Cuando ambos chicos se tranquilizaron se recostaron en la cama del mayor, seguían abrazados y en silencio, los ojos de ambos estaban hinchados y rojos por tanto llorar.
-He tenido que vivir con esa pesadilla desde que tengo memoria y no sabes cuánto me arrepiento de no haberte hecho caso ese día- Min estaba a punto de llorar de nuevo, se sentía estúpido.
-Shh, tranquilo, el pasado es lo que es, simplemente pasado, lo que ahora importa es que estamos juntos, ya no te lamentes más- fue la respuesta del menor el cual acarició el rostro de su contrario para después dejar pequeños besos en todo su pálido rostro. El mayor sonrió, pero un nudo en su garganta aún seguía ahí y parecía que no se iría con nada.
-¿Seguro que no estás molesto conmigo?- cuestionó con su voz entrecortada, estaba conteniendo las lágrimas lo más que podía, odiaba verse y sentirse débil.
-Estoy seguro, no tendría porqué estarlo, cariño- tras decir aquello dejó un beso en los labios de su contrario el cual, al sentir los labios del otro sobre los suyos, dejó escapar una lagrima. Cuando Tae lo notó inmediatamente se separó de él y limpió esa lágrima con su pulgar- Ya no llores, ahora estamos juntos, es lo que importa, deja de llorar, por favor, no me gusta verte así
-Es que siento que este es un sueño demasiado cruel, siento que voy a despertar en cualquier momento y no estarás a mi lado...- YoonGi fue interrumpido por su contrario.
-¿Qué necesito hacer para que te des cuenta de que soy real? ¿Cómo puedo demostrarte que estoy y estaré aquí a tu lado sin importar nada? ¿Cómo puedo hacerte saber lo mucho que te amo y te amé durante todo este tiempo y que te seguiré amando por muchas vidas más?- y esas simples palabras bastaron para que la tristeza de Min se fuera por completo. Abrazó al menor con fuerza y susurró a su oído:
-Te amo, te amo tanto, TaeHyung- y fue ahí cuando el menor se dio cuenta de que Min había dejado el pasado atrás, se había estado refiriendo a él como "Vincent", ahora lo llamó por su nombre actual lo que hizo que Tae se sintiera completamente feliz.
-Yo también te amo, YoonGi, como no tienes idea- respondió con ternura. Unos minutos después se separaron de aquel abrazo, se miraron a los ojos y sonrieron- Quisiera aprovechar este momento para preguntarte algo que no hice hace 70 años...- hizo una pequeña pausa y tomó las manos de su contrario-... ¿Quieres ser mi novio?- los ojos del mayor se iluminaron, era lo que había estado esperando por tanto tiempo.
-¡Sí! Sí quiero, TaeHyung- tras decir aquello lo besó dulcemente, ese hermoso beso correspondido no podía ser más perfecto, inclusive para los dos intrusos que escuchaban todo a través de la puerta.
-Por fin son felices- HoSeok era feliz por su amigo el cual había estado buscando como loco al menor.
-¿Por qué sólo ellos? Nosotros también podemos serlo, los 4 podemos ser felices- tras JiMin decir aquello fue tomado por la cintura por HoSeok el cual lo atrajo hacia él y dejó unos pequeños besos en su rostro.
-Entonces seamos felices, ¿quieres convertirte en mi amor de esta y próximas vidas?- fue la pregunta del mayor a lo cual JiMin soltó una pequeña risilla, sin embargo, respondió:
-Claro que sí, Hobi, quiero serlo...
...
Los días comenzaron a transcurrir, el acoso de parte de los paparazzis y los reporteros hacia YoonGi era aún mayor, sin embargo, Tae estaba ahí para poder defenderlo y ahuyentar a las tan molestas personas.
Los 4 chicos habían estado todo el día y todos los días fuera del departamento y de la empresa de Min, solo estaban disfrutando de las maravillas de la capital de Corea, desgraciadamente la empresa estaba en crisis y YoonGi no se enteraba, todo iba de mal en peor, el que sabía todo al día era HoSeok el cual estaba muy angustiado, tanto que por las noches no podía dormir, pero no le diría nada al mayor, no quería arruinarle su felicidad. Por otro lado, el día para que JiMin y TaeHyung regresaran a DaeGu estaba más cerca, TaeHyung había estado pensando qué hacer, no quería dejar a Min, pero tampoco quería dejar su trabajo, mejor dicho, no quería dejar a aquel hombre que lo ayudó tanto; había conversado con JiMin en esos días, ninguno sabía qué hacer, pero si lo veían por el lado "fácil" era mejor que ellos renunciaran a su trabajo, ahora debían pensar cómo hacerlo.
Sin embargo, YoonGi también había estado conversando con HoSeok, y ambos estaban convencidos de algo, Min ya no debía seguir con su empresa, era mejor para él y su salud mental, desgraciadamente no era como si pudieran desaparecer esa empresa de un día para otro, habrían demasiadas pérdidas tanto económicamente como de empleos, no era como si pudiera renunciar tan fácilmente, pero lo haría lo más pronto posible para poder estar con Tae.
-Nos iremos a dormir ahora, nos vemos mañana- YoonGi informó para después tomar la mano de TaeHyung y entrar a la habitación. El mayor se recostó en su cama, seguido de él TaeHyung lo hizo- ¿Puedes contarme sobre tu pasado?- cuestionó con nerviosismo, sabía algunos datos que NamJoon le había dado, pero no sabía todo a detalle.
El menor le acarició el rostro y respondió:
-Es algo triste, ¿seguro que quieres escucharlo?- era algo que no solía contar y su lo hacía era porque le tenía demasiada confianza a la persona, sin embargo, no quería agobiar al mayor con cosas que fueron hace tanto.
-Si no te sientes cómodo contándome está bien, no lo hagas, solo quería saber más de tu vida...- el menor lo interrumpió.
-No es que no me sienta cómodo, es que no quiero que vuelvas a culparte de todo, son cosas que ya pasaron y que he superado, no quisiera que conocieras el lado triste de mi vida- fue su respuesta a lo que Min colocó su cabeza sobre el pecho de su contrario, podía escuchar los latidos de su corazón.
-Entonces no lo hagas, si es algo triste no quiero que te deprimas por ello- cerró los ojos dispuesto a dormir, sin embargo, TaeHyung soltó un suspiro y dijo:
-Te contaré todo...
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En otra vida... [TaeGi +18]
FanficPersonas alrededor de todo el mundo aseguran tener recuerdos de sus vidas pasadas, algunos recuerdos son demasiado claros mientras que otros simplemente aparecen en sueños y, al despertar, olvidan más de la mitad de aquel sueño. Cada día se suman má...