Capítulo 5

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5. Juegos y mentiras

 Juegos y mentiras

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Fin de semana, un sábado soleado y con un aire fresco, perfecto para salir a disfrutar

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Fin de semana, un sábado soleado y con un aire fresco, perfecto para salir a disfrutar. Por la ventana, la ojiazul podía ver algunos niños del vecindario salir a montar sus bicicletas, jugando con sus mascotas o simplemente conversando con sus amigos. Jae-Eun adoraba a los niños, pero sabía que cualquiera que la escuchara decirlo pensaría que mentía.

Lo entiende, ella también se sorprende que los infantes sean de su agrado. La mayoría de jóvenes de su edad los odian, dicen que son estorbos y chillones. Irónicamente Jae-Eun siempre se ha sentido así, tal vez por eso hace una conexión con los pequeños.

Ella cerró el libro que leía, uno de romance trágico mezclado con fantasía. Al menos eso le había levantado el ánimo en este día aburrido y solitario. Jaesun había salido con su grupo de amigas, aunque estaban peleadas, Jae-Eun sentía un aire desolado y triste en la gigante casa. Estaba acostumbrada a escuchar la música de su hermana a todo volumen, pero ahora solo era capaz de percibir los sonidos de la ciudad. Nada emocionante.

Excepto que de repente, el rugido de una motocicleta agudizó sus sentidos. Por más tonto que suene, ese ruido característico de aquellos vehículos era bastante familiar para la chica.

─Joder. ─resopló, bajando su mirada y cerraba los ojos. Pero los abrió de inmediato.

Se levantó de su cama dando pistones hasta llegar a la puerta, donde echó un vistazo por última vez a través de la mirilla que el chico que suponía se bajaba de su motocicleta quitándose el casco y sacudiendo su cabello para peinarlo de alguna forma.

─Parece actor de película, película mal hecha. ─pensó Jae-Eun en voz alta, riendo en susurro por sus propias malas bromas.

Sunghoon caminó hacia la puerta de la vivienda primorosa de Jae-Eun, lucía sonriente pero sus aires de altanería nunca desaparecían. Él presionó el timbre dos veces seguidas siendo insistente, pese a que su postura parecía tranquilo, sin ninguna inquietud sobre él.

Jae-Eun se apartó acomodando su cabello, tomó la perilla e iba a abrir la puerta pero la voz de su hermana sonó en su cabeza con eco, de forma demandante.

DADDY ISSUES, park sunghoon.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora