El nombre de una princesa.

El beso mágico

Heddaiciar regresó al castillo acompañada de sus dos fieles amigos, exigió a los guardias la tratarán como el miembro de la familia real que había sido y les pidió ver al príncipe Apollon cuanto antes. Los hombres la obedecieron en vista de que era la primogénita del Rey Arthur y que su tía ya no estaba presente, así que la guiaron hasta una habitación donde le fueron entregadas nuevas prendas limpias, a diferencia de lo que llevaba puesto en los últimos días, acto seguido la acompañaron hasta una de las habitaciones donde se encontraba el príncipe Apollon, quien estaba aún herido y recostado sobre una enorme cama – Buen día – llamó Heddaiciar en voz baja, él joven volteó a verla con una sonrisa en el rostro y respondió

– Ahora son buenos, ¿pero que estas haciendo aquí? – interrogó tratando de levantarse para abrazarla

– No te esfuerces, – pidió ella caminando hasta su lugar para detenerlo – vine para recuperar lo que me pertenece, se termino la justa con Yoet

– ¿Ella aceptó? – Heddaiciar negó con la cabeza antes de responderle

– Nos reunimos en un acantilado, yo salté al mar incumpliendo con nuestro acuerdo y ella cayó a causa de otra persona, se ahogó. – Apollon la miró sorprendido en silencio poco antes de besarla, un beso que lo cambió todo en cuestión de segundos, al rededor de ellos un color púrpura se esparcia con destellos de cada una de las paredes en el lugar, se escuchaba una melodía inigualable y de pronto entre las nubes se escucho el estallido de un trueno, pero nada pudo separarlos, nada pudo interrumpir ese increíble momento, el hechizo de la princesa había sido roto, ella comenzó a sentir un nudo que se formaba desde su cadera y enseguida se alejó de Apollon, levantando un poco la falda de su vestido para ver como esta volvía a formarse en el espacio que había quedado vacío de su cuerpo

– ¿Qué está pasando? ¿te sientes bien? – Heddaiciar le miró sorprendida, después una sonrisa se dejó ver en sus labios mientras contestaba

– Se rompió el hechizo, un beso de amor verdadero rompió el hechizo, eso quiere decir... ¡que tu me amas! – Apollon se encogió de hombros

– Puede ser – dijo el príncipe mirando al techo de la habitación, ambos rieron, mientras que Abadie al otro lado de la puerta escuchaba la conversación de la feliz pareja, decidió no perder más el tiempo y comenzó a caminar lejos de ahí.

Al caer la noche la princesa y Eider salieron a uno de los jardines principales del castillo para conversar, – Apollon y yo hemos decidido casarnos en los primeros días de la próxima estación, ¿qué opinas?

– Me agrada, es un buen sujeto además de ser un príncipe, estoy segura de que a tus padres les habría encantado – dijo Eider sonriendo

– Lo nuestro fue amor a primera vista, – pronunció la princesa dando un leve suspiro – ahora estoy segura

– ¿Qué me dices de Abadie?, ¿nunca pensaste que el podría ser... tu verdadero amor?, digo, ha cuidado mucho de ti, a diferencia de Apollon este explorador hizo varios sacrificios, incluso estuvo dispuesto a tomar una poción para salvarte poniendo en riesgo su salud, y él... jamás te abandonó, es muy valiente

– Él es un gran hombre, sin embargo Apollon y yo tenemos historia, él y Abadie son amigos, no voy a romper eso, disculpame Eider – dijo la joven dando por terminado ese tema.