Síndrome de Estocolmo o amor?

Capítulo 23

Su respiración era errática y desordenada, sus pechos subían y bajaba mientras sus pulmones luchaban por llenarse de aire el cuerpo del menor aun podía sentir los estragos del clímax recorrer sus cuerpo. Se apoyaba en el pecho del mayor dejando su cabeza recargada en su pecho sentía el pequeños jugueteó de los dedos del mayor en su cabello sus parpados se sentían pesados y le era difícil mantenerlos abiertos las carisias de Slade no ayudaban mucho, le arrullaban y daban paz y serenidad comenzaba a cerrarlos poco a poco sintió un pequeño beso ser dejado en la coronilla de su cabeza.

El mayor le veía caer dormido de a poco hasta que finalmente lo hizo, mantenía una sonrisa dulce y un tanto melosa en su sus labios, tenia a Richard durmiendo a su lado luego de tener relaciones sentía sus exhalaciones rozar su pecho causándole un poco de risa y algo de armonía. Acomodo su cabeza sobre la él e hizo lo mismo dejándose caer en el sueño.

Esa noche sin duda había sido especial para ellos dos mientras que las personas del museo buscaban con desesperación y examinaban todo el lugar en busca del objeto que fue robado o cambiado por una imitación los artistas de ese robo se hallaban descansando plácidamente ajeno a ello pues para ellos esa misión fue algo más que una simple misión, fue "la misión" que les unió y les definió haciendo mostrar lo que tenían el uno por el otro. 

Esa noche no hubo pesadillas para ellos sino un merecido y un placido descansó que tanto anhelaban sin pesadillas de por medio haciéndolos despertar de forma agitada y a veces con un grito en boca, con lagrimas cayendo y la desesperación de buscarse para asegurarse de que estaban a salvo. 

Sus parpados comenzaban a abrirse sintiendo su cuerpo totalmente descansado después de no haber podido dormir adecuadamente en tanto tiempo, sentía algo recargado a su pecho, algo en lo que su cabeza se apoyaba y algo rodearle por su abdomen atrayéndole, una sonrisilla nerviosa salió de sus labios al recordar lo que sucedió la noche anterior, aun no creía todo aquello pensaba que era un sueño uno del cual eventualmente despertaría llegando a su realidad sentía una pequeña humedad recorrer su parte baja su cuerpo se erizo un poco con ello.

Una leve dolor de caderas se hacia presente de a poco, se recargo un poco más en el brazo del mayor que estaba debajo de su cabeza con cuidado de no despertarlo llevo una de sus manos a la que tenia enfrente y rozo sus yemas de los dedos con las él, tentaba tocar su palma estaba por quitarla de ahí, pero fue apresada por la del mayor sorprendiéndole. 

- ¿Pesadillas otra vez? - pregunto como de costumbre entre ello sabiendo la respuesta.

- No ¿y tú?¿pesadillas otra vez?- pregunto girando hacia él para quedar frente a frente y a centímetros de él

-No, ni siquiera existe esa palabra para mi- soltó una pequeña risilla sabiendo que al igual había tenido un buen descanso, sus manos se apoyaban débilmente en su pecho, se acurruco un poco más  desviando un poco su vista aun sin poder creer que sus sentimientos eran correspondidos. 

Y se arrepentía un poco, no por haberle confesado sus sentimiento sino por pensar que de no haber sido por sus miedo e inseguridades por ser rechazado, alejado y ser visto de otra forma no lo había dicho y tal vez todo eso hubiera sucedido antes. Él había decidido callarse sin ser consciente que sus sentimiento fueron correspondidos todo ese tiempo, además de que también estaba una incógnita para él ¿desdé cuando sabía que tenia sus recuerdos?. Slade lo vio distraído y distante en su mirada un tanto sumido en sus pensamientos, su mano que mantenía aun en su cintura la subió a su mentón para levantarle un poco y darle un corto beso trayéndole de vuelta.