BELLO POR NO DECIR MAS (MANGELITO)

• TOMA EXTRA #003

- ¿Qué haces aquí Miguel Ángel Rogel?-

- Necesito hablar contigo-

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Las distancias en una ciudad tan grande eran de horas para llegar a un lugar, tenías que tomar autopistas para cambiar de zonas, y desde que Mangel se fue ya había pasado dos horas, dos horas que aunque Lolito las disfruto al lado de sus familiares Rogel, seguía con angustia, necesitando saber de su amado, deseando tanto no haberle mentido y arrepentido de haber pensado en Fargan en repetidas ocasiones durante la despedida que le organizó Raúl.

Ese fue el motivo de nombrarlo cuando alcoholizado se quedo dormido, que estar con sus amigos de España le trajo muchos recuerdos, no es que amara al moreno aún, seguro es que en su corazón siempre tendrá un lugar por todo lo que luchó a su lado, y si algo tenía claro es que al lado de Fargan también hubiese sido muy feliz, deseaba de corazón que el moreno en estos momentos fuera feliz y tuviera una pareja que le ame, se quedo con la pregunta en sus labios en cada conversación que tuvo durante la despedida, preguntar por él, no se atrevió pero estuvo a punto en muchas ocasiones y quizá fue por eso que al quedarse dormido aun lo tenia en su cabeza.

Pero nada más, estar con Mangel era su sueño hecho realidad, los ahora poco mas de dos años que tenían viviendo en L.A. han sido tan hermosos, cada día mejor que el anterior, a pesar de cualquier inconveniente financiero o discusión, que en realidad eran mínimas y casi infantiles, cada día era amarse, sonreír, conocerse a tal grado que con una mirada podía saber lo que quería o lo que estaba sintiendo, eran cómplices, amigos, amantes, era todo lo que necesitaba de la vida.

La hermana de Mangel, Mildreth, lo sacó de sus pensamientos cuando acaricio su cabello. 

- ¿Pasa algo Lolito? Te quedaste muy callado-

- No, me distraje solamente-

- En un momento nos iremos al hotel y no llega mi hermano-

Lolito bajó la mirada, no pensó que fuera a tardar tanto en volver y su angustia solo crecía.

- Le marcaré para saber si ya viene, pero no es necesario que se vayan a un hotel, siempre nos acomodamos aquí en la casa-

- Lo sabemos, pero ahora por ser la víspera de la boda queremos que estés tranquilo, los dos, que no tengan el pendiente mas que de sus arreglos personales-

Dijo Fabio, el hermano mayor de Mangel, Lolito sonrió asintiendo, agradeciendo con ese gesto que pensaran tanto en ellos y que estén allí presentes. Sacó su celular y salió al frente de la casa para marcarle a Mangel.

Pipi estrada lo siguió moviendo la cola y mientras el de los ojos verdes marcaba el celular el perro corría a su al rededor feliz de estar en el jardín con Lolito. A pesar de que creyó que el de lentes no contestaría, lo hiso para su sorpresa y su corazón dio un vuelco.

- Dime-

- Mangel ¿Ya vienes mi amor?-

Se escuchaba que el castaño había contestado con el altavoz del coche porque se escuchaba la radio y un  poco de viento.

- Ya voy para allá, una hora estoy de regreso-

- Ok, si vienes manejando ya cuelga amor, te espero-

- Ok-

Colgó y puso el celular en su pecho, esperanzado ya que escucho su voz mas tranquila, no le alcanzarían las palabras para pedirle perdón por todo lo que pasó.