Lamento no haber actualizado, creía que nadie leía esta historia con frecuencia y no notarían mi ausencia.Si no fuese por sus comentarios, jamás me hubiese dado cuenta. Nuevamente, disculpen la demora y espero disfruten del capítulo💕
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Jennie había cambiado de humor radicalmente. En un principio, estaba preocupada por su hermano, por haberlo dejado solo y haberlo hecho sentir de esa manera, porque ella sabía exactamente cómo se sentía y claramente, no era ni de cerca una de las sensaciones más gratas del mundo.
Pero ahora se encontraba molesta, indignada, casi furiosa. Porque ella entendía a Taehyung, parecía que todos sus amigos y familiares lo hacían, incluso sus padres que lo habían envuelto bajo sus alas aunque no supieran la verdad, pero... ¿Quién la entendía a ella?
Estaba cansada de escuchar a todos lamentar y sentir compasión con su hermano, cuando ella sentía exactamnete lo mismo. Ella también estaba asustada de ser quien era, también se sentía sola y también era alguien a quien le costaba expresarse, jamás en su vida se le había dado una oportunidad, o la libertad, para hacerlo.
Entendía muy bien que su hermano quizás no conociera todas sus emociones y complejos, pero tampoco lo había intentado, o se haya atrevido a preguntar.
Y eso la molestaba.
Jennie estaba molesta porque consideraba que el enojo de Taehyung era hipócrita, no inválido, pero si completamente hipócrita. La verdad es que ambos eran la misma cara de una moneda, dos personas tan cobardes de admitir la verdad, que se disfrazan de lobos siendo corderos, y engañando a todo el mundo, incluyéndose.
Taehyung nunca había tenido que enfrentar grandes obstáculos en su vida, sólo los eventos recientes, que si bien no eran agradables, apenas fueron dos. Siempre había sido la adoración de sus padres, el más pequeño de los hijos que podía tener todo lo que quisiera, y todo lo que Jennie quería, el respeto y el amor de sus padres. Nunca había tenido que ganarse nada, parecía ser su derecho por ser el menor y el único varón de la casa.
Y Jennie siempre vivió en la sombra, esforzándose para ganar sus migajas.
Así que no, no creía que era justo, ni digno que él se enojara de tal manera con ella. El jamás estuvo solo, desde que nació, hasta el momento de su ausencia, porque durante ese tiempo él tuvo a Lisa. Jennie no tenía a nadie, siempre estuvo sola.
—¿Por qué estás haciendo un berrinche?—Una pelinaranja le pregunta, con una sonrisa juguetona en sus labios y apoyada sobre el umbral de la cocina.
—¿Qué? No estoy haciendo un berrinche—La morena niega de inmediato.
—Dile a ese puchero que tienes en tus labios entonces.
De manera casi instantánea, Jennie borra su mueca, dándose cuenta de que Lisa decía la verdad.
—¿En qué piensas, Nini?
La preocupación desbordaba de la voz de la menor, quién se acercó cautelosamente a Jennie y tomó asiento frente a ella, para poder mirarla deliberadamente.
La morena le echó una mirada, que la pelinaranja no pudo decifrar, antes de soltar un pesado suspiro y contarle.
—Creo que es injusto, sólo eso.
—¿Qué es injusto, qué?—Indagó.
—Que Taehyung este enojado conmigo, no creo que yo haya hecho algo terrible para que haya dicho todas esas cosas—Confesó finalmente, sabiendo que Lisa no se daría por vencida—. Es que, vamos, él tuvo de todo durante toda su vida, siempre fue el niño de oro y el favorito, siempre tuvo amor y apreciación. Yo no tuve nada de esas cosas y jamás me descargué con él por eso.
Lisa torció su cabeza, pensativa. Entendía muy bien el punto de Jennie y creía que en parte tenía razón, y sabía que eso era lo que la morena quería oir. Pero no podía darle el gusto, porque si lo hacía, no resolvería las cosas con su hermano y en ese momento, ambos eran la única familia del otro.
—Sé lo que dices, Nini pero... ¿No has pensando que quizás el no lo ve de ese modo?
Jennie rechista amargadamente, como si Lisa hubiese dicho un chiste de mal gusto.
—Es un hipócrita, Lisa. Él estuvo "solo" durante un par de meses, yo estuve sola durante años—Refuta, haciendo comillas con sus manos para enfatizar.
—¿Y por qué dices que estuvo "solo"?—La pelinaranja repite el gesto, casi burlándose.
—Porque el tenía a ese tal Joonhyunk y lo más importante, te tenía a ti.
Jennie miró a Lisa directamente a los ojos, estaban llenos de amor y aprecio, algo que la menor no tardó en notar. La morena tomó la mano de la rubia sobre la mesa y le sonrió.
—Él te tenía a ti, Lisa. Y tenerte a ti es tener la mejor compañía del mundo, sé que no estaba sólo.
Una sonrisa enorme se plasmó en el rostro pequeño de la menor, felicidad pura denotaba en ella.
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Quizás si le dices cómo te sientes, o te sentiste, el podría entenderte y perdonarte. Cada persona vive la situación de una manera completamente distinta aunque no lo parezca—Propuso con una voz suave y aterciopelada, acariciando dulcemente el dorso de la mano de la contraria—. Las cosas se resuelven hablando, Nini. Yo siempre te di oportunidades para expresarte o explicarte, dale una a él, ¿si?
Jennie lo contempló por unos segundos, la duda siendo visible en su rostro.
—Está bien, lo haré—Concedió, quizás Lisa tenía razón—. Pero si no funciona, ¿qué haremos?
—Tú primero hazlo y luego veremos. Aunque aclararé esto antes por si acaso, no elegiré bandos—Declaró firme—. No puedo elegir entre mi mejor amigo y mi novia.
—¿Tu novia?—Jennie preguntó con una sonrisa pícara, alzando ambas cejas mientras miraba a la pelinaranja.
—Al menos eso creo—Lisa rio nerviosa—. Dime, ¿somos novias?
—Somos novias—Jennie confirmó sin dudarlo.
—Bien, bueno saberlo.
El silencio las envolvió durante unos minutos, ambas aún sosteniendo la mano de la contraria pero mirando a cualquier otro lado menos a la otra después de la fuerte declaración. Tanto Lisa como Jennie tenían miedo de hablar, estaban avergonzadas por el gran paso que era ponerle una etiqueta a la relación entre ambas, jamás lo habían hecho.
—Entonces... Intentaré hablar con Taehyung cuando llegue—Finalmente, fue Jennie quién rompió el silencio, cambiando por completo de tema—. ¿Podrías deshacerte de Joonhyunk mientras lo hago? Se nota que no le agrado.
—Es Jungkook—Lisa corrigió, irritada de que Jennie no se aprendiera el nombre.
—Lo sé... Sólo no mencioné que el sentimiento es mutuo—Jennie admitió, con una sonrisa de lado y un brillo juguetón en sus ojos.
—¡Jennie!—Lisa la reprendió, dándole una palmada suave en la mano.
Aún así, ambas estallaron en risas. Y los problemas familiares y exteriores, parecieron desaparecer de esa cocina.
Jennie pensó que esa era la magia de Lisa mientras la miraba reír.
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↣Homofobia↢ Jenlisa Fanfiction
Fanfiction↣No puedes odiar lo que eres... ¿Verdad?↢ ↣Contenido homosexual, si no les gusta, NO lean. ↣Actualizaciones frecuentes. ↣Historia original.