Capítulo 38

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Okay... empezamos con este capítulo. Después de este capítulo vendrá otro y tal vez un extra, no lo se con certeza pero aseguro que ya literal estamos por llegar al final inminente. Y así terminara este fanfic, por cierto "Entre trabajo, amor y poder" ya llego a su final y solo queda un extra, de igual forma es Sladin.

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Para cuando había llegado a España, Slade, él... ya se había ido. El rastro que dejo era casi nulo a excepción de la pila de cadáveres, por lo que averigüe pude deducir que su trabajo en esa ocasión era detener y eliminar a un par de miembros de un cartel los cuales lavaban dinero no solo para el cartel sino que también desviaban y robaban un poco para ellos, vendían información a la policía y a miembros ya fueran externos o de otro cartel.

Era un rastro débil, pero sabía donde encontrarlo y por donde ir. Lo conocía, sabía como actuaba, como pensaba, como atacaba, como recababa información y como ocultaba y eliminaba evidencia. 

Durante mi investigación en España di con una mujer de entre treinta a treinta y cinco años, era zorra había hablado demasiado y había dicho cosas que no le fueron de nada beneficiosas, pues me dijo que Slade había ido al bar "El Faro" un pequeño bar un mal vecindario, al parecer había hablado con él o más bien ella lo había hecho pues dijo que no le presto casi nada de atención eso me había enfurecido se había acercado a él para intentar algo, de igual forma de calmo un poco que él no le haya prestado la más mínima atención más no hacía que pasara por alto lo que intento esa mujer y mucho menos lo hizo cuando me dijo que si hablaba con él le dijera que fuera de nuevo al bar, que ella le invitaría un trago y lo haría pasar un buen rato. 

Quien paso un buen rato con ella, fui yo. No planeaba ignorar todas sus malditas insinuaciones hacía él, la torture durante los días que estuve ahí en España, fue divertido y me ayudo a sacar mi frustración por no poder hacer más y por no poder dar con la ubicación exacta de él. Lloraba, gritaba y suplicaba por que la dejara ir prometiendo que no diría nada a nadie, pero no planeaba dejarla ir con vida después de lo que había dicho. El juego con ella termino cuando clave un cuchillo a uno de sus costados perforando uno de sus pulmones y haciendo que poco a poco este se llenara de sangre para que no pudiera respirar, fue lenta y fue lo que se merecía.

Continué buscándolo por cada país, ciudad donde escuchaba que podía estar, pero también no podía solo gastar dinero, tenía que recuperarlo de una forma u otra lo que me llevo a hacer un par de trabajos para la mafia, carteles, personas de gran poder: robos, asesinatos, secuestros, recolectar información, fraudes, secretos corporativos, entre muchos otros tipos de trabajos.

 Todo bajo el nombre de Renegade. 

Habían pasado ya dos años y estaba a una semana de cumplirse tres años desde que no veía a Slade, desdé que todo ello había ocurrido, la reunión, el ser capturado, una promesa que no se cumplió. Como había prometido había ayudado de vez en cuando al Guasón y a Harley y de igual forma se mantenía en contacto constante con Bruce y con Alfred y sabía perfectamente que él sabía donde se encontraba pues a veces cuando volvía a una habitación de algun motel barato después de alguna misión se encontraba con una pequeña caja con brownies en su interior.

Y como el Guasón le había prometido entre sus manos tenía una pequeña tarjeta donde estaba escrita la locación exacta de donde se llevaría a cabo la "reunión" ese año, la posibilidad de poder encontrarlo ahí era de 50/50 era una apuesta donde debía decidir si arriesgar todo o no, pues esa podía ser la ultima pista donde podría encontrarlo sino tendría que esperar 5 años hasta que se llevara a cabo la siguiente "reunión" y donde nuevamente sería una probabilidad de 50/50. En esta ocasión la "reunión" se llevaría a cabo en Las Vegas, en el casino de un hotel donde se hacían todo tipo de negocios ilícitos y muy fuera de la ley, se tendría una gran pantalla ante la simple vista de un hotel y casino pues la "reunión" se llevaría acabo debajo de el donde se tendría una entrada exclusiva además debido al incidente de hace tres años la seguridad y discreción era mayor. Esta vez nadie entraría y no sabría de la ubicación sin ser invitado y el círculo de quienes lo eran era limitado, exclusivo y demasiado selectivo. 

Síndrome de Estocolmo o amor?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora