Capítulo XV

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Después de la Segunda Guerra mundial parecía que la paz se iba a recuperar en todo el mundo, sin embargo, E.U y la Unión Soviética hicieron planes para cada uno tener una parte de Corea a su mando siendo Sur Corea para E.U y Nort Corea para la Unión Soviética.

Sin embargo, ese plan salió mal...

Los militares de ambas Coreas estaban preparados para cualquier movimiento de sus contrarios, sin embargo, el Sur no tenía otro plan más que defenderse. El jefe de los militares del Sur hizo diversos pelotones los cuales se repartieron al rededor de todo el sur, el jefe de un pelotón decidió reclutar a su hijo el cual había mostrado gran interés en defender su país, y así fue.

El pelotón ya estaba formado, sin embargo, el hombre decidió incluir a su hijo al cual presentó ante todos los reclutas.

-¡Atención!- el hombre indicó a lo que todos los reclutas se formaron en una fila, cuando todos los hombres tomaron su formación el hombre continuó- Mi hijo Lee TaeYang estará con nosotros, así que denle la bienvenida como solo ustedes saben- tras decir aquello el hombre dio media vuelta y dejó a un joven de piel pálida a la vista, no era muy alto y tampoco tenía músculos, en la espalda llevaba una gran mochila incluso más pesada que él la cual apenas si podía sostener, muchos rieron y se burlaron aplastando así la emoción que Lee tenía, sin embargo, un joven alto se acercó a él y dijo con seriedad:

-Bienvenido, Lee TaeYang, mi nombre es Choi SeungKwan, soy el francotirador principal, si se le ofrece algo estoy a la orden- hizo una reverencia, dio media vuelta y se marchó.

Los ojos del pálido se iluminaron y una pequeña sonrisa apareció. No lo pensó y comenzó a seguir a aquel francotirador.

-¿Sabe dónde se encuentran las tiendas de campaña? Quisiera ir a dejar mis posesiones- cuestionó el más bajo el cual se encontraba detrás de Seung, este último dio un pequeño sobresalto pues no se esperaba que el mayor fuera a estar detrás suyo.

-Claro, yo lo llevo- respondió para después darle un vistazo al más bajo el cual parecía sufrir debido a lo pesada que era su mochila- ¿Gusta darme su mochila?- cuestionó con amabilidad.

-No, yo puedo llevarla, gracias- fue su respuesta a lo que comenzó a caminar y, a su lado, Seung no sabía si reír o molestarse.

-¿Seguro? No me molesta llevarla- insistió.

-A mí sí me molesta que la lleve, de nuevo gracias por su amabilidad- respondió con seriedad.

-¡Por favor, no sea terco! Deme eso- tras decir aquello quitó la mochila de la espalda del más bajo, rápidamente la colocó sobre su espalda y aceleró el paso.

-¡Hey! ¡Devuélvame mi mochila!- ordenó, sin embargo, sus petición fue ignorada- ¿Me estás escuchando? ¡Hazme caso!- todos a su alrededor los miraban divertidos, era como si un chihuahua le reclamara a un pastor alemán o como si un gato le reclamara a un tigre.

Todo el camino el menor ignoró al más bajo el cual estaba molesto y avergonzado, sin embargo, debía admitir que le gustaba esa atención y esa amabilidad por parte del menor. Una vez llegaron a su destino el menor cuestionó:

-¿Cuál es el número de su casa de campaña?- se detuvo en seco a mirar las casas, él sabía que ninguna estaba desocupada.

-Es la número 1307- respondió mientras miraba a su alrededor buscando la casa, Seung no dijo nada y comenzó a caminar seguido por TaeYang, el camino hasta su destino fue silencioso, cosa que no incomodaba a ninguno de los dos, al contrario, era un silencio agradable.

En otra vida... [TaeGi +18] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora