✔️TWENTY-SIX

55 9 1
                                    

||Ni En Un Día Se Quiere Ni En Dos Se Olvida... ||

Habían pasado alrededor de dos semanas desde la última vez que volví a topar una sola palabra con JiMin, incluso aquel mensaje que había enviado no lo respondí por el simple hecho de que aquel mensaje me parecía una total falta. No volví acercarme a él y mucho menos hemos intercambiado una sola palabra. Su comportamiento me había parecido fuera de lugar, pero tenía que aceptar que el simple hecho de saber de su relación con Miyeon hacía que una pequeña pulsada en mi pecho hiciera inicio, pero la verdad es que no sé a qué se debe aquello. Me negaba rotundamente aceptar que eso se debía a un gusto por él, eso no era lo mío, yo no me iba a enamorar de Park, nunca.

Había deteste que creyera que me metería a su relación con ella para ser plato de segunda mesa, no quisiera que eso me hicieran a mí, esa fue la principal razón de que tomara la decisión de no volver hablar con él. Simplemente no lo quería cerca de mí.

Cuando llegue el día después a la escuela recuerdo cómo hizo varios intentos por acercarse a mí, pero yo aún no me siento lista para entablar una conversación con él, simplemente por respeto, el cual el debería dar a su relación y no andarme buscándome sabiendo lo que ha dicho antes. Tal vez solo quiera terminar como mi amigo, pero yo no quiero ser amiga de alguien que me trato para segunda cosa. Luego de esos día no lo ví por bastante tiempo... Al menos no hacia las escenas de amor con Miyeon en todo el instituto.

Evitando todos los problemas que esto había causado en mi mente, solo había una persona que me hacía olvidar de ellos, TaeHyung quien se encontraba ahora mismo a mi lado. Estos días ha pasado más tiempo conmigo de hecho sabe quedarse a dormir en mi casa, pero obvio mis padres no me dejan dormir con hombres así que le dan la habitación de huéspedes. Aunque en horas de la madrugada sabe ir a mi habitación y nos quedamos juntos hasta altas horas de la noche conversando, y soy la primera que se duerme y cuando él se da cuenta se va a su habitación.

Justo ahora nos encontrábamos en la sala viendo películas, yo estaba recostada en sus piernas, mientras él jugaba con mis cabellos. La película era una extraña aparición de secretos, un poco interesante, pero para mí vista pareció que no, ya que se desvío al rostro de TaeHyung. Enserio este chico tenía una belleza impresionante... Pero eso no era todo, él era todo un combo de chico perfecto, lleno de personas que amaba de él y el tan lleno de alegría y amor por los demás, era alguien tan carismático que seguro que cualquier persona que recién lo conozca quedaría encantada con su personalidad y su capacidad de llegar a socializar.

Él se veía tan sumido en la película lo cual lo hacía ver cada vez más lindo, sus labios tan rosados y un poco fruncidos al estar pensando en el posible final que dará esas escenas, hacía que todo de él fuera perfecto. Mi mirada no se separó ni un solo segundo de su rostro y él se dio cuenta de ello...

— ¿Qué tanto me miras, pequeña...?— Pregunto tímidamente.

Había una pequeña historia que mi mente había formado tiempo atrás y era que TaeHyung era concedieron la sonrisa del niño eterno, porque no importa cuántos años tenga siempre te va a transmite esa aura tan pura e inocente y era cierto, cada sonrisa que Tae daba a más personas transmitía ese aura de un niño, un niño lleno de amor y alegría.

— Eres muy hermoso, Tae...

— ¿Qué? — Hablo soltando una carcajada— Creo que las palomitas te hicieron daño o posiblemente sea la bebida.

— Lo siento, pensé en voz alta — Hable sentándome, — Pero en verdad, Tae. Eres demasiado hermoso.

Recientemente he estado expresando cosas que veo en las personas más cercanas a mí, aunque raras veces me pasa eso de decirlo en voz alta. La última vez le había terminado diciendo idiota a Eun Woo por no darme una de sus hojas de cuadro para un examen... Bueno en ese momento si pase un poco de vergüenza.

ᴘʀoмιsᴇs нᴀʟʟ || втѕDonde viven las historias. Descúbrelo ahora