CAPITULO 13

3.8K 596 406
                                    

Ay dios, ay diosito, mira que yo he sido una buena chica, porque me haces esto, corro todo lo que puedo hasta llegar a la puerta del salón, me desperté ¡tarde! No lo podía creer, y mi limpia asistencia tendrá una falta ¡AHHH! La vida es tan injusta.

—Muévete —empujo a alguien, pero tropiezo y caigo de culo al suelo, escucho la pequeña risa de la persona—. Claro, cuando llegues tarde tambien me voy a reír de ti, idiota —murmuro.

Me levanto sola, y sacudo mis vaqueros, agarro mis cuadernos del suelo y rendida, camino al salón, bueno, una tardanza tampoco es el final del mundo.

Claro que no querida, solo cinco puntos menos.

Ahg, te odio.

Técnicamente soy tu, así que...

Silencio.

Al llegar, asomo mi cabeza, puesto que la puerta estaba abierta, el profesor no se encuentra.

Ay dios, eres mi religión eh.

Entro rápido y me siento, claro algunos me miran raro, pero no le tomo importancia, el profesor no se daría cuenta que llegue tarde. Suelto un suspiro, pero me enderezo al ver que entra, tiene algunos papeles en su mano y no presta atención a los demás, cuando llega a su escritorio nos mira a todos, haciendo que guardemos silencio.

—Alex, llegas tarde.

Mierda, ¿Qué no podías traer la suerte completa? Bufo, y saco mi cuaderno, tomo apuntes de lo que creo que es importante, bueno tambien puede que haga dibujos tontos al final de mi cuaderno.

En mi defensa la clase es demasiada aburrida.

Frunzo el ceño al ver una nota pegada al final, lo leo y me golpeo mentalmente al haberme olvidado ese detalle. En dos días, es el cumpleaños de Camille, mis planes es hacerle una reunión sorpresa en mi casa, ya lo había hablado con mi madre, por lo que me dio permiso de todo. ¡El pastel! Ay tengo muchas que hacer.

Guardo todo en mi casillero, después de la clase, hice una lista mental de lo que tenia pendiente, a ver repasemos.

Decorar la casa.

Llamar a Peter para que me ayude.

Hacer el pastel.

Hacer su regalo.

Y, sobre todo, guardar el secreto y que mi amiga no se entere.

Cierro mi casillero sonriente, fácil, no podría mal. Doy media vuelta, pero me detengo al ver a Neisan, tiene el cabello desordenado, sus manos metidas en los bolsillos delanteros de su pantalón y sobre su hombro carga su guitarra. Miro a mis lados y vuelvo abrir mi casillero, nerviosa.

Ahí viene tu bombón.

Cállate.

Suelto un suspiro, y cuando lo siento detrás de mi volteo con una sonrisa.

—Hola Mowgli —sonríe, se acerca un poco, abro los ojos sorprendida y volteo rápido.

—Baloo.

Cierro mi casillero, y camino junto a él por el pasillo.

—¿Todo bien?

—Sip, solo que había olvidado el cumpleaños de Camille y voy a preparar una sorpresa para ella.

—Eso suena genial, ¿te puedo ayudar?

Levanto la cabeza hasta mirarlo, bueno, no vendría mal otra ayuda, y no sé porque, pero me emociona tener que pasar más tiempo con él.

Hasta el último deseo © [✔️]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora