60. entrenando un ejército.

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—joder, no quiero ir.— se quejo Mattheo mientras se estiraba. Era la cena y debían presentarse en el comedor, ante los insoportables de Lucius y los hermanos Northwestern. En parte él deseaba que Lucius empezará a presumir sobre sobre su matrimonio únicamente para que Jasper dejara de joder a su esposa.

—¿Estás listo?— llegó hasta él con su vestido elegante y abrigo.— ¿O te arreglarás más para... Kira?

—ay, basta. Ni recordaba su nombre.— rio a la par de Amelie.— en cambio tú con Jasper...

—uy si.— bromeó besando sus labios. Habían conversado sobre eso antes de bajar, y llegaron a la conclusión de que en realidad no les afectaba su presencia cuando no llegaron siquiera a quererlos. Solo se molestarían si hacían algo para dañar su relación, aunque sabían que no la afectarían.

—okey, bajemos.— dijo mientras se encaminaban a la escalera y tomaban sus manos. Al llegar pudieron ver cómo habían muchas personas, muchos jóvenes en realidad, muchos de ellos mostraban orgullosos la marca que portaban. Eran a quienes tenían encargados para entrenar y preparar para que fueran realmente útiles para esta guerra.

—¡Acá están!— todos le pusieron atención ante el grito de Lucius a la pareja que venían entrando. Mattheo abrazo su cintura llegando hasta los puestos asignados que tenían.— estoy muy feliz de tenerlos a todos acá. Se unieron muchos jóvenes y contamos con la lealtad de cada uno. Debemos prepararnos, así que me tomé la libertad de asignar quien será el tutor de cada cosa. Hay tres grupos, dónde se especificarán. Al menos podrán elegir en cuál estar.

—¿Y grupos de qué hay?— preguntó Tom curioso, aunque sabía que él era quien enseñaría a cierto grupo.

—a eso iba. Bueno, como saben mi hija Amelie, próxima Riddle, ha estado entrenando desde que era una niña. Tiene una gran destreza en defensa personal, cuerpo contra cuerpo. Será la primera clase de mañana por la mañana, dónde aprenderán a como vencer al oponente si los dos no tienen varita. El segundo grupo será de los chicos que ocuparán armas, aparte de las varitas. Tom Riddle será el encargado de hoy por la tarde mostrarles unas clases de puntería y precisión para después ponerlo en práctica. Mi hijo, Draco Malfoy los ayudará en defensa contra las artes oscuras mientras que Pansy Parkinson junto a Blaise Zabini les enseñaran agilidad, planificación espontánea, y como moverse rápido entre todo el caos para ser quienes salven o lleven a los heridos a dónde estaremos plantados para ayudarlos.

—¿Y primeros auxilios?— preguntó un joven atemorizado.

—le encargamos esa tarea a las esposas de nosotros, no se preocupen por eso. Quiero que sean puntuales o recibirán un castigo desde ya. Necesito que busquen su máximo potencial.

—wow señor Lucius, es un excelente plan.— halago Kira recibiendo una sonrisa de triunfo de él. Miró a Mattheo quien le hizo un desprecio, a su lado Amelie la miraba fijamente. Una guerra de miradas comenzó, una en la que ninguna estaba dispuesta a perder. Amelie estaba sería mientras Kira sonreía burlesca, ninguna parpadeaba, sin embargo los ojos de Kira comenzaron a arder y ponerse vidriosos. Finalmente bajo la mirada para parpadear varias veces por el ardor.

Cuando volvió a mirar a la chica Malfoy, quien le dió una sonrisa ladina y burlesca que la hizo endurecer del enojo. Amelie apartó la mirada y arreglo su cabello sintiéndose ganadora, no por la guerra de miradas, si no por el hombre que tenía al lado.

Se apoyo en su mano haciendo evidente el gran anillo de diamantes que adornaba su anular. Esto la hizo sentir que caía, pero no quería caer sola sin arrastrar a alguno de los dos. Y si, era rencorosa, sin embargo no perdería cuando había tenido todo lo que quiso de niña. Le importaba nada el que Jasper le pidiera que no hiciera nada y dejara ser feliz a la chica que le gustaba. Tan Hufflepuff, según Kira.

𝐌𝐢𝐚 𝐎 𝐃𝐞 𝐍𝐚𝐝𝐢𝐞- 𝐌𝐚𝐭𝐭𝐡𝐞𝐨 𝐑𝐢𝐝𝐝𝐥𝐞 [+18] «En Edición»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora