
                                    

Hace ya unos días que estamos entrenando para la primera prueba con Moody, hoy supuestamente iba a ser diferente, todavía nadie despierta, son las cinco de la mañana y aún está un poco oscuro.
Estoy llegando al campo de Quidditch dónde vamos a entrenar.

- Hola - llegué saludando

- ¿Estás lista? - pregunto

- Como siempre - contesté

- Bien, ven aquí - ordenó, me acerque a él - date la vuelta - lo mire lavantando una ceja

- Solo hazlo - insistió, le hice caso, quitó mis lentes y cubrió mis ojos con una venda

- ¿Este es tu entrenamiento especial? - pregunté

- El basilisco puede matarte con solo verte a los ojos - contesto - no tendrás que utilizarla toda la pelea, solo hasta poder lastimar sus ojos - explico

- Entiendo, ¿Pero como sabré dónde apuntar? - pregunté

- Te lo dije antes, tienes que agudizar tu audición - contesto - Vas a tener que escuchar dónde esté esa bestia - concluyó

- Okey, empecemos - saque mi varita - ¿Solo tengo que dañar sus ojos? - pregunté, nadie contesto - ¿Moody? - pregunté

Unos pequeños ruidos se escucharon tras de mi, me di media vuelta rápido.

- ¡Flipendo! - rodé en el suelo esquivando el ataque

Me levanté rápido y corri un par de metros, a los lejos pude escucharlo corriendo, cuando estuvo suficientemente cerca me quite del camino, siguió unos pocos pasos de largo, aproveché

- ¡Incarserous! - exclamé, sentí un pequeño golpe, me quite la venda, el hombre ahora estaba atado de pies y manos en el suelo, tome mis lentes de su bolsillo

- Ya sácame - ordenó

- ¿Y si te dejo así? - pregunté divertida

- Julieta... - insistió, me senté de piernas cruzadas frente a el

- ¿Si? - pregunté intentando no reír, con dificultad se sentó también

- Quítame esto de una vez - ordenó

- No - contesté con una sonrisa, se acercó a mi

- Ahora - insistió, aún con una sonrisa levanté una ceja

- ¿Que se dice? - pregunté

-No empieces - contestó, si así quería jugar
Me acerque, nuestros rostros estaban muy cerca

- Entonces te quedarás así - me levanté dispuesta a irme

- ¡Julieta vuelve aquí! - ordenó

- ¡Que te diviertas! - contesté y seguí caminando

Entre a las gradas de quidditch y me senté admirando el campo, el hombre se movía intentando soltarse.

Luego de unos minutos ví que miraba a todos lados.

- ¿Buscas esto? - pregunté alto para que me escuchara mostrándole su varita

- ¡Vamos ayúdame! - pidió

- ¡No hasta que lo digas! - contesté

- ¡Ni muerto! 

- ¡Entonces arreglarlo solo! - empecé a reír, estaba muy molesto

Me recosté sobre la pequeña baranda de madera aún admirando al rubio, seguía moviéndose molesto.

Ya debían ser aproximadamenteas siete de la mañana, alguien se paró a mi lado.

𝐌𝐢 𝐩𝐫𝐢́𝐧𝐜𝐢𝐩𝐞 𝐦𝐞𝐬𝐭𝐢𝐳𝐨 ((𝑺𝒆𝒗𝒆𝒓𝒖𝒔 𝑺𝒏𝒂𝒑𝒆))Donde viven las historias. Descúbrelo ahora