Capítulo ✨17✨

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Quiero aclarar una cosa antes que nada, hay teorías que dicen el cinturón de asteroides en el sistema solar anteriormente fue un planeta destruido por una colisión de meteoritos y otros mencionan en sus teorías locas que fue una guerra intergaláctica xD! Así que no vean muy raro que aparezca un planeta extra. También aviso que iremos al pasado, esto para poder dar entrada a lo que sigue.

✨✨✨🌙✨✨✨

1000 años antes
planeta Kitzu — Reino de Ether

El sonido del agua caer se podía oír en los pasillos del palacio, la luz solar se alzaba a la distancia iluminando cada rincón del planeta, las aves comenzaban su vuelo matutino con su habitual canto mañanero. Los guardias bostezaban luego de haber cumplido su guardia nocturna. Un par de pasos apresurados irrumpieron la quietud de esa mañana, su largo vestido fucsia se movía entre cada paso que daba, su cabello negro azulado era movido debido a su andar apresurado, sus ojos de un inusual color olivo brillaban de una forma diferente. Escucho el relinchar de un caballo en el jardín principal. Sonrió al verlo bajar del caballo no pudo evitar sonreír, su armadura color bronce brillaba a causa de los primeros rayos del sol, busco calmar su respiración antes de poder acercarse.

— ¡Majestad! — Una gran sonrisa se formó en sus labios al verlo quitarse el casco, su cabello negro era sacudido por el viento, sus ojos color púrpura se veían cansados, pero al fijar su mirada en ella todo rastro de cansancio desapareció. Dejo el casco con su compañero antes de ir a su lado, tomo sus manos besándolas. — Estoy feliz de verlo con bien.

— Miko, merezco un recibimiento más cariñoso, ¿No crees? — Un sonrojo adorno sus mejillas. — Eres la esposa de un rey muy poderoso, el mejor de la galaxia.

— ¡Oh por los dioses Ates! — Rompió a reír causando que más de uno volviera a mirarla. — Siempre eres tan egocéntrico y engreído.

— Es un don que me otorgó la diosa madre. — Su esposa solo negó levemente. — Invite al reino de la tierra y la luna.

— ¿Qué? ¿Por qué no consultaste conmigo? — Ates la abrazo por los hombros mientras se alejaban de sus compañeros de batalla. — Estamos en guerra con ellos, no debiste hacer algo así.

— Es lo justo, debemos hacer la paz, desde el primer reinado hemos estado en guerra, Artemisa fue la primera en tomar las armas y desde entonces no hemos detenido el derramamiento de sangre. — Miko le escuchaba atentamente, pensó en sus palabras dandole la razón. — No quiero que Orión crezca en un mundo llenó de Caos.

— Supe que el reino de la tierra tiene un heredero, el príncipe Endimion y la luna una princesa, Serenity. — Asintió. — Quizás puedan ser buenos amigos.

— En eso pienso, podremos aprender unos de otros. — Miko se sentía feliz al pensar que los días de batallas acabarían y por fin su gente podría vivir en paz sin miedo a que pudiesen ser enviados a la guerra y perder lo que amaban.

— La sacerdotisa dice que Orión será un gran líder y tendrá muchos retos que enfrentar. — Se detuvo en medio del pasillo, recordó las últimas palabras de aquella mujer: "Si haces está tregua tu línea de sangre acabará, habrá traiciones y al final tú hijo pagará con sangre".

Decidió olvidar sus palabras, nada estaba escrito en piedra o eso pensaba. Miko le dió un jalón a su brazo izquierdo pidiéndole detenerse, se había dado cuenta de su mirada de preocupación de un momento al otro y conocía a su rey como para saber que algo le inquietaba.

— No me mientas. — Él suspiro antes de poder besar su frente. — ¿Ates?

— Tranquila mi reina, todo estará bien y podemos vivir por fin en una época de paz. — Miko asintio, le abrazo una vez más. — Se que tienes miedo, pero te prometo que no es un error.

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