ᴘʀoмιsᴇs нᴀʟʟ || втѕ

✔️SIXTY-NINE

|| ¿Cuánto Necesitas Sufrir Para Aprender?||

Narra HoSeok

Me encontraba tan emocionado, porque las cosas habían cambiado de sobre manera. La sensación de bienestar que transmitía estar al lado de la persona que estaba empezando amar de una manera inexplicable, la pequeña melodía de paz interior aparecía en toda mi vida. ¿Qué podría salir mal luego de tanto esfuerzo por poder estar al lado de él?

Él siempre estaba a mi lado y aunque éramos completamente diferentes nos compaginábamos muy bien. Él tenía esa manera de hacerme sentir especial y yo siempre trataba de dar lo mejor de mí para estar a su lado, aunque ciertas veces sentía que no era suficiente, él siempre me recordaba que era lo mejor que ha llegado a su vida. Aunque hayan pasado a penas semanas de estar juntos, la sensación que teníamos al convivir juntos era como conocernos una vida entera sin habernos enterado.

Aunque claro al comienzo si fue difícil. Yo estaba en una relación desde hace aproximadamente tres años. No lo negaba mis sentimientos por ella eran profundos y la veía en mi futuro, todo hasta que llegó aquel chico de ojos rasgados. Le hice mucho daño aunque ella no se haya enterado de mi relación con otra persona, sabía que si se lo decía me iba a odiar más de lo que posiblemente estaba odiando ahora. Amar a alguien más no me daba el derecho de haber engañado a la persona con la que había vivido demasiado tiempo, pero no supe cuando había comenzado y simplemente me ví envuelto en los encantos de él... De YoonGi

Cuando empezó todo no había podido parar nada de lo que estaba por ocurrir. El hecho de que alguien viera como sufría dentro de una relación me hacía ver la realidad de las cosas. Yuqi se las había ingeniado para que nuestra relación fuera demasiado dañina para los dos. Los espectáculos que daba a nuestros amigos o incluso q nuestros familiares no eran normales, el hecho de que alguien te haga quedar mal hacía que cierto cariño parecieran humos en vez de nubes densas.

Pero a pesar de todo ello, idealice a Yuqi cómo alguien llena de cariño y amor, alguien que estaba para mí apoyándome en cualquier locura que pasará por mi mente. Cómo cualquier persona enamorada, pasamos por la época en dónde desconfiábamos, pero nunca pudimos salir de ahí y aunque duele aceptarlo, una relación tiene mucho más metas y obstáculos que quedarse en etapas dañinas.

Actualmente solo quería que ella estuviera bien y que mi relación con YoonGi no le afectara en nada. Tal vez al principio le dolería pero sanaría, sabía que me entendería, ella a pesar de todo era muy compresiva con temas como estos, sé que la alago mucho, pero es porque la conozco y sé que a pesar de todo tiene un corazón que derrumba amor.

Sé que estuvo mal de mi parte ocultarle algo como esto y más que todo haberle fallado en la relación que teníamos. Sabía que al principio de esa relación me había engañado, pero lo había perdonado porque en verdad la amaba, pero llego YoonGi y me di cuenta de otro concepto de amor, un amor diferente y sincero lleno de nuevas experiencias que cada día vivíamos juntos.

Me encontraba en casa, había acabado antes mi jornada de instituto, estaba en mi cama mientras trataba de ordenar algunos asuntos de mis materias de clases, se había puesto muy difícil últimamente, pero sabía que dominaría todas estas materias, tenía sueños muy altos para mi vida y esperaba con ansias cumplirlos.

Tenía tantas ideas de profesiones en mi cabeza que no sabía cuál elegiría y mientras ese día llegara decidí esforzarme y dar lo mejor de mí en la institución y por supuesto en esa prueba de admisión que debía dar unos meses después de acabar mi ciclo escolar, no le había preguntado aun que era lo que escogería YoonGi así que esperaba que más tarde pudiera estar conmigo para tratar estos temas de estudios.

Tenía que ser honesto no sabía si YoonGi escogería una universidad, posiblemente se quede trabajando en una fábrica familiar que está a su mandado y pues otra razón por la que creyera que no iba a estar en la universidad, era porque siempre decía que el sistema educativo de corea era un total desastre, aunque también globalizaba eso. Aquello siempre me hacia sonreír de sobremanera y es que a pesar de tener un humor diferente al mío, cada chiste o comentario sacaba una risa poco intencional de mi parte.

Estaba sumergido aun en todos estos libros y cuadernos que no me estaba notando de que alguien llamaba en la parte de debajo de la casa. Tuve que dejar a un lado todas mis cosas y bajar ya que nadie más que yo, estaba en casa. Al momento que abrí la puerta me sorprendió mucho ver a la persona que se encontraba fuera. Me percate que afuera estaba haciendo un frio terrible y sin más le ofrecí que pasara, no quería que muriera de frio.

— Yuqi... ¿Qué haces aquí....?

— Hola HoSeok, perdón que haya venido hasta aquí es solo que quería verte y poder conversar.

No podía ser descortés así que la invite sentarse a los muebles, a lo cual ella asedió. Ella recorría cada extremo de la casa con su mirada, pasaron alrededor de dos minutos hasta que ella hablo.

— ¿Estas solo...?

— Sí, mi familia salió hace media hora.

— Entiendo...— Respondió volviendo a centrar su mirada en mí— Seguro te has de estar preguntando qué hago aquí...

— Sí, justamente eso... Iba a preguntar...

— Bien como dije al principio solo quería hablar, ya que supongo al menos podemos quedar como amigos y como sabes siempre fuiste mi paño de lágrimas y justo ahora necesito de alguien que me apoye. — Dijo mientras bajaba la mirada.

— Yuqi sabes que siempre contaras conmigo, así que lo que quieras por favor dímelo...

— Enserio eres el mejor... — Respondió levantándose de su asiento para dirigirse hasta mí y luego abrazarme. Deje que lo haga, no tenía nada de malo que ella quiera estar conmigo de esta forma.

— ¿Me contaras que te tiene de esta manera? — Pregunte, mientras ella se alejaba para tomar asiento y continúo hablando.

— Lo que pasa es que cometí algo muy malo y creo que ya no puedo dar marcha atrás...

— ¿Qué es eso malo que has cometido? Y ¿Por qué no puedes dar marcha atrás?

— No puedo dar marcha atrás porque estoy justo en el objetivo principal. — Respondió desconcertándome, dirigí mi mirada a su rostro y por primera vez vi esa luz de maldad dentro de ella.

— ¿A qué te... refieres?— Pregunté, Yuqi empezó a reírse mientras se enderezaba en su asiento.

— Te contare desde el principio lindo. La verdad comienza desde tu pequeño maltratado hacia mí. Creíste que no me enteraría de tu repentino romance con el idiota ese...— No respondí — Realmente piensas que puedes ser feliz así por así, estas muy equivocado con ese concepto de que no sufrirás tu karma. — una de sus manos se dirigió al pequeño bolsillo del abrigo que traía puesto, saco su celular y comenzó a teclear algo. — Listo, ¿Estás preparado para el comienzo de tu peor pesadilla, cariño?

— ¡¿De qué rayos hablas...?!

— Te acuerdas de NamJoon, aquel tipo sin duda es un encanto, me ayudó mucho últimamente y pues como necesitaba calmar esta sensación de vengativa que tengo, él se ofreció humildemente a ayudarme con esto que vivirás...

— ¡Pero ese tipo le hizo daño a Min Young, ella es tu amiga! — Termine de decir y ella comenzó a reír.

— Tienes el descaro de llamarla mi amiga, cuando fue ella la responsable de que me estuvieran viendo la cara todo este tiempo. — Mierda, ¿Cómo sabia ella eso? — Te quedaste sin palabras, cielo.

— ¿Cómo...? — Pude articular decir.

— Recuerda que yo siempre estoy atenta a todo, pero no te preocupes su sufrimiento es una parte que no me toca a mí. — Se dirigió a una de las puertas y dejo a pasar a dos tipos, en encontraba tan choqueado que no me di cuenta de que me habían agarrado mi brazo para inyectar algo. Lo último que recuerdo son las palabras que Yuqi dijo antes de caer inconsciente.

— Prometí que me las pagarías y eso estoy cumpliendo...