Ruinas del Milenio de Plata
Saturn se arrodilló al ver a la reina seguida de sus amigas y consejeros de la princesa, la Sailor del silencio recordaba su última visita donde se encontró con la reina Artemisa, dónde recordó que ella era igual a Orión, ambos traían consigo la soledad y destrucción, pero en el fondo sabía que él no podía ser de aquella manera, recordaba su mirada esperanzadora en el último momento cuando decidió destruir su hogar reduciendolo a un montón de piedras espaciales sin ningún fin en el espacio, el cinturón de asteroides estaba allí por causa suya, pero en especial de la mujer que dió la orden de destruir su planeta presa del dolor y la tristeza de pensar que su hija moriría en manos de sus enemigos.
"Que tonta fui". — Con aquel pensamiento en su mente miró a Venus, aquella quién era la confidente de la princesa tanto en el pasado como en el presente, podía notar en la mirada de la rubia confusión y al mismo tiempo enojó, quizás ella recordaba parte del pasado que la reina borro con el cristal de plata.
— ¿Dónde está el bebé? — La pregunta de Sailor Mercury sorprendió a todas sus compañeras. — Es decir, ¿Qué pasó con el bebé de la princesa?
Un jadeo de sorpresa por parte de sus compañeras no se hizo esperar, la reina Serenity les dió la espalda mientras sentía como las guerreras la miraban con duda y al mismo tiempo enojó.
— ¿De qué hablas? — Uranus fue quien rompió el silencio, ella no quería aceptar que algo así hubiese pasado y la reina sencillamente lo ocultara en las memorias de todos. — Nuestra princesa y Endimion no tuvieron hijos en el pasado.
— Endimion no, Orión. — Venus llevo sus manos a su cabeza sintiendo dolor. — Nuestra princesa amaba al rey Orión.
Serenity las miro una vez más, la insignia en cada una de las guerreras brillo, lo mismo sucedió con luna y Artemis, todos comenzaron a ver cómo se desvanecian las cosas a su alrededor y el sueño las invadía hasta caer inconscientes en el salón de oración, la reina sentía verdadera culpa al darse cuenta de su error, de dejarse llevar por aquella mujer y escuchar sus enredos hasta ella misma impulsar a su hija a los brazos de Endimion.
La reina lloraba presa del pánico mientras Luna trataba por todos los medios de calmar sus nervios, había pasado más de dos horas desde que su hija tomo la decisión de huir con quién sería el padre del bebé en su vientre, no sabía en qué momento su pequeña niña se encontró con aquel sujeto o quizás sí tenía una idea de cuando y donde fue, recordó sus viajes constantes por estudios al reino de Júpiter, cada vez que volvía su mirada era diferente, se sentía estúpida al no darse cuenta de la realidad, su hija se enamoro de alguien que para ella era desconocido y hubiese deseado que fuese un plebeyo pero no aquel hombre hijo de sus enemigos, hijo de quién en el pasado culpo de asesinar a su reina y mató a su esposo ante sus ojos. Las puertas del salón se abrieron, levantó la mirada al ver a las tres jóvenes que entraban al palacio, una de ellas alta de cabellera color arena, en sus manos portaba un sable, cualquiera diría que venía atacarla pero al arrodillarse ante ella todo ese pensamiento se desechó, a su lado una joven de cabellos aguamarina, su mirada fría se poso en la guardiana de Urano, ambas no se llevaban bien, desde épocas antiguas Urano y Neptuno compartían un fuerte lazo de odio, solo se soportaban por su deber con la reina Serenity al ser guardianas del sistema solar externo, el motivo de aquel odio fue el hecho de que en el pasado el rey de Neptuno negó la mano en matrimonio al príncipe de Urano de su única hija, al padre de la princesa y guerrera del planeta, ambos fueron casados a la fuerza pero en un desesperado intento de amarse una vez más escaparon de sus deberes y la princesa Nagumi murió al ser atacada por los soldados de la reina regente del reino del viento, el rey se quitó la vida después de ese evento, ambos en su último suspiro juraron verse una vez más y amarse. Algunos dirían que era una historia hermosa y trágica, pero no era así, la reina regente y madre de la princesa les condeno a no poder consumar su amor con un lazo sanguíneo en algún futuro.

ESTÁS LEYENDO
Cenizas
ФанфикEl Milenio de Plata siempre se vio como el inicio de todo, un reino fuerte protegido por la reina Serenity, pero más allá de su legado se escondían muchas cosas. Artemisa diosa de la luna, hija de Selene y Apolo, fue la encargada de proteger los sec...