Little Talks

Capítulo 7: "Mentirosa"

Pov Arizona
Desperté con un terrible dolor de cabeza, estaba desorientada y lo estuve aún más cuando me di cuenta de que no estaba en mi cuarto y ni siquiera tenía puesta mi ropa.

Me senté en la cama y toqué mi frente
¿Dónde diablos estoy?

Sentí música proveniente de afuera de la habitación, me levanté cuidadosamente ya que no sabía en casa de quién estaba. Abrí la puerta en silencio y asomé mi cabeza por ella, me encontré con la imagen más fantástica de mi vida.

Estaba Calliope bailando en la cocina y cantando mientras cocinaba.

Sonreí apenas y salí de la habitación, carraspeé un poco y me quedé observándola.

Ella se giró y me vió, sus mejillas se pusieron de un color rojo.

— Buenos días— dije intentando parecer seria

— ¿Cómo dormiste?— bajó el volumen de la música

— Bien, creo— me acerqué un poco a ella— ¿Y tú?

Ella sonrió apenas.

— Bien, ¿Quieres desayunar?

Asentí.

- ¿Que hago aquí?— la miré atentamente

— Pues anoche nos emborrachamos en el patio de tus padres y tú querías quedarte a dormir en el auto— ella rio por lo bajo mientras me daba la espalda ya que estaba sirviendo el desayuno— Por lo que tuve que conducir hasta aquí porque tu no encontrabas tus llaves— se giró en mi dirección— Espero no te moleste, no quería dejarte durmiendo en la calle

— ¿Y cómo explicas el pijama de unicornio?

— Te di a elegir ese o el de seda, parece que tienes preferencia por lo rosa— rio

Le saqué la lengua juguetona pero intentando que mi posición siempre esté marcada como "seria"
Ella rio ante mi mueca y me sirvió el desayuno.

— Me duele demasiado la cabeza— toqué mi frente

— ¿Quieres que te de algo para que se te pase?

— No gracias, tomaré algo cuando vaya a casa

— No voy a drogarte Arizona, ten— me entregó el vaso de agua y una pastilla

Dudé por un momento pero finalmente la tomé.
Ella finalmente se sentó a mi lado y comenzamos a comer en un total silencio.

— ¿Pudiste conseguir algo ayer?— se me hacia muy incómodo no hablar

— Si, de hecho si. Hubieron varias personas que donaron dinero— sonrió mientras me observaba— Gracias por guiarme en ese mundo, realmente eres muy buena persona

Su penetrante mirada me estaba comenzando a poner nerviosa, ella me sonreía y yo no sabía como actuar. No podía dejarla verme débil o fuera de mi.

— Si, como sea— despegué mi mirada de la de ella y seguí con mi desayuno

— Tienes algo ahí— señaló cerca de mi boca

— ¿Aquí?— limpié mi labio pero ella negó— ¿Aquí?— limpié nuevamente mi rostro pero ella volvió a negar, esta vez sonriendo— Quítamelo Calliope

Ella acercó pulgar a la comisura de mi labio y con un movimiento lento y tierno quitó lo que tenía.

Nos quedamos así por varios segundos, ella con su mano en mi rostro y yo observándola atentamente.

— Ella está comenzando a gustarte...

— No! Claro que no!

— O tal vez si...