Síndrome de Estocolmo o amor?

Capítulo 28

Se escucho el estruendoso sonido del vidrio romperse en mil pedazos, todos se cubrieron con sus brazos ante el ruido, me abalance sobre Slade con mi bastón en mano para cubrirle del ataque de quien alguna vez fue su mentor, de quien era mi padre. Detuve su ataque y mi expresión facial se arrugo un poco mostrando coraje, era lo que quería evitar, enfrentarme a él y encontrármelo, aplique fuerza en mi agarre para empujarle a unos pocos metros, caí a espaldas de Slade quien al no dudo en sacar su catana y girarse en mi dirección para igualmente verle. 

- Debemos salir de aquí Robin, el trato esta hecho, tenemos el artefacto - asentí ligeramente levantándome lentamente sin dejarle de ver.

- ¡NO TE LO LLEVARAS A NINGUN LADO! ¡NO PERMITIRE QUE VUELVAS A APARTARLO DE MI! - mi corazón se estrujo un poco al escuchar sus palabras, sería una mentira que al tenerlo frente a mi no moría por correr a sus brazos y abrazarle, pero no podía hacer eso, si lo hacía no permitiría que volviera a alejarme y no quiero alejarme de Slade. 

Logre escuchar un ligero zumbido y antes de que pudiese girarme y bloquear el ataque Slade lo había hecho, cubriéndome y protegiéndome de Wally... Ahí estaba, mi temperatura corporal se enfrío y un escalofrío recorrió mi cuerpo entero, pero mi cuerpo volvió a moverse trayéndome a la realidad. Nuevamente bloquee el ataque de Batman y patee su abdomen haciéndolo retroceder, Wally comenzó a correr por todo el lugar golpeando e intentando detener a otro villanos. Era una distracción, para su ataque, un rayo que Slade bloqueo y desvió con su catana, nos pusimos de espaldas, juntándolas.

- ¡Departamento de policía!¡Bajen sus armas, están rodeados! - se escucho aquel grito en todo el lugar, igual conocía aquella voz que tantas veces oí durante patrullajes, era el detective Gordon. Slade y yo giramos de forma contraría sacamos un arma, apuntando y disparándole a algunos policías, nuevamente intentaron atacarnos, esquivamos sus ataques y lanzamos una bomba de humo para poder atacarles y distraerles, tomamos un par de villanos introduciéndolos a la niebla para confundirles y poder atacarles. 

Se escuchaban los disparos, gritos, y el sonido de algunos golpes. Debíamos salir de ahí, me acerque a Slade y comenzamos a alejarnos, peleábamos y heríamos a villanos y a los policías que se nos acercaban, estábamos a algunos metros de una de las salidas de emergencia había muchos policías ahí, podíamos encargarnos de ellos. Estábamos por llegar  cuando vi como Wally golpeaba a Slade con fuerza alejándolo a varios metros de distancia de mi haciendo que chocara contra una columna del lugar.

- ¡SLADE! - me agaché para evitar que uno de los policías me golpeara, para después yo dispararle, iba a ir hacia él.

- ¡VETE ROBIN, TE ALCANZARE! - ordeno, quería correr hacia él para ayudarle, pero sabía que no podía quedarme, podría ayudarle, si, pero de igual forma estorbarle al hacerle preocupar por mi. Cuando grito aquello sentí como la mirada de muchos policías, especialmente los que estaban a pocos metros de mi me observaban incrédulos.

Odiaba sentirme impotente y esa era justo la forma en como me sentía. Impotente. 

Guarde el arma en mi cinturón ahora apretando con fuerza mi bastón presionando un pequeño botón haciendo que de los extremos del bastón salieran un par de dagas, me gire hacia donde estaban los policías los cuales me miraron un tanto horrorizados y confundidos y lo use a mi favor. Comencé a atacarlos sin mostrar piedad, aquello que me había dicho sabía que era una orden, no una sugerencia. 

Intentaban bloquear mis ataques, pero simplemente no podían hacerlo por mucho tiempo lo utilizaba con destreza aplicando todos los arduos entrenamientos que había recibido por parte de Slade durante estos años, algunos villanos al igual que yo intentaban salir de ahí, veía a Slade pelear contra Bruce y fue cuando mi piel bajo el traje se erizo ante la pregunta que invadía mi mente ¿Dónde estaba Wally?

Gire entre mis dedos el bastón a la altura de su cuello para poder tajarlo y quitarlo de mi camino. Comencé a correr por la salida de emergencia llegando así a la parte trasera del edificio donde para mi des fortunio estaba él, ahí estaba Wally y detrás suyo había un escuadrón de 13 oficiales, todos perfectamente armados con armas automáticas apuntándome directamente, no me asustaba el que me apuntaran, pero si lo hacía que él estuviese ahí. 

Mi cuerpo se paralizo al verle, mis manos se aferraron con mayor fuerza a mi bastón, le vi acercarse con lentitud hacia mi, mantenía sus manos visibles frente a él, me miraba fijamente con una leve sonrisa en sus labios. Mi mandíbula estaba tensa y apretada, quería moverme, pero el temor y el miedo invadían y tomaban posesión de mi cuerpo impidiéndomelo, estaba demasiado cerca, demasiado. Antes de que él terminara de acercarse sentí un duro y electrificante golpe en mi espalda haciendo que mi cuerpo temblara haciéndome soltar un agudo quejido, mis ojos tiritaron parpadeando apresurados. 

Sentí como la electricidad recorría por completo mi cuerpo, tensando mis músculos, haciéndome quejar de dolor, de mis manos resbalo mi bastón cayendo en el suelo causando un ruido estrepitoso con el choque del metal con el pavimento, mi cuerpo colapso siendo atrapado por el hombre detrás mío, el detective Gordon, Wally de igual forma de acerco y me sujeto de los hombros, mi quejido al sentir su tacto sonó como un sollozo. No le quería, no le quería cerca.

Torció mis brazos hacia atrás comenzando a colocar un par de esposas en mis muñecas apretándolas demasiado a mis delgadas muñecas.

- Quedas arrestado, todo lo que digas podrá y será utilizado en tu contra en una corte. Tienes derecho a un abogado, si no puedes pagar uno el estado te proveerá uno, pero quien se atrevería a representarte cuando es claro que terminaras en prisión - solté otro quejido ante la fuerza que aplicaba en el garre.

Wally no hacía nada, no podía. Solo observaba, tres oficiales se acercaron hacia nosotros y dos de ellos se pusieron en ambos extremos cada uno tomando uno de mis brazos, el tercero se puso detrás mío subiendo un poco más mis brazos, Gordon se puso frente a mi podía ver en su semblante su enojo e ira, al igual que desprecio.

- Aquel hombro te llamo Robin, pero Robin era un héroe y usted es criminal. Un asesino. No se le ha visto desde hace cinco años debido a que se retiro por una lesión al salvar la vida de inocentes - esa era la mentira que había inventado Bruce, una lesión, me reiría si no fuera que en ese momento mi mente estaba un tanto nublada por las fuertes descargas - veamos quien eres maldito infeliz - sabía de donde provenía su enojo, elimine y asesine a muchos de los policías que habían participado en el operativo, sus manos tomaron mi antifaz y lo jalaron de mi rostro, quitándolo y dejado al aire mi rostro, dejándolo atónito, su tez se blanqueo y sus ojos se abrieron a la par, al igual que los del resto de los oficiales, excepto Wally - Richard... Richard Wayne... imposible...

Le vía a los ojos mostrándole que no le tenía miedo, que no lo poseía o al menos hacía él y casi todos los presentes, pues quien lo ocasionaba era Wally. Esperaba que Slade llegara y se encargara de cada uno de ellos, llevándome lejos de ahí, pero no fue así y me metieron a la fuerza en la parte trasera de una patrulla, manteniéndome aturdido con ligeras descargas.