私を倒さないで - no me dejes caer

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"¿Puedes ir más rápido?"

"Lo estoy intentando, Señorita. Parece que hay mucho trafico en este momento...."

"¡Por favor! Necesito llegar al hospital, ¡Alguien necesita mi ayuda!" Supliqué, inclinándome hacia adelante contra el asiento del conductor, reprendiendo al taxista. "Es una emergencia." Enfaticé, moviéndome y presionando mi rostro contra la ventana de vidrio, mirando a los autos delante de nosotros. ¿Por qué ahora? ¿De todos los días que hay? ¿Por qué tiene que haber un accidente en esta carretera? 

Las bocinas sonaron unas sobre otras mientras los conductores agitados gritaban enojados, escupiendo insultos sobre quién cortaba a quién o quién iba más lento. No lo lograré en éste lugar. Suspiré profundamente, viendo la señal de mi salida a sólo una milla de distancia.

"Lo siento, señorita, parece que estaremos atrapados aquí por un tiempo."

Mierda.

Bajé la mirada hacia mis piernas, mi piel (c/p) se asomaba por debajo del borde de mi falda. No he intentado caminar largas distancias, mucho menos correr. Cerré los ojos, apretando los puños y golpeándolos contra mis rodillas. Ahora es el momento de ser valiente, (t/n). Eres un héroe, ¿no?

Puedo hacerlo. Puedo hacerlo.

"Debe haber algún tipo de accidente en el puente..." Murmuró el conductor, levantando la cabeza, tratando de ver por encima de la multitud., "No sé cuánto tiempo-. ¡Hey! ¡Eso es una mala idea-!"

Lo interrumpí abriendo la puerta del auto, saliendo a la carretera. Respiré profundo, colgando mi bolso sobre mi hombro mientras deseaba que mis piernas dejaran de temblar. ¿Y si colapso? ¿Qué si mis piernas se rinden? Me quedaré sin forma de caminar. Tragué saliva, sacudiendo la cabeza. Ellos me necesitan. Corrí por el carril de los autos, mis piernas moviéndose fuera de la memoria muscular, llevándome más y más rápido a la par que el viento rompía contra mi rostro. Me sentí liberada. Una sonrisa se expandió por mis labios, urgiéndome correr más rápido. Estoy corriendo. Hace un mes ni siquiera podía caminar, y ahora estoy corriendo por una carretera llena de cientos de autos. 

Shota me regañaría por hacer algo tan estúpido

Una punzada se disparó en mi pecho al pensar en el hombre al que llegué a amar más que a nada y a nadie en el mundo. Estoy corriendo a toda velocidad hacia Izuku en lugar de tratar de averiguar dónde diablos se llevaron a Shota. Pero Izuku dijo que había una chica que no podía controlar su quirk... Pensé en Umi, recordando que estaba atrapada debajo del centro comercial en ruinas, pero todos la dejaron allí, ni una sola persona trató de ayudar. Todos estaban demasiado asustados por algo que no podían controlar. ¿Qué si la situación es similar? ¿Y si la niña pudiera ponerse en peligro a sí misma  y a los demás? La única persona capaz de detener los quirks es Shota, y si él no estaba, yo era la mejor opción. Debo estar ahí para esa niña. Incluso si cada fibra de mi ser quiere encontrar a Shota, primero tengo que hacer esto. 

Mis músculos dolieron cuando levanté la mirada para ver el humo que se acumulaba en el aire. El accidente debe haber sido bastante grave. Mi ritmo se aceleró al observar gente saliendo de sus autos, empujándome y corriendo a toda velocidad en la dirección opuesta. Miré a mi alrededor, la gente chocaba conmigo, gritaban cosas incoherentes, arrastraban a sus hijos de la muñeca mientras sus ojos se retorcían de miedo.

Un grito.

Una sensación de hundimiento bombardeó el centro de mi estómago cuando un grito espeluznante atravesó el aire bochornoso, un aullido de alguien con el peor tipo de dolor. Mis movimientos se detuvieron cuando jadeé ante la escena frente a mí. Los autos estaban volcados, algunos cuerpos pertenecientes a oficiales de policía y un pro hero yacían esparcidos en el pavimento agrietado. Y un pequeño grupo de personas se cernieron sobre alguien atado a un bloque de aspecto blanco, el hombre acostado con sangre derramándose de sus brazos, acumulándose en el suelo debajo de él mientras gritaba. Una sensación de malestar se apoderó de mí cuando mi rostro se puso pálido. ¿En qué me acabo de meter? Los hombres se giraron hacia mí, uno de ellos captó mis ojos cuando reconocí de inmediato esas quemaduras que decoraban su piel.

Erase Her ゾごホ (Español)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora