Hogar, dulce hogar

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Quedó definido que iríamos en avión, la presentación sería un baile con un estilo de tango acompañado de una entrada con fuegos artificiales de mi parte junto con Hermes, un chico pelirrojo amante del Quidditch, siempre jugamos juntos.

Hoy es el gran día, estaba parada en la parte superior de las escaleras acompañada de Agilbert y Alastor  mirando a un montón de alumnos circular de un lado a otro inquietos.

- ¿Estás lista? - pregunto el rubio

- Eso creo - contesté, mis manos temblaban un poco

El director llamo a los tres últimos cursos ya que a los otros inferiores se le prohibió participar desde el anterior torneo, probablemente en unos años solo puedan participar los de último curso.
Cuando todos estábamos en la entrada un avión grande y brillante apareció frente a nosotros, era blanco, no muy grande, con líneas azules y rojas sin mencionar el escudo de Ilvermony a sus costados.

- Bien, suban con cuidado y mantengan el orden - pidió Fontaine

Los alumnos empezaron a entrar, la verdad es que era muy lindo y cómodo adentro, era conciente que estaba encantado para ser más grande de lo que se ve, para que la gravedad no nos afecte a la hora de que haga giros en el aire y para que se conduzca solo.
Tome asiento al lado de Moody en las primeras mesas, cuando todos entraron Agilbert se nos unió

- Será un viaje largo, dormiré un poco - anunció luego de sentarse - Ya saben que el avión se conduce solo pero aún así hay alguien monitoreando el volante y con él la profesora de Pociones, si pasa algo hablen con ella - asentimos, el hombre se a...

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- Será un viaje largo, dormiré un poco - anunció luego de sentarse - Ya saben que el avión se conduce solo pero aún así hay alguien monitoreando el volante y con él la profesora de Pociones, si pasa algo hablen con ella - asentimos, el hombre se acomodo sobre su asiento quedando dormido en poco tiempo

- ¿Vas a dormir? - pregunto Alastor a mi lado

- Me gustaría descansar pero los nervios no me van a dejar - contesté

- ¿Te molestaría si duermo? - preguntó con una sonrisa

- ¿Por qué me molestaría? Adelante, descansa - contesté

Con una sonrisa también se acomodo sobre su asiento para poder dormir, saque un libro de mi maleta para leerlo, por lo menos tenía con que entretenerme.

Las horas pasaron, por suerte más rápido de lo que creí, estábamos por llegar a Hogwarts, sentía que mi corazón iba a salirse de mi pecho en cualquier momento, mis manos empezaron a temblar

- Tranquila niña - dijo Alastor tomando mi hombro - todo saldrá bien, ya verás - comento con una sonrisa

- ¿Si están enojados conmigo? ¿Si no me quieren ver? - pregunté preocupada mirando por la ventana

- Si piensan eso, son unos idiotas - contestó, le sonreí

Estábamos llegando, Beauxbatons llegaba en un carruaje volando mientras Durmstrang en un barco, el patio del Reloj estaba abarrotado de alumnos admirando nuestra llegada.
Terminamos aterrizando a las afueras del campo de Quidditch, un montón de alumnos la mayoría de ropa elegante bajaron del avión, con Moody esperamos a ser los últimos, nos aseguramos de que no dejarán nada en el avión y bajamos.

𝐌𝐢 𝐩𝐫𝐢́𝐧𝐜𝐢𝐩𝐞 𝐦𝐞𝐬𝐭𝐢𝐳𝐨 ((𝑺𝒆𝒗𝒆𝒓𝒖𝒔 𝑺𝒏𝒂𝒑𝒆))Donde viven las historias. Descúbrelo ahora