Capítulo 20

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Preparábamos el plan para el robo que realizaríamos en Italia. El robo seria en Florencia Italia en el museo Galería Uffizi, al parecer el cliente quería una de las obras que están expuestas el <Díptico del duque de Urbino> no seria un robo sencillo a otros que hemos realizado, este era más complejo, el lugar y la seguridad serian difíciles de burlar y entrar. Ese museo se dividía en varias salas y el cuadro se encontraba en la sala 8, tenían ya lista una copia exacta a la original, si el plan funcionaba tardarían en darse cuenta que fue robada.


Estaban en el área de carga terminando y revisando el inventario que llevarían, no faltaba mucho para que despegaran rumbo al lugar, Robin terminaba de revisar que el jet tuviera combustible y todo estuviera bajo control. Estaba sentado en la cabina en el asiento del copiloto, probando el mecanismo y asegurándose de su funcionamiento. 

-Esta todo listo Robin ¿Cómo esta el jet?- una de sus manos se encontraba en su hombro y su cabeza estaba situada a un lado de la suya

-E-esta bien, ya ingrese las coordenadas. Si no hay turbulencia o desviaciones tardaríamos en llegar aproximadamente en 7 horas y 30 minutos, si las existiera el vuelo podría extenderse otros 30 minutos.- era difícil respirar teniéndolo a un lado, un más por los sentimientos que tengo por él. 

-Muy bien, entonces hay que irnos tenemos menos de 52 horas para terminar con esto, el cliente nos vera en una fabrica en San Marco, entregaremos el cuadro y nos darán el dinero, nos quedaremos en Florencia por al menos dos días más para asegúranos de que todo este en orden y no halla pistas o testigos, aunque creo que es algo innecesario, pero necesitamos prevenir situaciones.- asentí, retiro su mano de mi hombro y se sentó a un lado mío.


Comenzamos a mover un par de botones en secuencia, las compuertas del hangar se abrieron y los motores estaban en funcionamiento, poco a poco íbamos elevando y las ruedas ingresaban, su mano se dirigió al acelerador y fue subiéndolo de a poco hasta llegar a lleno. Salimos en dirección a nuestro próximo destino. 

El vuelo permanecía en silencio y solo se escuchaban los pitidos de algunos botones para cambiar la secuencia o reingresarla, llevábamos ya 6 horas, no faltaba mucho para que llegáramos, mis parpados se sentían pesados y me costaba mantener los ojos abiertos. No había logrado dormir demasiado, mi cuerpo a pesar de estar acostumbrado a ello continuaba cobrando factura en ocasiones. 

-Duerme un poco Robin, te despertare cuando sea el momento de aterrizar- dijo, se había percatado de mi agotamiento, asentí ligeramente y pase el control total al piloto. Me puse de pie para dejar mi asiento e ir a descasar un poco. Me recosté en una pequeña camilla que había, solo observaba su espalda, me gire para ver únicamente el interior del jet. 


Era difícil estar junto a él y sentir aquello, intente negarlos y reprimirlos pero igual que antes no funciono y solo me hizo percatarme. No los odiaba pues el Slade que estaba ahora junto a mi era diferente al que todos conocen, y cambio después de la emboscada, se volvió un poco más protector y no me molestaba en lo absoluto continuaba dejándome ser yo y correr riesgos claro que siempre cuidando de mi. Me era imposible odiarlo y me fue imposible no enamorarme aun más, no estaba seguro si confesarlos o no, aquella mirada aun estaba en mi mente, podría haberla visto mal por estar cerca de la muerte o tal vez no. 

Sentía una mano pasar por mi cabello y mi nombre ser dicho, era Slade al parecer habíamos llegado a Florencia, descendimos y aterrizamos en la base que tenia. Una pregunta siempre estaba en mi ¿Cómo era posible que tuviera tantas bases? Aunque era obvio su trabajo así lo pedía. Descargamos todo y lo organizamos, tendríamos que esperar al día siguiente para entrar.  



Neutralizamos a los guardias y sus medidas de seguridad, las alarmas solo se mantendrían desactivada por diez minutos, debíamos darnos prisa en llegar a la sala 8. Avanzábamos de forma rápida y cautelosa y estábamos al fin frente a la obra y solté un suspiro

-No entiendo la obsesión con el arte, yo podría pintar algo mejor que esto- dije apuntándola pues era medio rostro de una mujer y de un hombre, Slade solo alzo un poco los hombros, baje el cuadro, lo sacamos del marco y la cambiamos por la copia, metimos la pintura en un rollo para protegerlo de daño, volví a colocarlo donde estaba y mi pie se tropezó un poco y me hizo caer, no sentí el golpe contra el piso volteé a un lado Slade me había atrapado, no pude evitar sonrojarme 

-¿Estas bien?- me pregunto y antes de que pudiera asentir escuchamos como unos pasos rápidos se aproximaban hacia nosotros, antes de que pudiera bajar de sus brazos Slade comenzó a correr y yo me aferre a su cuello 

Salimos del lugar sin ser atrapados o vistos afortunadamente, nos habíamos alejado ya bastante del museo no nos encontrarían. Llegamos a la base y aun permanecía en sus brazos, me sentía un poco avergonzado. 

-S-Slade c-crees que...- levante un poco mi rostro que cubría en su pecho quedando cercano al suyo, su máscara ya no estaba habíamos tomado la costumbre de quitar las mascaras tan pronto las compuertas de la base se cerraran.

-Cierto- me bajo con lentitud, pero sentí mis piernas débiles y fallaron un poco, nuevamente me atrapo y quedamos más cercanos, mi corazón latía con fuerza y con rapidez, me enfocaba en su mirada como si supiera lo que en verdad pienso.

Mis brazos se mantenían en su cuello y mis dedos en su blanca cabellera, mis labio se abrieron un poco al igual que los suyos, mis ojos se cerraban un poco y sentí el roce de ambos, sus manso sujetaban uno de mis brazos y mi cadera. Ambos estábamos inmersos en el momento que parecía que ninguno se percato de cuando nuestros labios se juntaron...





¿Qué piensan que pasara después? ¿¡Habrá hard¡?¿Robin se alejara?¿O sera Slade quien se aleje? 

Por cierto olvide mencionarlo en "Entre trabajo, amor y poder" para quienes la sigaan y para los que no vallan a leerla. 

Tengo una idea de otras dos historias Sladin y hay una que en verdad quiero empezar...

¿Qué opinan lo hago o no? o espero a terminar una de las dos.

Leere los comentario e intentare responder. 

Síndrome de Estocolmo o amor?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora