Capítulo 32: Fish of abundance

180 34 65
                                    


¿Cómo debería sentirse el amor? ¿Necesitaba que sus piernas temblaran o...Estaba bien que lo único que abrumara su entorno fuera la paz? Jungkook se lo preguntó un par de veces a Namjoon; con una sonrisa pequeña y ojos tranquilos. A lo que, Namjoon siempre respondía, que el amor era la definición que ambos desearan darle.

Jungkook empezó a cuestionarse entonces. ¿Qué es el amor para él? Podrían ser las largas charlas por noche o las notas que se dejan en medio de sus libros. Namjoon tiene aquella costumbre, de dejar un poco de lo que, en medio de las cosas que comparten; marcando libros y poniendo notas, dejando separadores brillantes o las hojas de un árbol en medio —como un claro recordatorio de que, estaba justo ahí. Y quizás, si quería darle una definición, eso era amor. Era su primer amor, de hecho. No tenía un punto con el que comparar, ni una barra y mucho menos un antes. Namjoon era el primero en su lista, con más de cien cosas a su nombre; y talvez, aquello también influía en su casi nulo conocimiento del área.

Cuando agosto llegó, un año y un par de meses más atrás, fue oficial. Con un beso y un libro como ofrenda, acompañado de un: ¿y sí lo intentamos? Fue en agosto cuando sus flores nacieron y las palabras fueron nada más que un añadido. El amor, en las manos de Jungkook, se sentía como un bebé demasiado frágil —un recién nacido, de alguna forma.

¿Qué era el primer amor? ¿Es realmente tan frágil como siempre mencionan? Jungkook había tocado cada una de las estrellas gracias a Namjoon. Lo hizo, en serio, cuando compraron un telescopio y Namjoon levanto su mano mientras miraba por el lente. El amor se sentía como estar ebrio por instante, como chispas reventando sobre su piel, cosquillas entre sus venas y algo extraño moviéndose en su corazón —quizás eran bichos.

Namjoon lo recogió ese viernes del estudio cinco, en una camioneta negra y lo espero con un suéter de felpa.

—Te compre un latte, tiene azúcar extra como te gusta —él dijo—. ¿Pediste permiso?

Yoongi le había dado una llave a muchas respuestas —y la de su apartamento. Tenía un plan entre manos; una semana entera para tratar de entender, ¿Cómo es que el amor lo embriagaba? Se quedarían una semana en ese lugar, regaría las plantas que colgaban por toda la casa y... Claro, se bañaría con todo el amor del mundo —de su mundo.

—Le dije a mi madre que pasaré la semana cuidado el apartamento de Yoongi —Jungkook respondió—. Lo que técnicamente no es una mentira.

—Deberías decirle que salimos —Namjoon respondió con una mirada tranquila.

—Lo haré —respondió mientras asentía—. Solo dame un par de respuestas más.

Jungkook necesitaba descubrir cómo es que el amor se siente en las manos de Namjoon; teórica y prácticamente. Incluso, si de antemano, ya conoce las respuestas.





𓆏 𓆏





Seokjin era Seokjin; con todos sus defectos, errores y cosas buenas. Era él, que se encontraba a la deriva gran parte del tiempo, al mismo tiempo que, bailaba entre las olas poco detalladas de sus pensamientos. Era Seokjin que, de alguna forma, había descubierto su amor por la cocina y los viajes. El mismo que tenía un show —que vayan a saber—, no tenía ni la más mínima idea de cómo era que su idea había funcionado, y en todo caso, había volado más allá de sus expectativas.

Tastes just like home.    (ksj+myg)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora